tattoo ⇢ jarry stirlwall

chapter 3;; poop

Harry.

Madre mía. Desde que la vi en la puerta, no pude apartar mis ojos de su cuerpo; delgado, no tan alto, con un cabello castaño, casi rubio y unos ojos chocolate que te dejaban encandilado, ya que su mirada era profunda, permanentemente desafiante. Le di espacio para que entrara, y pude observar como ella miraba el lugar con la curiosidad de una niña pequeña, lo que me hizo sonreír levemente. La molesté un poco cuando me dijo que querría un tatuaje, ¿a que vendría si no? Lo que la puso furiosa, tenía un carácter muy sensible la chica. Me dijo luego lo que querría y yo me extrañé al ver los garabatos en el papel, hasta que ella me explicó su significado.

Pregunté donde lo querría y cuando dijo que en la columna, levé una ceja, mitad en burla mitad sorprendido por su valentía, aunque creía que no sabía cuánto dolería en ese lugar. Sentí como me fulminaba con sus ojos cafés, parándose frente a mí, con su mirada altanera. Se quitó la chaqueta, dejando su bella piel morena solo cubierta por un peto. Yo seguí sonriendo, ¿Qué pensaba ahora está? Pero mi sonrisa no duró demasiado, ya que luego de que se quitara la última prenda que cubría su pecho, mis ojos cayeron a sus pechos totalmente expuestos a mi ansiosa mirada. Pregunto si comenzaríamos, y yo asentí, sintiendo como mis mejillas se enrojecían. Madre mía.

Me detuve frente a mis utensilios de trabajo y observe a su espalda; perfecta. Su tez morena naturalmente bronceada, se veía tersa y apetecible para el tacto humano, también tan sensible que pareciera la de un bebé, que hasta me daba terror marcarla permanente de lo tan hermosa que era. Negué, ella quería ese tatuaje, pues lo tendría. Tomé la máquina con tinta negra y con un pulso realmente preciso, comencé a escribir la frase en el lugar indicado. El roce de mi mano contra su piel era realmente suave, como si de una pluma se trata, contrastando con el dolor que le debería estar provocando la máquina. Sentí como gemía, y algo en mi interior se retorció, y no, no en el buen sentido. Iba a parar, cuando escuché su voz, casi quebrándose. —Ni te atrevas en pensar de dejar a medias. Una Badwi nunca deja las cosas a medias; ahora, termina ricitos. –su convicción me hizo sonreír; era una obstinada de primera, y debía de admitir, que eso me atraía. Luego de casi dos horas, terminé el trabajo, mirando satisfecho a su espalda y paseando mis ojos por su trasero de manera descarada, sabiendo que no podría reprocharme si no podía verme hacerlo. —Por fin…-la oí suspirar y tratar de levantarse, a lo que me negué con un gruñido. — ¿Qué, aún hay más?-gimió aburrida.

—Debo darte algunas instrucciones de cuidado, señorita impaciencia.-dije, mientras buscada unas vendas y algo de alcohol, para desinfectar, solo por si acaso. La vendé, y dije lo que debía hacer durante esa semana y las dos siguientes, el cuidado que requería el tatuaje que abarcada desde su cola hasta su cuello. La ayudé a colocarse de vuelta su crop top, deteniendo mí mirada más de lo debido en sus pechos y vientre plano. ¿Qué mierda te pasa, Styles? Pareces un jodido adolescente hormonal, mierda. Colocó su chaqueta color mostaza, cubriendo perfectamente su tatuaje. Me dedicó una sonrisa de lado, moviendo sus caderas coquetamente fuera de la habitación, y yo le seguí como su perro faldero, embobado por el vaivén de su trasero. De aquí para allá, de allá para aquí… “¡Que se te cae la baba, Styles!” Se burló mi conciencia, haciéndome al darme cuenta, de que tenía razón, un rastro de saliva estaba corriendo por un lado de mi boca, mierda, ¿Qué tenía esta chica, joder?

Llegamos al vestíbulo, donde Zayn y su follamiga, la rubia, se encontraban coqueteando. Observé como la castaña que casi me hace parecer un adolescente con un crush fruncía su bonita frente, haciendo una mueca de molestia. Se veía realmente graciosa, y ¡Demonios! Adorable así.

—Perrie.-Habló duramente, llamando la atención de su amiga. Esta, se giró bruscamente, dedicándole una gran sonrisa.

— ¡Poopey!-Gritó, casi abalanzándose en uno de esos llamados, “abrazos de oso” a la chica a mi lado.

— ¡Perrie Louise, no te atrevas a abalanzarte, porque te corto las tetas y te las pongo de aros!-reí ante el apodo que le había dado la rubia. Poopey. ¿Quién en este mundo se podía apodar Poopey? Solo la niña pija a mi lado.

La castaña me dedicó una mirada no tan amable, levando una ceja; molesta. — ¿Qué es tan gracioso, ricitos?-se cruzó de brazos, tomando una posición desafiante. Escuché como Zayn le susurraba a Perrie, o más conocida como la rubia follamiga, un: “—Soy yo o ¿estos dos se quieren asesinar?”

Reí ahora un poco más alto, sonriéndole de lado, divertido. —Tu apodo, Poopey.-me burlé de ella a la cara esta vez, recalcando su sobrenombre con burla. La rubia follamiga de Zayn, ahora conocida como Perrie le susurró de vuelta: “—Yo apuesto más por una tensión sexual sin resolver.” Ganándose una mirada asesina por parte mía y de su amiga. Perrie carraspeo, incómoda por la situación, y se iluminó cuando algo pasó por su mente.

—Hey Poopey, ¿Por qué no pagas ya y nos vamos de compras otra vez, va?-Esto logró que el humor de Poop se apaciguara más y asintiera, sacando la billetera de su bolso pequeño, caminando hacia Zayn, quién se encargaba de las cuentas.

— ¿Cuánto es?-espetó de manera fría. Mi mejor amigo le dijo el monto, ella sacó un billete de muchos ceros, casi haciendo que nuestra caja registradora quedara vacía de monedas para el cambio. Luego de pagar, tomó el brazo de la rubia y las bolsas que estaban cargando las dos, caminando fuera a toda prisa, impidiendo que Zayn y la otra se despidieran o algo por el estilo.

—Está loca…-dije, apoyado en un mueble, mirándolas mientras salían y se alejaban de nuestras vistas. Suspiré y me giré para observar a Zayn, quién me sonreía de manera burlona. Alcé una ceja extrañado, ¿Qué cojones le pasaba? — ¿Qué, tan lindo me veo que quieres cogerme con la mirada, Malik?-reí ante mi propia broma, pero él solo seguía sonriendo, como si supiera algo que yo no.

—Harry, el único que quiere coger aquí, eres tú, hermano.-iba a replicar, pero se me adelantó, soltando una frase que me dejo más mudo que una estatua. —Vi cómo le mirabas el trasero a la chica, y Pezz tenía razón, la tensión sexual entre ustedes es tan palpable como los rizos de nena que tienes.-me guiñó un ojo, antes de irse caminando a nuestra pequeña nevera y sacar una cerveza, sonriéndome con burla.

¿Y, si era verdad lo que decía ese negro canela pasión? ¿De verdad le tenía ganas a Poop? “— ¡Styles, si hasta le pusiste un apodo!” Mierda.

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Nueve treinta de la noche, a punto de cerrar el local. Me encontraba barriendo el lugar, ya que era mi turno de cerrar. Zayn se había ido temprano, con la excusa de que tendría que arreglarse para la cita que tendría luego con su rubia follamiga por lo que, como aquí leen, su amigo ricitos de niña tuvo que quedarse como su madre a limpiar. Cuando llegué a la caja registradora, en el lado de los clientes encontré algo que me llamó la atención. Un bolso color mostaza se encontraba en una esquina, descansando en la ventanilla casualmente, llamándome a revisarlo. Miré de un lado al otro, buscando a personas que pudieran catalogarme de gay al encontrarme con un bolso en mis manos, pero al ver que me encontraba solo, boté la escoba y casi corrí a ver lo que había dentro.

Brillo para labios de una marca que no podía pronunciar, billetera que se encontraba a un punto de casi explotar, toallitas higénicas. —Ay mamá, Dios me salvó regalándome un pene…-solté, mientras me persignaba y agradecía a la virgen por mis bolas, hasta que al final encontré un móvil de último modelo dorado. Estaba sin clave por lo que pude revisar de arriba abajo todo. Y en las fotos me detuve, con una sonrisa divertida en mis labios. —Nadie es más tonta que Poop para dejar su bolso olvidado en una tienda, de verdad.-reí y negué, para luego marcar el número que decía ‘Perrie’ en mi móvil y guardando el de Poop con ese apodo en mis contactos. Parece que nos volveríamos a encontrar.

»  ¡BEBÉS DE MI VIDA AMORES DE MI CORAZÓOOOON!

Gracias gracias, ¡mil gracias por los votos y lecturas, porque gracias a eso, ¡Tattoo está entre los númeritos!!

Ah, me re emocioné, ¿vieron? Ay, por eso pienso seguir subiendo lo más seguido posible capi de esta fic<3

Voten, comenten, lean, síganme en cualquier red social disponible en mi perfil e.e ¡No sé, ay! Las amo montón<3

xxJavixx