"OQVT"【 Kth + Jjk 】

Virginidad

Estúpido Yoongo, ¿Quien se confunde la casa de su amigo con la suya? Me hizo perder preciado tiempo con mi dios.

Una vez que llegué a lo que parecia ser su casa, toqué la puerta algo desganado.
Me abrió la puerta una chica hermosa, con cabello corto de color rojizo, un gran cuerpo y una sonrisa hermosa.

—Hola, ¿Tú eres?

—H-hola—Me puse nervioso y tomé mi falda con mis manos.— ¿Éste es el hogar de Taehyung?

—Ah, hablas de mi hermanito, claro que si, pasa—Se hizo a un lado, indicandome que pase.

Una vez que ingresé a la casa, noté un leve olor a margaritas y el aire se sentía fresco.

—Bueno, puedes subir directo a la habitación de Tae, el debe estar allí, y te darás cuenta cual es, ya lo verás

La miré y me quede un rato maquinando la información hasta que espabile y subí las escaleras casi correteando.
Miré en el pasillo y noté una puerta al fondo en la cual colgaba un cartel con letras en japonés, asi que supuse que era su habitación, claramente.

Abrí la puerta lentamente y miré en todas las direcciones, buscando señales de vida, al no ver a nadie, entre directamente y comencé a mirar toda la habitación.
Tenía posters de algunas bandas de rock y de animes, la cama estaba deshecha, pero como si hubiera dormido un animal alli y a los alrededores había mucha ropa tirada en el suelo.

—Qué desorden—Suspire.

Me senté en el suelo, cubriendome bien mis partes con la falda y apoyé la mochila en el suelo para poder comenzar a quitar las fotocopias.
En ese instante, escucho un sonoro gemido,y minutos mas tarde, la puerta del baño se abre.

Taehyung se encontraba ahí parado, observandome con sorpresa, tenía la cremallera del pantalón baja y se le veían los boxers.

—Jungkook…

—Y-Yo… perdón, es-este… ¡Ah!—Tape mis ojos y comencé a sentir mis mejillas arder.

Escuché que se acomodaba el pantalón a la velocidad de la luz más o menos.

—¿Qué haces aquí?

—Yoongi me dijo que te traiga unas fotocopias—Lentamente corrí mis manos de mis ojos y vi como se agachaba en frente mio.

—Oh, seguro tenía paja de venir

Asenti muchas veces, nervioso y jugué con el borde de mi falda.

—Bien, te lo agradezco, Kook

Llevó su mano a mi cabeza y comenzó a moverla para alborotarme los cabellos.

—Me haces sentir un niño pequeño

—Eres pequeño

—¿Ah?—Lo miré y levante una ceja.—No lo soy, solo me llevas un año

—Ya ya, buen chico

—¡Yo quiero ser malo!

—Pero los chicos malos deben ser castigados

Abrí los ojos de par en par y múltiples imágenes de mangas Yaoi vinieron a mi cabeza.

—A-ah… ¡Yo dejaré las fotocopias allí!—Reí mientras tomaba las fotocopias y me levantaba para ir a el escritorio.

Cuando me paré frente a este, vi que sobre unos libros había un manga. Lo tomé para intentar apartarlo pero sentí que rápidamente alguien se tiraba sobre mi, haciéndome caer de espaldas a la cama mientras soltaba un chillido.
Al abrir los ojos, vi que Taehyung estaba sobre mi, demasiado cerca, algo sonrojado.

—T-Taehyung—Lo miré a los ojos y nos quedamos un buen tiempo así.

Todo normal hasta que sentí algo rozar mi muslo, era muy duro y me incomodaba, así que decidí removerme un poco bajo su cuerpo, pero eso seguía ahí. Miré hacía abajo y noté lo que era.

—T-t-taeh-hyung~!

El al instante, se puso nervioso y se cayo sobre mi, haciendo más presión con su entrepierna en mi muslo.

—A-ah~ Tae—Cerré los ojos y el rápidamente se levantó.

—Perdón, no s-sé que estaba haciendo

Relami mis labios antes de decir lo que más me tenía nervioso.

—Q-quítame la virginidad, Taehyung

El se me quedó mirando atónito y luego rió bajito, casi inaudible.

—Me estás jodiendo

—Quítame la virginidad—Me senté y lo miré seriamente, no quería que este momento se echara a perder.

—No, somos dos hombres, Jungkook

—¿Y eso qué?

—No me gusta, ya te lo dije antes—Se alejo y se sento en la silla que estaba arrimada a el escritorio.

—Pero… ¡tú estás duro por mi! ¡Tienes ganas!

—¡No me puse duro por ti, me masturbe en el baño antes de que vinieras a interrumpir!

Cerré la boca automáticamente, no sabía que decir, no podía decir más nada, me sentía idiota y humillado.
Me levanté lentamente,  con la cabeza baja y levanté la vista para mirarlo antes de salir corriendo hacía abajo. Las lagrimas no tardaron en llegar.