Nunca pudo culparlo de sus acciones, siempre se culpó a ella misma.
Después de todo, ella fue la primera en cruzar esa delicada línea como fanática al dirigirse a él de esa forma, buscando hacer una conexión personal con alguien a quien le profesaba un amor unilateral, uno platónico.
A pesar de eso, todo lo que había sucedido durante ese periodo la dejo marcada, sin ningún tipo de retorno.
Siempre había sido alguien sumamente confiada. Confiaba de más en las personas sin saber cuáles eran sus verdaderas intenciones.
Hasta que Adrien Agreste se presentó en su vida como un golpe de suerte llamado Chat Noir.
Su confianza en las personas menguo. Y aunque puede sonar como un suceso completamente negativo, ella lo tomó de la mejor manera; Maduró.
No se había percatado de las mentiras obvias de él por pecar de inocente y creer en la fortuna, y eso en algun punto hubiese sido peligroso.
¿Qué hubiera pasado con ella si con la persona que había hablado durante tantas noches de forma consecutiva, le pedía algo que ella no quería hacer?
¿Sí la citaba en algun lugar? Ella debido a su nula desconfianza, hubiera ido.
Entonces, quizás, solo entonces ella no hubiese vuelto a casa con sus padres.
Al principio fue difícil, pues el sabor a traición estaba impregnado en su boca al igual que una sensación abrazadora sobre la mano con la que lo había saludado.
Pero poco a poco, los malos recuerdos se quedaron como una experiencia y una especie de recordatorio; No todos decían la verdad.
Marinette guardó las bellas conversaciones que habían compartido entre ellos mediante el teléfono, de una forma no podía dejar de atesorar esos recuerdos, pues a pesar de todo para ella eran algo reales.
Nunca fue capaz de culparlo, pues ella había iniciado aquello.
Así como decía aquella canción que tanto le gustaba; Habían tenido algo, abstracto quizás, pero lo mejor era atesorar los buenos momentos.
Pensaba que era curioso como ella había iniciado todo aquello siendo una simple fanática, para después el buscar por todos los medios posibles el contactarla, haciendo lo mismo que ella en un principio.
Un error que estaba segura habia dejado marcas en él, tanto como en ella.
Pero de eso se trata la vida, de llevar cicatrices en el alma y no soltarlas para aprender de ellas.
Se atrevió a sonreír cuando el anuncio de Youtube terminó y dio inicio al video que ella había estado esperando para ver.
Una pequeña entrevista reciente que Alya le había enviado minutos atrás para que ella la viera.
Ahí estaba Adrien frente al conductor del programa de farándula más visto de París, Alec.
Tres años habían pasado, un poco más, no estaba segura. Aun así, pudo notar el cambio del ahora ex modelo. Era la primera vez que salía en público desde hacía un buen tiempo.
Adelantó un video unos minutos, hasta donde Alya le había indicado. Su amiga se había enterado de todo lo ocurrido apenas unos días después de aquella master class con Audrey Bourgeois, y a pesar de que ella insistía en no hablar más del tema, Alya considero que aquello le podría interesar.
― Bien Adrien, ¿Vas a platicarnos un poco sobre tu intervención que ocurrió hace dos años? ― Preguntó el conductor. Marinette prestó atención, sintiendo como el aire comenzaba a irse de sus pulmones, preguntándose si realmente era buena idea ver aquello.
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Fanática [Miraculous Ladybug AU][Drabbles]
FanfictionMarinette es la típica adolescente que tiene un amor platónico en una celebridad, tal como sus amigas, tal como otras chicas. Se considera una fanática por excelencia, al igual que una enamorada empedernida. Quizás, lo lleva un poco al extremo consi...