Capitulo 1

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Mi día comienza cuando mis ojos se abren lentamente intentando hacer oídos sordos al insufrible despertador que se encontraba en la mesita de noche a mi derecha.
Hoy debía ir a la empresa de mi papá para ayudarle en unos asuntos financieros. Era muy buena en matemáticas y eso le causó un gran beneficio a mi padre.

Me visto rápidamente, con lo primero que veo colgado en mi armario, unos jeans negros, sudadera gris y rebook blancos y mi pelo largo castaño suelto. Me considero una persona simple, sin gracia alguna, casi nunca me maquillo, me dicen que visto como un hombre pero ¿saben? lo que la gente diga me da igual, si no les gusta como voy vestida, que no miren.
Le mando un SMS a mi papá, avisandole de que me dirigo en este momento a la empresa.

Tardé unos quince minutos aproximadamente para llegar allí. La distancia que había entre mi casa y la empresa era inmensa.
Al entrar veo como Marina, la recepcionista, me saluda con una gran sonrísa

-Buenos días Elena

-Buenos días Marina ¿sabes donde está mi papá?-pregunté mientras guardaba mi iphone en el bolso de mi pantalón

-Está en la planta sexta. Ha llegado un joven empresario para ofrecerle un trato

-Está bien marina, muchas gracias-dije entrandoen el ascensor

Al salir de el, me dirigo a la oficina de mi padre, donde ponia con letras medianamente grandes y negras (PATRICK PARKER)
eso me causó una pequeña risilla, sabiendo que mi papá es un poco expresivo a la hora de poner su nombre en cualquier parte de este edificio.

Toqué dos veces la puerta antes de entrar, con lo que recibí un Adelante, de parte de mi padre.
Cuando entré a la oficina me quedé sin saber que decir o que hacer. Había ¿un empresario? que nunca en mi vida había visto. Este al notar mi presencia me miró por un par de segundos antes de sonreír y volver su vista a mi padre

-Hija te presento a Christian Holls. Christian, esta es mi hija Elena-dice mi padre levantandose de la gran silla que había en su oficina

-Un gusto-dije con nervios en mi voz mientras miraba sus ojos marrones

-Creeme, el gusto es mio-contestó mirandome de arriba a bajo mientras me giñaba un ojo

-Bueno a lo que iba. Hija te he llamado para algunas cuentas financieras que no me cuadran. ¿Podrías revisarlas?-pregunta mi padre poniendo ojitos. Sí, así de cursi era

-Claro papá no hay problema-agarré la carpeta con las cuentas y una calculadora

-Entonces Christian ¿necesitas algunas chicas de mi empresa que te facilite tu trabajo y que te ayude con tu empresa? Pues no se quien será-dice mi padre en un largo suspiro

-Yo puedo ser esa chica-contesté de inmediato antes de que mi padre me replicara nada-Sé perfectamente de que va el negocio. Yo podría ser de gran ayuda

-Hija no creo que sea buena idea, además ¿no quieres estar en esta empresa junto a tu papi?-preguntó mi padre con cara triste

-Si me permite Patrick, creo que su hija es el perfil ideal que necesito en mi empresa. Es joven y parece que se le da bien las matemáticas. Claro que no lo haría gratis, le pagaría por el tiempo que esté en mi empresa-dice el tal Christian Holls sin apartar la mirada de mi

-Nosé Christian debo pensarmelo. Ahora elena, puedes retirarte ¿sí?

-Como digas papá-puse los ojos en blanco

-Adiós Elena-dice christian sonriendo de lado. ¿ A este tipo no le dolerá la cara de tanto sonreír?

-Adiós Christian Holls-dije cerrando la puerta de la oficina de mi padre

Enamorada de un hombre mayor(Sin Actualizar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora