Encuentros

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El sonido del despertador provocó que abra mis ojos de repente. Estaba muy cansada, ya que había estado hasta tarde terminando un trabajo práctico que me había mandado mi profesor de biología. Por cierto, lo odiaba. Me estresaba demasiado tener que aprender las células, los átomos, las moléculas, TODO. Me consideraba una persona que se estresaba fácilmente y esto era un ejemplo. No aguantaba las cosas que odiaba, tanto personas como cosas.

Me levanté maldiciendo al profesor por haberme mandando una tarea demasiado larga. Sinceramente, ya le tenía rencor y apenas era la primer semana de clases. Es decir, ¿qué problema tienen con enviar tanto? ¿Por qué un alumno tiene que aprender más de doce materias y un maestro enseña una? No lo sé, preguntas que se hacen todos los alumnos, ¿verdad? Si nunca te lo has preguntado, déjame decirte que fallaste como verdadero estudiante de secundaria.

Aunque las materias te sirvan dependiendo de la carrera que tomes, hay muchas que no lo hacen. Por ejemplo, mi escuela era católica, por lo cual hay una materia llamada catequesis (religión). A no ser que quieras estudiar catequismo, no te sirve para nada. Hay veces que pensaba, ¿qué tan mal puede estar una persona para enseñar esa materia que es odiada por todos los malditos alumnos? No me gustaba, no me gustó nunca, ni me va a gustar. Y no me van a hacer cambiar de opinión. Además de que te la puedes llevar a febrero o rendirla como previa, eso sí es que es la verdadera frustración.

Me puse el uniforme de mi escuela y salí de mi habitación para dirigirme a la cocina y hacerme el desayuno. Vivía sola debido a que mis padres fallecieron en un incendio. Todavía no habían encontrado al culpable, aunque ya había pasado hace un poco más de meses. Lo que me daba rabia. ¿Algo tan malo le había hecho mi familia a esa persona para que haga eso? ¿Matarlos sin piedad? ¿Al menos, no pensó en mí ni siquiera un poco? Creo que no, la gente psicópata hace cualquier cosa. Cosas que ni te esperas.

Tendría que estar con mi tía, pero le pedí si podía alquilar un departamento para mi sola, ya que necesitaba tiempo para tragar todo. Por suerte el departamento estaba cerca de la escuela, así que estaba conforme. Cumplía con todo lo que necesitaba para "sobrevivir". Además, todas las semanas recibía dinero de parte de ella, porque tenía mi custodia y era su deber mantenerme. Sé que suena de niña mimada, pero es la verdad.

  A veces sentía lástima. Su hermana había muerto, su esposo también y sus padres estaban en otro estado. Seguían vivos, pero no era lo mismo. Mi tía había tenido que mudarse por mi, debido a que era la única que podía cuidarme. Desventajas de ser menor edad. Igualmente, creo que si me tendría que cuidar sola (si tuviera más de 18 años y no tendría más familia), no podría conseguir un buen trabajo y no me podría mantener muy bien. Sería difícil. Todavía me faltaban cosas por aprender, no podía simplemente de un día para el otro madurar tanto y ser muy independiente de mi misma. Hay cosas que no se aprenden solas y todos tienen que reconocerlo.

  Terminé de comer el desayuno y tomé mi mochila con todos mis útiles escolares. Me fijé que haya guardado la tarea de biología, porque hoy era la fecha de entrega. Por suerte, estaba ahí y no tenía que estar a las corridas buscándolo por todo el departamento.

Partí hacia la cárcel y cuando llegué, todas las chicas estaban gritando ansiosas y pegando saltos de emoción. Yo no sabía el porqué de esto, ya que desde que mis papás murieron me cerré a cualquiera que quiera acercarse a mi, debido a que estaba bastante deprimida. No quería causarle males a los demás por causa de mis sentimientos.

Me llené de valor, puse mi mejor sonrisa y le pregunté a la primer chica que se me cruzó.

— Hola disculpa, ¿me podrías explicar por qué hay tanta gente así?—. Primero, me miró con cara de "amiga, ¿acaso vives en un tupper o qué?". Sin embargo, rápidamente, la cambió para tratarme amable... o eso quería pensar.

No me voy a enamorar (Dylan Kingwell). [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora