He Drives Me Crazy ; Maylor/Deacury

Capítulo I

- ¿Qué te hiciste en el cabello? - Preguntó Freddie con una sonrisa de burla a Roger.
- No sé a que te refieres... - Respondió este agarrando su cabello y bajando la mirada. - ¡No puede ser! - Exclamó Brian divertido tomando al rubio por los hombros.  - ¡Has teñido tu cabello rubio! - Señaló John con los ojos achinados por la risa.

- Basta, siempre he sido rubio. - Aludió con simpleza. - De igual forma no vienen aquí por eso. Vienen a ver el auto nuevo que tengo. - Alardeó Rog.
- Sí, ya sabemos que tu mami fue quien te lo compró. - Dijo Brian y todos soltaron una pequeña carcajada a excepción de Roger que estaba muy ilusionado.

- Sólo miren... - Ya habían caminado unas cuantas cuadras para llegar a la casa de Rog y enseñarles el auto que estaba estacionado al frente de su casa. El automóvil rojo estaba tan brillante, como si alguien hubiera pasado horas dándole amor.
- Bueno, ahora definitivamente entiendo tanta emoción, querido. - Sonrió Freddie admirando el auto.
El rubio seguía enseñando cada esquina de su adquisición con los ojos llenos de la más pura emoción.

- Es la máquina de mis sueños, es perfecta. - Decía con los ojos brillosos. - Es como un hijo. - Continuó dándole un abrazo al auto.

- Me preocupa que haya semen en la mufla, Rog, cálmate. - Bramó Brian con las mejillas coloradas por lo que había dicho. Ahora si que todos rieron, hasta Roger que al inicio puso resistencia. Cuando terminaron de reír Fred se acercó al oído de Deacy para decirle algo.
- Tenemos que irnos. - Se apresuró a decir John. Los amigos se despidieron con un abrazo brusco entre ellos como era típico.

- Pensé que hoy te ibas a ver con Jess. Cuestionó Brian.
Roger paró un momento y se sentó en una de las bancas de madera (seguían en el porche delantero de su casa).
- Mierda... Olvidé que Jess existía. - Dijo Rog con recelo.
- Eres un idiota. Por eso nunca accedí a salir contigo. - Respondió con burla el chico del cabello rizado.

- Bueno, ahora que oficialmente estoy soltero de nuevo, ¿qué te parece ir conmigo al auto cinema? - Roger le lanzó las llaves del auto a Brian con felicidad. El cuarteto de amigos pasaban la mayoría de sus fines de semana allí.
- Está bien, si insistes tanto. Lo haré. -

Roger manejó aquel auto como si fueran uno solo, con una sonrisa en su cara. Brian miraba a Roger de reojo, ver esa sonrisa hacia que sintiera una oleada de calor.
Llegaron al auto cinema, no sin antes pasar a comprar un poco de alcohol para ambos, y cigarrillos para Roger.
Esa noche estaban pasando Rebelde sin Causa. - Él es mi ídolo. Quiero ser como él. - Dijo el rubio mirando al protagonista.

- ¿Por qué siempre quieres lo incorrecto? - Brian sonrió, Roger siempre tenía ese look de badass pero por dentro era un pastelito, y el que estaba más consiente de ello era Bri.

- Brian, mira te lo voy a decir así, - Se sacó el cigarro de la boca y cierra sus ojos. Luego los abre: - si una chica ve a un sujeto tan sexy y bello como yo y aparte de eso es blando van a aprovecharse. - Ya. - Brian le miraba con aire divertido.

....

Eran cerca de las 00:00, Brian y Roger se habían quedado dormidos en el asiento de atrás. El rubio despertó, tenía el cigarrillo apagado en su boca. Tenía su cabeza apoyada en algo, se movió un poco y eso era Brian, los ojos azules de Roger y su boca medianamente abierta miraron el rostro de Brian. Este se veía tranquilo, Roger no pudo evitar sonreír para luego volver a la posición que estaba con cuidado de no despertar al rizado.

Se acurrucó con Brian para dormir en una posición bastante incómoda, pero estaba muy feliz como para interrumpir ese momento.