Tyler despertó al sentir besos por toda su cara y cuello, ya no sentía vergüenza, estaban completamente desnudos bajo las sábanas, sus piernas estaban enredadas. Josh lo hizo sentir en el paraiso, y quería que lo hiciera siempre, para poder tenerlo de esa misma manera todos los días.
- Buen dia, mi dulce bebé.
- Buen día, daddy.
Josh sonrió y lo puso encima de él. Tyler se recosto sobre su pecho besando la barbilla del contrario, la barba le estaba empezando a crecer y le encantaba el cosquilleo que le provocaba sobre sus labios.
Las manos de Josh bajaron al trasero del menor apretandolo. Tyler suspiro al sentir lo duro que estaba su daddy.
- ¿Te despertaste de buen humor, Daddy?
Beso su cuello y movio sus caderas, sintiendo como su miembro se empezaba a endurecer. Tyler se movía de lento y rudo, haciendo que Josh soltara suspiros de desesperación.
- Bebé, daddy necesita que lo ayudes.
Tyler gimio al escuchar su voz ronca.
- ¿Y qué puedo hacer por daddy?
La voz de Tyler era tan inocente y tan afeminada que si no fuera por el control que tenía Josh de si mismo, se hubiese corrido con tan sólo escucharlo hablar de esa forma.
- Daddy quiere que lo montes y no pares hasta que te corras sin tocarte, bebé.
Tyler abrió sus labios soltando un gran suspiro y se posicionó mejor, asintió y se froto un poco más, alejo su trasero del miembro de Josh, a lo que el mayor fruncio el ceño al no sentir nada sobre sus piernas, pero lo relajo al instante, sintió como la boca de su bebé succionaba su miembro, su lengua pasaba por su falo, despacio, era placentero y torturador a la vez, la boca de Tyler lo estaba volviendo loco. El menor seguía chupando, cada vez hundía mas el miembro de su daddy en su boca, llegando a meterlo entero, aguantando la respiración para evitar las arcadas, Josh gemia soltando palabras apenas coherentes.
- Oh, Tyler. Tu boca es la perfeccion. Sigue así cariño, vas muy bien.
Un ronco sonido salió de la garganta del mayor, haciéndolo llevar las manos al cabello del castaño. Empujando su cabeza contra su polla, estaba extasiado. Tyler gemia y sentía como su garganta vibraba y lo hacía sentir más placer, pero en verdad Josh quería que su pequeño angel montará su polla como si no hubiera un mañana.
Lo soltó despacio haciendo que Tyler volviera a la posición anterior, beso sus labios con ansias. Mientras masturbaba su erección y mojada sus dedos con su líquido preseminal para enterrarlos en el agujero rosado del pequeño, Tyler no se opuso a nada y dejo que Josh lo follara con sus dedos, estaba tan excitado que ya no dolia si lo hacía de esa manera, sus lenguas estaban en una guerra que parecía infinita, Josh saco sus dedos y tomo su hombría enterrandose en su bebé.
Tyler grito al sentir como entraba de una estocada. Llevo sus manos al pecho del mayor clavando sus uñas y gimio al recibir tres estocadas secas, Josh quería follarlo y dejarlo en cama por dias, pero se detuvo, está vez Tyler debía follarse así sólo.
- Vamos bebé, montame.
Tyler saltó sobre la polla de su daddy y calló de golpe.
- ¡Daddy!
Volvió a repetir el mismo movimiento sin parar, subía y bajaba con fuerza.
Josh tomo su cintura ayudándolo a bajar con mas fuerza. Si eso se podía.
- ¡Oh por dios, Tyler estás tan apretado!
Los gemidos eran cada vez más fuertes, igual que las embestidas, Tyler gritaba, le gustaba sentir la polla de su daddy dentro de él, sólo el podía saltar y utilizarlo como dildo, se estaba volviendo loco, ya no pensaba con razonamiento, estaba cerca del orgasmo, las uñas clavadas en el pecho de Josh fueron abandonadas y reemplazadas por las mordidas del menor que con cuatro saltitos más se corrió fuertemente, llevándolo más allá del clímax. Josh no se quedó atrás, entró siete veces más en su bebé y se corrió al sentir la como las paredes del interior del menor apretaban su polla por el reciente orgasmo.
Los dos estaban cansados y sudados.
Pero eso no les importo, Josh logro follarse una vez más a su bebé, y lo haría siempre que pudiera donde y a la hora que sea.
Tyler de apoco recuperó el habla y le sonrió al mayor.
- Que buena manera de despertar, Daddy.
- Una muy buena, princesa.
