Fanática [Miraculous Ladybug AU][Drabbles]

Como un (mal) sueño

Marinette asintió con su cabeza ante la pregunta del joven modelo que prácticamente conocía de pies a cabeza, sintiéndose abrumada debido a la extraña intensidad con que él la miraba.

― Me alegro, te vi desde el fondo y pensé que algo malo te pudo haber ocurrido ― Se atrevió a comentarle, a ella le pareció que de una forma su voz le sonaba extrañamente familiar. Y sí, en más de una vez lo había escuchado hablar en las conferencias de su padre, Gabriel Agreste, pero había algo en su tono de voz que penetraba su cabeza.

Sintió sus piernas temblar. Después de todo, tener un amigo con el nombre de un gato negro sí que podía traerle mala suerte.

― Gracias, s-simplemente me siento abrumada, no me había imaginado estar aquí ― Mintió, intentando no titubear a la par que sus palabras salían de su boca.

Adrien supo de inmediato que aquello en parte era cierto, pero su comportamiento en efecto era por él.

Sintió crecer un poco el ego en él, para después sonreírle tímidamente.

― Yo también me sentía abrumado, pero debido a que no quería estar aquí ― Hizo una mueca con su rostro. ¿Cómo era capaz de mentirle a la cara a quien se robaba su sueño durante las noches? ¡Era más que obvio que él anhelaba estar ahí por ella! ― Pero bueno, he tenido la buena suerte de estar a un lado de alguien agradable, ehm ― Hizo una pausa, haciendo el ademan de buscar el gafete de ella con la vista, cosa que no era necesaria ― Marinette, un gusto. Yo soy Adrien ― Se introdujo a sí mismo, extendiendo su mano hacia ella.

Marinette dudó un minuto, observando con atención la mano de aquel hacia no mucho tiempo ella podía declarar que tenía un enorme crush, sin creer que aquel chico de ensueño le estaba tendiendo su mano.

Lejos de como se lo hubiese imaginado meses atrás, la euforia de conocerlo no existía en lo más mínimo. De hecho, sentía que el aire en cualquier momento se le escaparía de los pulmones para no regresar.

¿Acaso era por su inseguridad anterior? ¿Su miedo a ser descubierta?

¿O por qué esa mirada realmente le provocaba no confiar en él? Pues, muy en el fondo, Marinette sabía que mentía sobre algo. No sabía en qué precisamente, pero ese era el rostro cuando Adrien mentía a la cámara diciendo que estaba alegre de estar en la nueva colección de la temporada.

― Eh, sí, te conozco, me refiero ¿Quién no te conocería? ― Soltó ella de forma estrepitosa, para después suspirar y darle la mano a él ― Quiero decir, eres modelo, yo estoy interesada en la moda, entonces sí, te conozco ― Finalizó, sacudiendo la mano de él en señal de saludo.

Adrien pensó que los nervios de la chica eran adorables, al igual que las mejillas sonrojadas de ella, notando que en estas tenía una cordillera de pecas.

El contacto con ella era todo lo que había imaginado, e incluso más. Pudo sentir una pequeña chispa entre ellos, por lo cual no pudo evitar sonreír de medio lado.

― Entonces ¿Estas interesada en mí? ― Se atrevió a preguntar, enarcando una ceja. El rostro de Marinette fue un poema, pues todo se tornó de un peculiar color carmín. No pudo evitar reír como si de un inocente niño se tratara ― Es broma, es broma ― Articulo, intentando restarle importancia al tema.

Pero Marinette supo que no existía rastro alguno de broma sobre esa pregunta.

Y solo se pudo cuestionar ¿Qué le pasaba a Adrien para que actuara de esa forma con ella?

Antes de poder articular alguna palabra, las luces del lugar se encendieron excepto las del podio frente a todos los presentes, la master class estaba por empezar.

― Es mejor que guardemos silencio, Madam Audrey es muy especial ― Le advirtió, guiñándole el ojo con complicidad, para después acercarse hasta su oído de forma sutil ― ¿Te parece si después te presento con ella? Quizás vengas preparada con unos diseños, y, quizás, sí tú lo permites, ir por un helado ― Le susurro, completamente animado.

Ella no supo que responder, se quedó hecha piedra en su asiento durante unos instantes.

Intentando, por supuesto, procesar las palabras que aquel modelo acababa de decirle en su oído.

Conocer a Audrey Bourgeois en persona y que ella supiese su nombre era realmente el sueño de cualquier diseñador amateur ¡Prácticamente era dar un gran paso a las ligas mayores! ¿Por qué de entre todas las personas Adrien tenía que venir a ella? Se preguntó.

¿Por qué le estaba pidiendo prácticamente una cita?

Tragó en seco. Aquello, por más fantasioso que fuese, realmente estaba sucediendo.

Tal y como lo había imaginado en el pasado. Y ahora, simplemente no sabía de qué forma reaccionar.

De un modo estaba feliz, pero también asustada de como las cosas habían resultado.

― Sí ― Acepto, dudativa. Pero la mirada de Adrien sobre ella le resultaba demasiado pesada.

Pronto el rubio guardo silencio y junto a ella, comenzó a prestar atención a las palabras de Audrey.

Mientras Marinette seguía procesando qué demonios acababa de suceder.

[...]

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Para Marinette todo esta sucediendo como si fuese algo que ella hubiese soñado, o que le hubiese gustado que ocurriera en el pasado ¿Por qué sera?

Agreste, esconde tus colmillos, la estas asustando.

¡Nos vemos mañana!