A pasado tres dias desde nuestra conversación y aún no puedo imaginar que toda mi vida he sido un inmortal, más bien dicho un cambiante.
Pense contárselo a mis padres sobre aquello pero he decidido no contarles, imagino la cara que pongan al hacerlo. Sería tipo:
<acaso te has vuelto loco>
<no vengas con tonterías>
<dónde está ese anciano para hablar seriamente con él>
Ya imagino lo que dirían.
Pero bueno mi vída sigue siendo como la de un mortal y yo no veo ningun efecto de inmortalidad en mí. La vida sigue, sea inmortal o mortal además aproveche las vacasiones todo el verano, y espero que llegue el día de ir a clases una vez más.
No tengo ni la menor idea del porque cuando estas en clases quieres estar en vacaciones mientras si estas en vacaciones quieres estar en clases, pero que más da así somos los humanos. Y no digan que no les ha pasado.
2 Meses despúes
Desperté aburrido además aun con mucho sueño ya que llegó el día de clases y por mi maldita mortalidad ayer estuve despierto hasta muy tarde en Facebook.
Diriji mi cuerpo a la bañera para quitarme ese fatiga luego de hacerlo fuí al comedor.
Luego que mi madre me dió de desayunar fuí a cepillar mis dientes y recordé como si fuera ayer cuando fue mi primer día en Harrow, con un sacudon de cabeza vuelvo a la realidad y de una vez al vestidor para salir.
Salí de casa y en el camino mi mente imaginó a mis amigos caminando como aquel día, corrí a ellos pero al llegar desapacieron, solo había sido un recuerdo o eso creo. Cerré los ojos e imaginé aquellos momentos cuando éramos niños, una pequeña gota de agua corrió por mi mejilla—chicos nunca los olvidaré.
Al llegar empecé a buscar mi nombre en cada salón, era difícil desplazarse por aquel lugar ya que todos los alumnos también buscaban los suyos.
Había llegado temprano pero recordé el momento que yo y los gemelos estábamos como locos buscando nuestros nombres en cada salón.
Volví a la realidad cuando mi olfato percibió un aroma esquisto a rosas, perseguí el olor hasta encontrarme a una persona, más bien una chica.Es bajita, puedo jurar que me llega solo hasta la mandíbula, su cabello es de un color negro intenso, nunca había visto uno así, su piel es clara con un toque bronceado. Puedo asegurar que se ve tan suave. Mi mirada se encuentra con un cuerpo perfecto, seguro que hace ejercicio.
Mi vista sube hacia arriba, hacia su cara.
Mierda, estaré soñando.
Sus labios son rosados y con forma, además de gruesos. Su mandíbula no es tan marcada, dándole un volumen precioso a sus mejillas. Su nariz es pequeña y recta. Sus ojos son cafe precioso.
Ella voltea a mirarme y es cuando siento algo extraño dentro de mí, es como una corriente eléctrica. Es como si estuvieramos unidos en cuerpo y alma, nuestra mirada permanece hasta cuando voltea y sigue su destino.
Es ahí cuando dejo de pensar y me apresuro a buscar mi salón.
Caminé por el pasillo y me encontré con un salón, observé si mi nombre estaba en la hoja que estaba en la pared pero no lo estaba. Al bajar la mirada me encuentro con la mirada de aquel chica de ratos pero, prosigo al mirar a mis amigos entrar en un salón.
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Maldita Mortalidad [PAUSADA]
FantasyUstedes mirarán a un chico común y corriente pero no es así, soy capaz de hacer posible tu mayor fantasía en realidad. Tengo habilidades especiales saben ¿porqué?. Porque soy un cambiante. Sí, si escucharon bien un cambiante. Pero somos cazados por...