Dieciséis

102 17 2
                                    

Es viernes y estamos a veinte minutos de que toque la última campana, anunciando así las vacaciones de primavera. Son mis primeras vacaciones apropiadas. Nunca he ido a los lugares más cercanos, como Disney y Hollywood. Creo que ni siquiera los he visto de cerca. Puedo contar con los dedos de mis manos las veces que he salido de la ciudad, y aún peor del condado. La única vez que salí del estado, fue cuando a papá lo detuvieron en Las Vegas, y mamá, embarazada de Noah y todo, nos forzó a Zach y a mí al asiento trasero, sin detenerse ni una vez hasta que llegamos a la comisaría donde mi papá estaba drogado, durmiendo y preso. Pagamos su fianza vendiendo la Nintendo de Zach (Que le había regalado su padre biológico) y volvimos mientras mamá aprovechaba cada semáforo para golpear a mi papá, que seguía inconsciente. 

Este es el primer viaje que no tiene que ver con padres presos o escapar de los servicios sociales o vacaciones para que mis padres puedan participar en una fiesta swinger. La primera vez que voy a la playa sin que sea un paseo escolar o un verdadero dolor de cabeza. Suena loco. También un poco deprimente. Pero me olvido de todo eso cuando observo a Jared y a Kyle delante mío, contando los minutos como si estuviéramos en High School Musical 2. 

Suena la campana, ellos son los dos únicos que salen corriendo y saltando. Ni me quiero imaginar cómo van a reaccionar cuando sea verano. Y, sin embargo, verlos así de felices me hace feliz.

Como pautamos, nos encontramos todos (Kat, Jo, Jared, Ben, Luke, Xander, Kyle y yo) en el estacionamiento. Como Jo y Kyle son los únicos con autos propios, nos dividimos en dos para ir a casa de Xander. Nos vemos algo ridículos, en medio del estacionamiento escolar cargando con bolsos llenos de cambios de ropa, trajes de baños, protector solar y por supuesto los tubos de espuma de Jared. Kyle, Jared, Luke y yo nos vamos en el auto de Kyle, mientras Xander, Ben, Kat y Jo nos siguen de cerca. Al llegar a la casa de Xander, subimos todas nuestras cosas al cuarto de invitados y nos dejamos caer sobre los sofás y hasta sobre el suelo del living. Puede que sigamos acá, pero ya me siento en la habitación del hotel, como si el mar me estuviera esperando justo afuera y esta noche fuera a ir a una fiesta en la playa. 

Nos sentamos alrededor de la mesa de café, mientras Xander trae cuatro litros de agua (Su mamá, algo sobreprotectora, le prohíbe tomar gaseosas) y empezamos a planear el fin de semana. Hablamos de que ruta es mejor, cuánto debemos poner entre todos para la gasolina, cuánto poner para las bebidas alcohólicas y la comida, y qué haremos durante todo nuestro tiempo. Jared quiere ir a todas las fiestas, especialmente si son de universitarios. Kat y Ben quieren hacer algo de turismo. Luke prefiere quedarse en las cercanías del hotel, especialmente ya que tiene desayuno y cena incluidos. Kyle, que siempre ha adorado la biología, especialmente la marina, quiere bucear un poco, tal vez alquilar un bote. No menciono que yo ya puse todo mi dinero en los presupuestos para la gasolina y el alcohol y la comida. Tendré que hacer como Luke y aprovechar todo lo gratis que ofrece el hotel. 

Organizamos un horario que complazca a la mayoría. Y siempre podemos decir que no a las proposiciones más locas, como la idea de Jared de "echarle un vistazo" a la local playa nudista. 

Ya es tarde cuando la mamá de Xander vuelve de su trabajo. Es enfermera y sé por Xander que casi nunca está en casa. A pesar de que Xander tiene la mayoría del tiempo la casa para él solo, nunca ha sido como Kyle, Jared o incluso Luke. Se opone firmemente a las fiestas y hace caso a todas las reglas de su mamá. Son mormones, aunque Xander sólo lo es los domingos cuando va a misa. Su mamá, por otro lado, es la personificación de la bondad. 

Apenas nos ve, corre a saludarnos, mientras le narra a Xander su día de trabajo. Es cálida y sonríe de una forma tan honesta cuando lo ve. Es la luz de su vida. El papá de Xander los abandonó hace muchísimos años y desde entonces han sido solo ellos dos. Con solo ver cómo interactúan, te das cuenta lo mucho que Xander significa para su mamá. 

Ojalá pudiera amarte, siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora