CAPÍTULO VII

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La joven caminaba por los pasillos con una  sonrisa en sus labios mostrando parte de sus dientes, sus mejillas completamente rojas, y el brillo de vida en sus ojos era lo más reluciente.

Estaba totalmente hipnotizada.

Aún recordaba lo que hablo con el muchacho, no se lo podía creer la felicidad que le inundaba.

Eran novios.

Después de unos cuantos meses de conocerse ya eran novios, y lo mejor era que se gustaban.

Los libros que llevaba eran presos por los brazos de la joven que apretaba el sólo recordar el beso que le dio, el primer beso que le gustó a ella, y el primer beso del muchacho, literalmente.

Todos los demás estudiantes la miraban con un poco de lástima, ya sabían que ella sería la elegida del hijo del emperador, la peor escoria para los humanos, el mismo Satanás en persona. La lastima que sentían lo transmitían al sólo mirarla.

Ella no se daba cuenta de aquellas miradas por su ensoñacion, y lo peor es que no se dio ni cuenta de cuando choco con su señor.

--Veo que estas de buen humor katherine-- le dijo el joven frente a ella.
La joven rápidamente volvió a la realidad en la que se encontraba, en la que era la elegida del señor Alex.

--Señor Alex-- su sorpresa era evidente ante cualquiera que la viese-- disculpe por no haberme fijado, debo poner más atención al camino-- trataba de cambiar el tema, no quería que su señor se diese cuenta de los pensamientos que ella tenía y no precisamente del muchacho frente a ella.

--Hay cariño, nose si me crees estúpido o retrasado-- su mano rozó la mejilla de la muchacha y con un suspiro observó los ojos de su amada-- dime amor, en que pensabas, o mejor dicho en quien-- sus ojos destilaban odio, y rencor puro.

La joven muchacha tembló, sabía que era inevitable su temor pero con toda la seguridad que le quedaba prosiguió.

--Pe..per...perdon mi señor, estaba pensado en los exámenes que se acercan dentro de unos cuantos días-- el joven sujeto su cuello con la mano que acariciaba su mejilla, sabía lo que se avecinaba y antes de recibir los gritos pensó-- no sabría s..si usted po..po...podría ayudarme con aquellas materias que no logró entender bien, claro, sólo si mi señor tiene tiempo-- el plan le resultó.

--Claro mi amor, con gustó te ayudo, no es necesario que lo pidas dos veces-- la sonrisa del joven era grande, le causaba gracia la forma en la que mentía su pequeña, su manera de cambiar de tema, todo le parecía una ternura, pero ello tendría su castigo.



que es corto, extremadamente corto lo siento en serio no me tiempo para escribir no hubo caso novia inspiración disculpenme, espero que disfruten lo corto qué e escrito espero que les guste.

Trataré de escribir más seguido.

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YO Y SÓLO YO

CAMBIANDO EL DESTINO

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