Escenarios (Aoyama Yuuga) [BNHA]

Escenario 11 (DekuYama)

🔻🔸🌟🔸🔻

Título: Sweet Emerald and Dark Amethyst.
Temática: Villain - Hot (ligero).

🔺🔸🌟🔸🔺

El peliverde pecoso no podía evitar mirar el atardecer, encima de una azotea de algún conjunto de departamentos. Sus ojos estaban irritados por tanto llorar, su cuerpo temblaba ligeramente, dirigiendo si mirada hacia abajo, estaba preparado para saltar.

Quizás de esa manera podría renacer con un quirk para ser un héroe en el futuro, ¿no?

Derramando más lágrimas, se iba a preparar para saltar, pero una voz masculina pero algo afeminada lo detuvo detrás suyo.

—Oh, no te recomiendo que saltes, Mon Ami~

Izuku se dio la vuelta para tratar de averiguar de quién se trataba, se sorprendió al ver a un chico mayor que él con un traje extraño, parecía un héroe profesional no sabía muy bien de ello. Pero descartó esa idea al ver que sus ojos no tenían brillo alguno y parecía un poco pálido con ojeras muy notables.

—¿E-Eh...?

—Los héroes... ¿te hicieron daño~?

Aquella pregunta dejó helado al menor, sujetando con fuerza su mochila amarilla entre sus brazos, no pudo evitar sentir como sus ojos se llenaban de lágrimas nuevamente. Desvío la mirada hacia un lado, sin llegar a responderle al mayor, quien se había acercado un poco al pecoso, sonriendo de manera leve pero... parecía una sonrisa melancólica.

—Vamos, mon petit lapin...— le estrechó la mano, sin borrar aquella sonrisa de su rostro, el chico más bajo se le quedó mirando aquella mano, sin dejar de llorar nuevamente —no dejaré que nadie te lastime, te lo prometo.

El pecoso tragó grueso, y de manera nerviosa, sostuvo la mano del mayor, que extrañamente era muy cálida, y le llenaba de seguridad y confianza.

No sabía cómo describirlo.

🌸🕊️🌸

Habían pasado meses desde que el pecoso y el francés se habían conocido y hecho amigos muy cercanos. Midoriya había perdido el interés de ser un héroe desde aquel día gracias a las palabras de All Might, y Aoyama no lo culpaba, había pasado lo mío con su ídolo, solo que éste era su padre, quien le dijo que se olvidara de ser un héroe ya que su Quirk era bastante inútil.

Aoyama había sentido empatía hacia el menor cuando lo vio en esa azotea.

Izuku sabía que su mejor amigo estaba metido en cosas ilegales, muy ilegales. Era un villano underground, no muy conocido por los héroes profesionales no la ley. Sabía ocultarse muy bien y no ser descubierto por ellos.

Por alguna razón no le molestaba ni le asustaba aquello.

En un día de lluvia, ambos amigos tuvieron que correr hacia la casa del francés, pues era más cercano que la casa del pecoso. El rubio pensó que agradeció por los cielos que sus padres no estaban en casa y ni sus hermanas mayores.

—Mon lapin, iré por una toalla, espérame tantito— le dice el de ojos lilas cuando estaban en la sala de la casa, revolviéndole los cabellos al menor, antes de irse al segundo piso.

Midoriya trató de no acercarse a ningún mueble, ni siquiera a los sillones muy bien cuidados que tenía la sala, solo miraba el lugar sin moverse mucho de su lugar. No podía creer que incluso la casa de Aoyama sería igual de brillante que él, y ante ese pensamiento, se sonrojó demasiado y se puso muy nervioso.