Consecuencias. (Tomarry)

cap. 14 "el pasillo del tercer pisó"

Su amigo Draco que parecía tener una enemistad con la piedra de su zapato después de que su hermano lo confrontara el primer día de clases, había tejido una red para que su hermano estuviera en problemas, lamentablemente se había perdido el espectáculo pues en ese momento se hallaba con el profesor Flitwick teniendo una de sus tutorías privadas, había provocado a Alex para que se encontraran en el aula de trofeos para tener un duelo de magos, él junto con su amigo cayeron ante su provocación e incrédulos fueron a el lugar acordado, lamentablemente el conserje Flich no los había encontrado como su amigo rubio lo planeo pero al día siguiente se la pasaron exclamando que había un perro de tres cabezas en la puerta prohibida del tercer piso, la profesora Mcgonagall les bajo 15 puntos a cada uno por haber iniciado rumores tan absurdos y los castigo con detención por 2 semanas con Flich.

Al final había cumplido con el objetivo inicial pero había quedado la duda en la mente de Harry, sabia que su hermano y amigo de este no eran tan imaginativos ni creativos como para crear una historia así, les faltaba materia gris y sus notas en clases lo respaldaban en saber que no podían haber inventado que un cancerbero habitaba en el colegio ellos solos, además de tenia cierta lógica que ellos dijeran la verdad,pues el profesor Dumbeldore advirtió desde inicios de año que no debían de adentrarse a el pasillo a menos que planearan tener una desagradable experiencia, que un animal tan letal como un cancerbero estuviera aquí podía decir que estaba custodiando algo, los antiguos griegos los utilizaban para proteger sus tesoros al ser criaturas total mente fieles a sus amos y entregados a la tarea de proteger los tesoros que les confiaban.

Ahora solamente quedaba pensar ¿Qué cosa cuidaba el animal? ¿Por qué exponer a niños que claramente desobedecían lo ordenado sólo por el simple echo de hacerlo? ¿Por qué en este lugar específicamente?.

Estaba claro que era algo importante ya que Hogwarts era uno de los lugares más seguros del mundo, pero ¿Por qué aquí si bien podía estar perfectamente protegida de un lugar como Gringotts?.

Aunque tal vez la cosa que había en el tercer piso tenia algo que ver con el robo que se intento en Gringotts el día de su cumpleaños, los goblins habían testificado que no faltaba nada así que era cierto, no por nada el había trabajado con un goblin desde que tenia la temprana edad de 8 años, ellos nunca permitirían que el honor y la reputación que tenían con el resguardo de las fortunas que estaban a su cuidado fuera manchado con algo como un robo en sus instalaciones.

Los goblins eran una raza guerrera y orgullosa, si había algo que podía compararse en igual medida con su amor por el oro seria su amor con la guerra.

Entonces si alguien había querido robar algo que estaba previamente resguardado en Gringotts, el dueño había considerado que ya no estaba seguro allí y fue trasladado en Hogwarts para su seguridad, sabia que debía de ser algo sumamente valioso o poderoso y en su defecto ambos, y que era necesario para algo grande pues su seguridad fue muy rígida.

Si solamente un cancerbero era lo que cuidaba la entrada no quería saber que más había cuidando.

También esa podría ser la razón de porque estaba en una institución Voldemort, se había tomado la molestia de estar en el personal estudiantil y tener que aguantar a un montón de adolescente hormonales con escasas neuronas.

El objeto debería de ser suficientemente importante y poderoso como para captar el interés de el Lord obscuro.

Si él fuera Voldemort, lo primero que volvería su prioridad sería tener un cuerpo fuerte y saludable en el cual habitar, recuperar su estado solido para poder ser independiente y poder volver a forjar de nueva cuenta su circulo de aliados.

Así que tal vez lo que había ahí lo ayudara a ese cometido.

Entre tales pensamientos y divagaciones llego a su clase de historia de la magia donde los dejó momentáneamente de lado para poder poner toda su atención y esfuerzo en captar lo de quería explicar el profesor y no sucumbir a la somnolencia que provocaba la voz del profesor fantasma que tenían.