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Suspiró frustrado, levantándose de su cama con cautela, sin ganas de despertar a nadie más. Salió y caminó por el pasillo con pereza hasta la cocina, donde se recargó en el encimera mirando su celular.

2:03 AM

El maknae gruñó, tenía más de 3 horas tratando de dormir, era extraño, pues él nunca había sufrido de insomnio, sin embargo no podía pegar un ojo, simplemente no tenía sueño. Intentó tomar un vaso de leche tibia, vaya que lo relajó, pero no lo logro dormir. Pasó la punta de su lengua por sobre el metal de sus dientes, pensando, era la segunda vez que se levantaba en lo que iba de la noche. Tomó agua por segunda vez, dejando luego el vaso sobre la encimera. Miró a la nada unos segundos más, hasta que desvió la mirada hacia el pasillo que daba pasó a las habitaciones. Se mordió el labio ansioso ¿Será que si? ¿Se atrevería? No... ¿O si? Era muy tarde, debía de estar dormido hace un tiempo aunque hubiera estado componiendo nuevamente. Soltó su labio con lentitud, deslizando su mano por la lisa superficie donde estaba recostado mientras se separaba para caminar hacia el pasillo. Una sonrisa traviesa se firmo en sus finos labios, colarse en el cuarto del líder a mitad de la noche sonaba tan bien, podía hacer un pequeño desastre o dibujar cosas tontas en su rostro, comentárselo a SeungMin y a Felix, reir por un rato mientras Chan busca al culpable por todos lados. Vaya que se enojaría y vaya que él lo disfrutaría.

Ya frente a la puerta color crema comenzó a dudar un poco, no sabía que tan ligero su Hyung tendría el dueño, pero, a esas horas de la noche y sin sueño era lo más entretenido que podía hacer. Que más da, lo máximo que podría llevarse era un regaño.

Abrió la puerta tan silenciosamente como pudo y la cerró a su espalda de la misma forma, guiando su mirada asustada el cuerpo de Chan al escucharse el "click". El cuerpo de Chan estaba semi cubierto por la sábana, boca arriba, con sus labios entreabiertos dejando pasar el aire pesado de sus pulmones con lentitud, iluminado por la luz del ordenador encendido, como había previsto, Chris si que había estado componiendo hasta tarde otra vez. Sus ojos estaban cubiertos por un antifaz simple, de color negro, al igual que el sueter que traía encima, JeongIn mordió su labio nuevamente dejado salir un suspiro involuntario. Dios, a Chan si que le iba hermoso el color negro, combinaba de una forma demasiado perfecta para el pobre corazón del Maknae.

JeongInie, no hacía mucho había notado ese extraño hormigueo en su estómago cuando veía pasar a su líder, cuando lo escuchaba hablar, hasta cuando lo veia comer, jugar o decir tonterías a la cámara para los capítulos de "SKZ: Talker". Si bien no eran muy alto, Christopher Bang era muy varonil, tenía un aura de persona mayor que tanto derretía al pequeño, era muy apuesto con facciones, con una piel hermosa y, Oh Dios, sus ojos que escanean cada célula de su cuerpo combinada con su hermosa sonrisa de lado que hacía que su corazón se detuviera por un instante.

El Maknae sacudió su cabeza, estaba desviándose de lo que había ido a hacer por estar fantaseando con lo hermoso que era el líder, escuchaba su corazón latir con fuerza y quiso golpearse el mismo. Exhaló tan callado como pudo, sólo para poder calmarse, e inició.

Con cautelar, se separó finalmente de la puerta, caminando hasta el ordenador tomando un marcador de tinta permanente del escritorio. Aguantó una risa boba mientras escribía en toda la pantalla "Chan-Hyung es un tonto" Y quiso reir más fuerte, si Chan se enteraba el pequeño zorro no volvería a ver la luz del día, era su preciado ordenador, con el que trabajaba y hacía todas sus mezclas. JeongIn estaba loco.

Se volteó hacia Chan, y se agachó frente a él, se arrodilló en el suelo con una traviesa sonrisa en su lindo rostro y acercó el marcador. Primero comenzó a dibujar cosas tontas en su cuello, como corazones, algunas palabras graciosas y ¿Por qué no? Después de todo era un adolescente, así que dibujo un pene, con muchísimo cuidado y tratando de tocar su piel el menor tiempo posible. JeongIn hacía hasta lo imposible para no reír y ser descubierto. Antes de que la punta del marcador tocara su rostro, JeongIn se detuvo, se emborracho completamente de tener el rostro de Chan tan cerca del suyo, no eran muchas las veces que lograba tenerlo así, ademas de que sólo ocurría por unos segundos, la mayoría de las veces ellos estaban frente a las camaras, y a pesar de que el rubio era muy juguetón, no sobrepasaba el límite de verse fijo por más de tres segundos, por mucho que molestará al pequeño.

JeongIn bajó su "arma" y la dejó en el suelo, entre sus dedos tomó apenas un mechón del cabello rubio de Chan, sintiendo su textura algo seca por el tinte. Retiró parte de este de la frente de su líder, teniendo cuidado de no despertarlo, sonrió, Chan era muy lindo cuando dormía, apostaba a que si no tuviera ese antifaz y estuviera sólo un poco más cerca, el rostro de JeongIn se volvería tan rojo que pareciera que en cualquier momento sangre saldría de su nariz, aunque en ese momento posiblemente debía estar cerca de ese resultado.

— ¿Por qué eres tan perfecto, Hyung?— te quejó muy bajito, recostando su cabeza delicadamente sobre el colchón, sin poder apartar la vista de Chan. Sus dedos aun se encontraban andando el cabello del mayor, no quiso sobrepasarse y exponerse a la posibilidad de que Chan despertara, pero luego bajó un poco más la mirada; los labios entreabiertos de Bang Chan.

JeongIn tragó grueso y su boca de hizo agua, labios hermosamente delineados, no tan finos, eran rosados, el alimento de Chan chocaba contra su rostro.

Yang lamió sus propios labios sin dejar de observar los del rubio, tomó aire, sus dedos se movieron solos, bajaron hasta los labios del mayor, los delinearon con dulzura, JeongIn estaba hipnotizado, la textura era demasiado suave, su piel casi se erizó al tocar directamente. Su corazón estalló cuando entre sueños, o quizás a punto de despertar, Chan relamió sus labio, y su lengua tocó la punta de los dedos de JeongIn. Este se asustó y se levantó velozmente, corriendo hacia la puerta y saliendo de la habitación. La respiración de JeongIn se notaba rápida, y su sonrojo llegaba hasta sus orejas, se quedó en silencio, esperando asustado a que Chan despertara, no sucedió. Soltó una risa boba, volviendo a morder su labio con emoción, se llevó sin pensarlo los dedos a la boca, aún húmedos por la saliva del líder, y la degustó como su fuera la cosa más deliciosa.

Tanta adrenalina logró ponerlo cansado, Inie revisó su teléfono y eran pasadas las 3 AM, había estado más de una hora dentro de la habitación de Chan ¿Cuánto tiempo estuvo observándolo? Se sintió avergonzado, era como un acosador, pero le fue totalmente imposible contenerse, para él, Chan era totalmente irresistible.

Sin poder mantenerse más tiempo despierto, el Maknae caminó de vuelta a su habitación, con las mejillas doloridas por el fuerte sonrojo, y la sonrisa casi tatuada en su rostro.

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A JeongIn le hubiera gustado mucho levantarse un poco más tarde, pero tenía trabajo que hacer ese día.

No tuvo tiempo de decirle a sus compañeros lo que había echo hace algunas horas, pero puso reírse con el resto cuando Chan apareció frente a todos, recién duchado, serio, y aún con marcas totalmente visibles en su cuello a causa del marcador. Todos rieron, el único que no lo hizo fue el mismo Chan.

—¿Quién entró en mi cuarto a media noche?

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HooOooOola :D

¿Cómo les va? Espero que bien. 😊

Bueno, éste es mi primera historia ChanIn, además de ser la primera que escribo de "Personas reales - No anime"

Espero que les haga gustado, estrellita si fue así, y ya nos leeremos en el próximo capítulo 😂

Gracias por la oportunidad, prometo que les gustará.

Nos vemos >wo

Besos <3

Middle Of The Night〖ChanIn〗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora