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• My hero •

— ¡Me gustas! — Confesó Yaoyorozu una vez las clases terminaron y se llevó a Shōto detrás del edificio en busca de privacidad. — Qui-Quiero que me des una oportunidad... Podría hacerte más feliz que la chica de la que tienes tú marca...

Shōto paso una mano por su pelo y suspiro, no había ni una pizca de sonrojo en sus mejillas, su corazón no latía con nerviosismo con su compañera delante ni con ninguna otra. Simplemente no sentía nada que no fuera amistad hacia ella.

Pero sabía que no debía precipitarse.

Aún no sabía al 100% de quien era la letra B que él tenía marcada y borrarla sin siquiera encontrar a su verdadera alma gemela era muy precipitado. Aunque tenía la idea de quién podría ser aquella letra, tenía que confirmarlo.

— Yo... Quiero saber más acerca de las marcas, estaré muy agradecido si me explicas sobre eso. — Momo hizo una mueca al no ser respondida su confesión, pero entendía que el corazón de Shōto estaba momentáneamente ocupado así que asintió, si podía ayudarlo a aclarar sus sentimientos mejor para ella.

– ¿Puedo saber de qué color es tu marca? – Preguntó la chica tímidamente recargandose en la pared para después deslizarse hasta el suelo y sentarse en el césped abrazando sus piernas. Shōto se sentó a su lado con la piernas cruzadas.

— Al principio era cómo una cicatriz normal... Ahora es color negro, como un tatuaje... Y parece que saldrá otra letra. — Confesó serio y honesto.

— Ya veo... La mayoría de las marcas son color negro, un tatuaje que graba el nombre de tu pareja destinada, va saliendo letra por letra dependiendo de las acciones de la pareja.

— ¿Acciones de la pareja?

— ¿Sabes a quién pertenece la letra que tienes? — Shōto negó y Yaoyorozu sonrió melancólicamente pensando en que aún tendría una oportunidad con el heterocromatico. — Eso quiere decir que tú pareja destinada sí sabe quién eres y está actuando inconscientemente. Por ejemplo los celos... Si la persona que es tu pareja siente celos eso hace más fuerte el vínculo involucrando a los dos. Por eso saldrá otra letra a pesar de que tú no hagas nada y viceversa.

— Oh... Esa persona sabe quién soy. — Se llevó una mano a su mentón para pensar, llegó rápidamente a la conclusión que toda la escuela sabía quién era pues contaba con mucha popularidad. — Quiere decir que está en la escuela...

— La marca roja como dijo Mina-san... Es tener cierta cantidad de tiempo para enamorarte y cambiar tu marca antes de que el nombre de aquella persona se marque por completo.

— ¿Algo como robar? — Alzó la ceja y luego callo inmediatamente, algunas veces podía ser muy sincero con sus palabras, la chica abrazo aún más sus piernas.

— ¿Si ambos se enamoran cuenta cómo robar? — Preguntó seria y los dos guardaron silencio por un rato hasta que la pelinegra se levantó y Shōto hizo lo mismo. — ¿E-Entonces cuál es mi respuesta?

Shōto trago pesadamente, retrocedió un paso pero está camino hacia el hasta tomar sus manos y pegarlas a sus pechos inocentemente.

— ¡Te-Tengo mucho para ofrecer! — Las mejillas de la chica contrarias al heterocromatico estaban rojas, por suerte antes de que la pelinegra se acercará más, desde una de las ventanas de los pisos de arriba cayó agua empapando a ambos.

Shōto miró rápidamente hacia arriba encontrándose con Bakugō quien le regalaba una sonrisa burlesca, le levantó el dedo de en medio para luego entrar al salón rápidamente.

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