DO
Poco a poco
Me pierdo en tu sonrisa
La curva de tus labios
Tu mirada retadora
Los escándalos de tu voz que me piden a gritos
Dejarlo todo por vos.
POV'S COMPARTIDO.
Siete días.
Una semana
Ciento sesenta y ocho horas
Cuatrocientos veintes minutos.
Estaba aterrado. La incertidumbre aun me acompañaba, quería dejarme caer y someterme a Jeon. Pero había una parte en mí que me impedía hacerlo por completo, solo pudo pensar. Había sido tan cobarde que no pude ocultarme en mi apartamento, lo cual fue una gran idea. NamJoon me había informado hace dos tardes que JiMin, JungKook e incluso YoonGo me andaban buscando con desesperación.
Jin había llegado hace ya dos semanas. Por lo que me permitió quedarme con él, hablamos durante horas y me enseño demasiadas cosas del mundo oscuro y sexual del BDSM. Jin era considerado Dominante, como una mujer Domina. Implantaba dolor por medio de la humillación, hablamos durante horas y barrio de mi cuerpo un gran porcentaje de miedo. Resolvió mis dudas y me abrió la mente, incluso practicamos un poco. Como llamarlo, donde debía sentarme y como debía reaccionar a él, Jin me explico que cada Dom era un mundo diferente que se regía por sus propias reglas. Que cada uno tenía sus formas de jugar, su palabra de seguridad y sus formas de dolor.
Confiaba infinitamente en Jeon, sabía que no me haría daño. Era un voto de confianza que me ayudaba a dar dos pasos más cerca de firmar el contrato, Jin me había leído cada parágrafo y había aclarado cada termino que no entendía.
No había tachado algo, solo lo había utilizado o tomado para pasárselo a Jin. Sentía que si lo tomaba una mano me iba a meter en un mundo doloroso. Igual ya era hora de aparecer, llevaba perdido bastante tiempo sin comunicarme con alguno de ellos, quería saber cómo estaba JiMin o siquiera mi pequeño Hoseok. Tenía clases de la universidad, BaekHyun, me había llamado para informarme que esta semana teníamos clase de 2:00pm a 10:00pm de la noche, los horarios de habían invertido por lo que las mañanas me quedaban libres.
Jin peino mi cabello hacia un lado, cortando las puntas quemadas y abiertas. Eran las 6:30 de la mañana, sus clases en la universidad más prestigiosa de Seúl empezaban en dos horas y yo tenía una cita con Jeon. Bueno no lo había llamado o me había comunicado con él, le caería de sorpresa en la empresa, total. Él había dicho que era libre de pasarme por ahí cuando tuviera una respuesta, Jin me había llevado de comprar por mis dos cumpleaños atrasados que se había perdido. En la calle todos nos miraban con ojos hambrientos, más que todo a Jin. Era un chico que llamaba bastante la atención por esa aura de dominio que cargaba y su vestimenta ruda pero sexi y tierna al mismo tiempo.
Le había comentado la alergia de Jeon por lo barato, y decidió comprarme ropa demasiado cara, al igual que zapatos y accesorios, lociones y cremas para el cuerpo. Me sentía una copia de Ken el novio de barby, demasiado falso. Incluso tenía un reloj Rolex de cumpleaños. Incluso mi bóxer eran caros, utilizaba una camisa blanca ajustada a mi pequeño torso, unos pantalones clásicos sueltos que resaltaban mi trasero, zapatos clásicos y mis pestañas se veían más larga por el rímel exclusivo con el que me había maquillado Jin. Mis labios se veían más gruesos por un experimento que Jin saco de Google, me puso a chupar una tapa por lo menos cinco minutos.
