A night of drinking and...

Pequeño error...

NOTA:
SI, ADIVINEN QUIEN VOLVIÓ... YO MERO.
UNA DISCULPA ENORME, ES QUE EL TRABAJO Y ESTUDIOS OCUPAN MI TIEMPO Y BUENO, TAMBIÉN LOS AMIGOS Y LA FAMILIA.
PERO ESO SÍ, NO ME OLVIDO DE USTEDES Y PARA QUIÉNES LEEN ESTA HISTORIA, LES TRAIGO AQUÍ LA SIGUIENTE PARTE.

OJALÁ LES GUSTE :3

Si, Yagami ya se había tardado mucho… porque cinco minutos eran cinco minutos. Yuki se había perdido con Athena y Yuri, para su suerte, aunque no lo diría en voz alta, pero es que a veces su novia solía ser algo irritante con sus aires de madre, diciéndole que hacer y que no. Benimaru había desaparecido en algún punto de la fiesta con seguramente alguna chica y él… ahora estaba sólo y aburrido ¡Baa! Iría a buscar al odioso pelirrojo.

Entre tropezones y tanteos de pared, logró llegar a la puerta trasera que daba a un callejón. Vio a Yagami dirigirse entre la multitud hasta esa puerta desde que dijo que saldría, por lo que lo más seguro era que tenía que estar en ese callejón o tal vez ya hasta se había marchado, después de todo, no esperaba a nadie en esa fiesta  y odiando al castaño como decía hacerlo, no tenía obligación de seguir bebiendo en su compañía.

Su vista nublada por el alcohol no le permitía ver bien entre la oscuridad del lugar. Y el frío viento que azotó su rostro al salir le hizo marearse aún más, haciendo que sostenerse en pie le fuese todavía más difícil.  Automáticamente su vista se dirigió al final del callejón, entre las sombras,  donde un chico y una mujer se besaban apasionadamente

¿Quiénes eran?...¿Iori?...

Extraño... muy extraño que ante la posiblidad de que dicho chico que besaba de esa manera a aquella mujer fuese su enemigo, hizo que algo se removiese en su ser. Un sentimiento de odio que hasta ese momento no recordaba haber sentido nunca.

No lo pensó dos veces siquiera. No, sus pasos torpes le dirigieron hasta la pareja, separándoles de un tirón apenas estuvo de pie frente a ellos.

¿Qué le ocurría? ¿Por qué se sentía enojado?¿Y con quién? Ni siquiera distinguía nada. Las manos del chico de alzaron en modo de rendición y dijo algo que Kyo no logró escuchar ni comprender por su ciego rencor.

Ya a punto de golpear al contrario, la voz potente le detuvo.

-¿Qué carajo se supone que haces, Kusanagi?

Pero… ¿Por qué dicha voz provenía a sus espaldas?

Bajo el puño y ladeo el rostro ligeramente hacia el tipo frente a él. No captando del todo su rostro además de su flequillo rojo y la oscuridad que le envolvía, mientras que la chica reclamaba algo que no lograba procesar.

-Date la vuelta, idiota – la voz volvió a sonar a sus espaldas ¿Le estaba ordenando?¿Que carajo estaba ocurriendo? Con lentitud giro su cuerpo, topándose de frente con otro flequillo rojo, incluso más rojo aun con la leve luz que le iluminaba.

-¿Yagami? Pe-pero… - la pareja salió de entre las sombras justo a tiempo para que el mareado castaño viese que no se trataba de quien el creía.  El dichoso pelirrojo no era sino peli rosa y su flequillo a parecer de Kyo, no tenía tanto estilo como el de Yagami ya con la luz dándole de frente. La chica era azabache y si el castaño tenía razón, esta le miraba con cierto odio. Suponía que era normal, después de todo había arruinado su momento íntimo.