Día 7

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Diez razones para no morir

Dia 7

Casi todas las chicas de mi escuela estaban enamoradas de Evan Woods. Quiero decir, supongo que podría entender por qué lo harían, sin embargo. Era uno de los únicos hombres en esta escuela que no era un completo idiota, y para rematar con un toque de cereza y arco iris, era muy guapo.

Lo juro, escucho que al menos una chica se desmaya sobre lo hermosos que son sus ojos verdes todos los días.

Pero, a pesar del hecho de que Evan tenía chicas cayendo a sus pies todos los días, no parecía interesarse en ninguna de ellas. Los rumores son, nunca ha tenido una novia seria antes.

Es por eso que lo encontré bastante sorprendente cuando encontré una hermosa pelirroja presionada contra él en los pasillos el siguiente día escolar.

No pude entender lo que estaban diciendo desde la distancia en la que estaba parado, pero ella se estaba riendo de algo que él dijo. Incluso un ciego podría decir que los dos estaban coqueteando.

- ¡Eso no es justo! .- Silbó una niña que estaba a unos pocos casilleros.- He estado tratando de hacer que Evan me hable el año pasado .

- Ella es tan afortunada.- Una chica celosa gruñó por lo bajo .-

No pude evitar preguntarme si era una de los afortunadas, considerando el hecho de que Evan quiere salvar mi vida . Me reí en voz baja, sacudiendo la cabeza mientras cerraba la puerta de mi casillero.

Para mi consternación, me vi obligada a pasar por delante de Evan y la pelirroja para llegar a mi primera clase. Justo cuando di un paso adelante de los dos, Evan se apartó de la pelirroja. 

- ¡Remy! .- Gritó, haciéndome parar en seco .-

Me di la vuelta lentamente, dándole una débil sonrisa. La pelirrojo con el que estaba me estaba lanzando miradas asesinas , mientras ponía los ojos en blanco. 

- Evan, ¿no me prometiste que me llevarías a clase hoy? .- Preguntó ella, levantando una ceja.

Evan se sonrojó, girándose hacia mí. 

- ¿Puedo posponer eso para mañana, Aubrey? .

Aubrey apretó la mandíbula, golpeando con disgusto su pierna . 

- Bien.- Ella siseó, pavoneándose con sus shorts demasiado cortos.-

- ¿Acabas de dejar ir  a Aubrey Small por mí? .- Pregunté en tono de broma .-

Evan sonrió, mirándome a los ojos. 

- Sí .

Mis mejillas se calentaron, mientras tragaba saliva. Nunca me sentí de esta manera antes. ¿Por qué estaba teniendo este tipo de reacción alrededor de Evan? 

- Oh .- Me recompuse rápidamente, mientras me aclaraba la garganta.- Sin embargo, me gustaría darle a tu novia un buen golpe en la cara. ¿Viste la forma en que estaba lanzandome miradas asesinas?

Evan me dio una sonrisa torcida, pasando una mano por su desordenado cabello castaño. 

- Ella no es mi novia .

Yo resoplé. 

- Bien, entonces ustedes son conocidos que se presionan unos contra otros .

 - Ella vino hacia mí.- Evan se encogió de hombros.- Solo estaba siendo amable.

- Podrías haberla empujado lejos.- Murmuré, agarrando fuertemente mis libros. ¿Por qué sonaba tan celosa? Quiero decir, no era como si Evan fuera mío o algo así.- Solo olvídalo .

Evan me miró con curiosidad, antes de que un pequeño sonrojo subiera por su cuello. 

- Me gusta alguien más, de todos modos .

Mi cabeza se giró hacia él, mientras levantaba una ceja. 

-¿Quien? .

Evan me dio una sonrisa, tocando mi nariz con la punta de sus dedos. 

-Alguien.

Crucé los brazos cuando Evan comenzó a alejarse de mí, por el pasillo. Lo perseguí, poniendo una mano en su hombro para darle la vuelta. 

- Evan, dime.

Evan sonrió, sorprendiéndome levantando su mano y rozando un mechón de mis oscuros mechones detrás de mis orejas. Mis ojos se ensancharon, mientras los ojos verdes de Evan brillaban en los míos. 

- No te suicides  y te diré quién me gusta, pronto .

Diez Razones Para No MorirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora