Capítulo 22

231 35 2
                                    

Tras mi llegada, las primeras palabras de Velda fueron.

"No tiene que ver con la academia".

"¿Eh...? Si tiene que ver, ya que soy un estudiante".

"No significa que tenga que ver con la academia".

"Lo tiene si la persona que debe firmar ese tratado, esta viviendo en la academia y la persona que viene a tratar el asunto va a ingresar a la academia".

Parece que picó.

"¿Qué intentas que haga?".

Quiero que ella me cubra, no quiero estar en el centro de este asunto.

"Mi intención es que puedas ayudar a que sea todo un asunto privado".

"Interesante, ¿Qué beneficio hay para mi?".

Beneficio... No había pensado eso, esperaba que ella aceptara por ocurrir en la academia.

"Sobre eso, ¿Podemos hablarlo luego de que me ayudes?".

"Supongo que esta conversación termina aquí".

Ella apoyó sus manos en el escritorio levantándose de su asiento.

"¡¡Espera!! Tengo algo en mente, em... Podría averiguar cosas sobre la especie de Raisha".

"¡¡¿Cómo?!!".

La sorpresa hizo que casi me ahorcara.

Podría hablar con la diosa, usando a Lina como intermediario.

"Le preguntaré... a la diosa...".

Al fin me soltó.

"¿Acaso eres un médium?".

"No lo soy... pero conozco a alguien que si... ¿Te parece buen trato?".

Acaricie mi cuello dolorido.

Velda pensó por un momento hasta dejar escapar un suspiro.

"Tu ganas, pero a cambio, también quiero conocer al médium".

Era mi intención presentarle a Lina, así que no hay perdida en ello.

"De acuerdo, ya que pensaba presentarla".

"¿Chica?, no me sorprende de ti".

¿Que quiso decir con eso? Se que conozco a varias chicas, pero no... Ya entiendo, entiendo.

"No voy a hacer comentarios sobre ello".

Se rió de mis palabras.

Tal parece que este asunto se resolvió solo.

Tras dejar la oficina de Velda, ya era muy tarde, hora de volver a mi habitación.

(...)

No entiendo, acaso mi habitación se volvió una sala de reuniones.

Al entrar, habían varias personas esperando mi llegada.

Raisha, Sephyria, Rímini, Emerald y Vinco.

Todos ellos estaban acomodados en mi habitación.

"¿Puedo preguntar el motivo de esta reunión?".

Ninguno respondió.

"Si no tienen ningún asunto conmigo les invito a retirarse".

Vinco levantó su mano.

"Dime".

"Rímini nos invitó a venir".

Mis ojos recayeron sobre un sudoroso Rímini.

"Es que... Bueno ellas... La carta de Semnan...".

Âme Noire - V. II (Isekai) (Completa) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora