Poemas '' Lo que Vivo"

EN UN SUEÑO!

LO VI…
Soñé…, que sonaba la alarma me levantaba a apagarla e iniciaba mi rutina mediocre.
En un sueño color ocre vi un mundo deforme,
Manipulado por un orden o mejor dicho, por un desorden: allí las personas luchaban por humillar y por de bajear a otras.
Los amantes de las sobras, creen que no se conforman pero gritan, bailan y trabajan porque así les mandan.
Ya no se aman, ya no hay amor ni por el prójimo y es aún peor, perdieron el amor a sí mismos, ahora solo piensan en consumismo y en hacer todos los días lo mismo.
De camino al trabajo van pensando en que “ojala pasara algo”, para que no tuvieran que ir, pero que les puedo decir el mundo es así, nadie hace lo quiere, solo buscan lo que les conviene.
A sus hijos eso se lo han enseñado, para que “despierten”, no se dejen y luchen por lo que quieren, pero qué piensan qué deben hacer, si lo que hacen es por agradar o sino porque no hay más na’ que hacer, no piensan en vencer.
Nunca han pensado es soñar, en volar alto, en perder el encanto de la rutina. Nunca pensaron en eso porque en sus padres, amigos y familia lo veían.
Yo vi como los educaban, los corregían  y lo que les decían y me sorprender ver que son algo de gente. Sus padres puros dementes, les daban celulares, tablets y computadores, incitándolos a ser mediocres a temprana edad, por su afán de arrojar la responsabilidad, les dieron tecnología, para que los educara y los guiara, porque en ellos mismos no confiaban.
La forma en que les educo, fue algo ilógico.
Me sorprende ver que son humanos y como mansos esclavos, cambiaron sus vidas ficticias por el dinero y confieso, el mundo inverso estaría genial, si este germen animal no hubiera plantado su legítima idea de vivir por él y para el dinero.
El sueño de los muertos, luchar y trabajar sin intenciones ni sueños. Solo siguen sus vidas por sus varias tradiciones pasadas y por su herencia dejada a sus hijos, quienes crecen sin pensar y viven sin más ni más, porque no hay más.

Los días largos y argetreados, hacían de estos una rutina de muerte en vida; los veía y solo sonreían por hipocresía, añorando o más bien soñando despiertos en que terminé su día a día rápido, esperando al sábado y descansar para pensar, en su rutina al otro día continuar.
Al salir a casa iban con un poco más de alegría o ningún ánimo, solo piensan en mañana madrugar y perder el día en sus mundos álgidos, sus fríos pensamientos los hace unos robots locos y sin sentido siguen en lo cotidiano hasta morir y pedir los lleven a culminar su forma para emanar la vida que nunca soñaran mientras sean humanos.
Al llegar a casa besan a sus hijos y esposa o madre sin emoción, piensan en morir sin resurrección, para no perder la emoción al hacerlo, piensan en beber para matar el germen que los carcome y los vuelve deformes.
Miran a sus hijos sin desgano y piensan en cuantos años pasaran para que se vallan y les dejen en paz, los lidian y los malcrían y enseñan que para vivir se debe morir, un muerto en vida culminara su rutina sin rechistar, e iniciar su nuevo día sin problema.
Esta generación se estrella y no piensa en cuándo dejar de ser un soldado por vivir como un anciano al cual sus días están contados.
Miro al cielo gris, un  mundo así describí al nacer sin  vista y vivir sin el habla, solo me falla el corazón al sentir que no hallo emoción es esto y lo pongo de manifiesto que moriré sin conocer el desespero de un día más de esclavitud virtuosa por las hermosas rosas de frustración concebida por ti a tu vida.
Más que una historia vivida.