Mira al pelirosa a su derecha, sentado en el sillón individual apreciando la televisión y abrazando sus rodillas, HoSeok se pregunta constantemente si la decisión de hacerse cargo de un desconocido fue buena idea, pero intenta mantenerse positivo para evitar pensar en los regaños de su mejor amigo al enterarse de la noticia.
Lleva más de tres días hospedando su pequeño hogar, el desconocido dormía plácidamente en su cama, en su habitación, usando sus prendas en especial las camisas holgadas y los pantalones de chandal gigantes haciéndolo ver como si llevara cobijas encima en lugar de ropa. A HoSeok no le molesta la compañía, sin embargo, su preocupación aumenta y la tensión lo invade cada vez que el chico está en la misma habitación que él.
No sabe su nombre, ni quién es o de dónde vino, tiene un expediente vacío que solo indica las fracturas que tiene o alguna vez tuvo, conserva los horarios de sus medicamentos en un imán en la nevera de la cocina. El chico le sigue pareciendo adorable, jamás pensó que una cara bonita pudiera hacer tanto efecto en él, pero lo sabía, para HoSeok aquel desconocido no era cualquier cara bonita.
HoSeok intenta no presionarlo, no quiere que se asusta y huya. Entonces intenta otra cosa, por dos días ha estado estudiando al chico, conoce algunos hábitos que le parecen extraños y al mismo tiempo le generan lastima. El chico cada vez que necesita ir al baño le pide permiso con señas, o cuando HoSeok intenta acercarse se encoge como un reflejo natural intentando evitar algún golpe. También sabe que ama dormir, no tanto por cansancio, solo cuando esta aburrido o tal vez después del almuerzo como algún tipo de siesta.
Se levanta del sillón con la intención de irse, se siente de alguna forma abrumado y decepcionado. No avanza ni retrocede, no consigue ningún otro tipo de información y aquello lo está jodiendo. Toma su celular y se dirige a la puerta pero entonces siente su corazón detenerse.
El chico lo toma desde el borde de la camisa intentando mantenerlo ahí con él. —¿No quieres que me vaya? — El niega y HoSeok lo ve como una oportunidad, si con esto no consigue nada entonces se dará por vencido. —Me quedaré. Solo si me dices tu nombre.
El chico lo piensa por unos segundos, limpia su garganta e intenta procesar las palabras. —Hyungwon. —Dice en un tono bajo y ronco, después de días sin hablar aquello es normal.
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________________________________Ha pasado más de una semana desde que Hyungwon ha llegado a su vida, él se queda en casa mientras HoSeok sale a trabajar, a veces intenta comprar cosas deliciosas que podrían gustarle a Hyungwon, pero el pelirosa parece no le interesa ni lo más mínimo otra comida que no haya cocinado HoSeok y aunque sea solo una suposición se da el permiso de conmoverse.
Su celular vibra en su bolsillo y escucha la canción de tono de llamada, sabe quien es y contesta de inmediato. —Hoseokkie~ —La melosa voz de su mejor amigo suena al otro lado del teléfono.
—Lee Minhyuk. —Dice secamente con la intención de molestar al otro. Consiguiéndolo cuando escucha un suspiro al otro lado de la línea.
—¿Podré conocerlo hoy, o seguirás siendo un egoísta? —Minhyuk es un excelente amigo, es leal y su amos es incondicional, pero al mismo tiempo es directo, molesto y habla demasiado, perfectamente equilibrado.
—No es porque no te lo quiera presentar, es muy tímido y todavía no habla conmigo. Aparte no quiero presionarlo. —Dice con clara preocupación en su tono, sabe que Minhyuk aún sin estar en su posición lo entiende mejor que nadie. —A veces parece estar en otro mundo, cuando comienza a pensar se mantiene horas en silencio y parece que quiera llorar.
—Dale un respiro, quién sabe cuántas cosas horribles tuvo que pasar. Sé que al principio no te apoyé de la forma correcta, aunque todavía sea una locura tener a alguien así en tu casa, lo qué haces es de admirar. —HoSeok sonríe por el pequeño cumplido, pero aquello no dura demasiado. —Sería de admirar si lo hicieras porque estás preocupado y no porque tienes un horrible amor platónico por el chico.
Maldice a Minhyuk antes de colgar la llamada y entrar a la cafetería que está por la empresa donde trabaja. HoSeok no es fan del tipo de cafeterías donde todo es artificial y ni siquiera le encuentra el verdadero sabor a café, pero el clima todavía es agresivo y se muere por algo caliente. Recuerda brevemente a Hyungwon y su pequeño gran gusto por las cosas dulces. Como su jornada laboral terminó y debe volver a casa decide comprarle algún tipo de frappuccino.
Al volver a casa encuentra al chico acostado en el sillón, piensa qué tal vez duerme pero la idea es descartada cuando el pelirosa abre los ojos y mira a HoSeok con desinterés.
Hoseok se acerca y toma asiento en el asiento individual quitándose la corbata, Hyungwon lo observa con cuidado al notar como deja una bebida caliente sobre la mesa, puede distinguir el olor a café que rápidamente lo pone a babear. Recuerda las palabras de HoSeok días antes "Todo lo mío es tuyo" y decide ponerlo a prueba. Se asegura de que el peliazul se encuentre distraído y toma la bebida de la mesa, rápidamente le da un trago ganando por consecuencia una quemadura en su lengua haciéndolo chillar, las bebidas calientes no siempre fueron de su agrado.
—Hyungwon —Escucha al mayor y quiere salir huyendo de ahí, teme que vaya a regañarlo y se maldice internamente. —Toma. —Al abrir los ojos ve otro tipo de bebida sobre la mesa, es diferente y puede distinguir la leche batida con decoración de chocolate.
HoSeok lo mira tomar el frappuccino de la mesa y con ansias llevarlo a su boca, puede ver por unos segundos la cara de satisfacción al momento en que la bebida hace contacto con sus papilas gustativas y aquella acción lo hace ver a Hyungwon como un pequeño niño con un amor indescriptible por las cosas dulces. —¿Tú lo hiciste? —Pregunta de repente y HoSeok se sobresalta, no esperaba ni un simple gracias y aquello lo tomó de sorpresa.
Niega con la cabeza y entonces ve al pelirosa dudar y con notable tristeza separar la bebida de su boca. —¿Por qué te detienes?
—Tú no lo preparaste. —Dice con desinterés intentando restarle importancia.
—Bueno, es un regalo. ¿No te gustan mis regalos? —Dice y ve al pelirosa llevar con discreción la bebida nuevamente a sus labios. Regalándole una pequeña inocente y cómplice sonrisa.
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the truth untold-2wonメ
FanfictionDesde el punto de vista de Hyungwon todos aquellos gestos eran inocentes. Hoseok es su sanador, su protector. Advertencia; Se puede llegar a mencionar temas de abuso doméstico como otro tipo de temas delicados. No todo es tan trágico. ♡ El título a...