→ Marca de amor ← [TodoBaku]

• Suegro •

Bakugō se quedó recostado en su lugar, escondiendo su rostro entre sus brazos esperando despertar de aquella pesadilla. Hace unos minutos había ido al baño para confirmar lo que no quería.

El apellido Todoroki estaba en su espalda baja con letras negras, cuando lo vió recordo lo que su compañera pelirrosa había dicho "Al menos que estén estúpidamente enamorados, ahí sí habrá una excepción y sus marcas aparecerán en un santiamén" 

—  Joven Bakugō, las clases acabaron ¿Qué haces aún aquí? — Bakugō levantó la mirada encontrándose con su maestro favorito, Toshinori Yagi.

— Ya me iba. — Katsuki no quería verse débil frente a él, se levantó sin ganas de hablar pero el profesor lo detuvo.

— ¿Te molesto con algo de ayuda? — Bakugō antes de salir del aula vio al maestro cargar con cuadernos de trabajo. El chico suspiro pues estaba haciendo a su amigo esperar fuera de la escuela, aunque realmente no le importaba mucho pues probablemente Kirishima lo esperaba con muchas preguntas.

Tomó varios libros y cuadernos ayudando al profesor a llevarlos a la sala de maestros.

— ¿No se quedó Deku para ayudarlo esta vez? — Soltó con amargura el rubio menor.

— Dijo que iba a salir con sus amigos... También me dijo que el jóven Todoroki consiguió su marca. — El chico chasqueo la lengua recordando todo.

— Lo hizo...

Toshinori comenzó a reír y Bakugō lo miró confundido.

— Me imaginé como reaccionaría su padre. — Y siguió riéndose mientras el menor hizo una mueca entre asustado y sorprendido.

— ¿S-Su padre? — Murmuró pues los chismes, noticias y el propio Shōto decían que Enji Todoroki era de lo peor en sentido temible. Podría ser de los mejores oficiales de policía y detective, pero era de los rudos, a la escuela antigua. Katsuki pensó en que si no estuviera Toshinori para admirar, él sin duda admiraría a Enji.

— Quien sea que sea la destinada del jóven Todoroki deberá enfrentarse a algo grande. — Mientras caminaban el profesor seguía riendo pero se calló al notar a su alumno en completo silencio, como si estuviera pensando mucho por aquella broma.

Cuando llegaron a la sala de maestros Bakugō solo dejo los libros en un escritorio y estuvo dispuesto a salir mas su profesor lo detuvo nuevamente.

— Jóven Bakugō... ¿Ocurre algo? — Preguntó Toshinori sentándose en su silla giratoria. Bakugō suspiro y negó. — Puedo entender que es por temas de amor, por eso tan callado ¿no? — El menor hizo una mueca pues su maestro siempre daba en el clavo.

— Es una estúpidez...

— Hasta la persona más amargada puede encontrar a su pareja, ¿Quieres un ejemplo? — Katsuki alzó una ceja curioso. — Enji Todoroki... Se supone que es un secreto, pero su pareja es un hombre. — Susurro el mayor. — No le digas a nadie.

— ¿Hombre? — Katsuki ahora estaba anonadado sin saber que decir.

— ¡Así que no hay nada que te impida enamorarte, ni siquiera tu personalidad! — Ánimo él mayor y guió a su alumno fuera de la sala. — ¡No te preocupes, peor suegro no puedes tener!

— ¿¡Eh!? ¡Yo no estoy enamo— Y la puerta se cerró en su cara. Katsuki enojado tomó su mochila del aula y salió de la escuela esperando encontrar a su amigo.

Espero unos minutos afuera esperando que el sonrojo en sus mejillas desapareciese para llamarle al pelirrojo.

Enji Todoroki como suegro. Pensó Bakugō sintiendo un cosquilleo recorrer su columna vertebral para después comenzar a reír de solo imaginarse diciendo esas palabras. — Imposible.