JiMin se encontraba realmente aburrido en su habitación.
Pudo ver a su Hyung, el vecino, sentándose en su escritorio, pues las ventanas de estos dos conectaban, una frente a la otra.Se quedó mirando al chico de cabello negro con un puchero, suspirando levemente.
- ¿Qué debo hacer para que me notes...? - Se preguntó a sí mismo en un tono lo suficientemente alto como para que el vecino no le escuchara. Pero falló en el intento. El chico de cabello negro pudo escuchar aquello y levantó su mirada hacia el menor, quien abrió sus ojos tanto, que temió dejar de ser asiático.
JiMin era tan torpe y tan inocente... bueno, cuando quería.
Más de una vez, este chico trató de seducir a su querido vecino de demasiadas formas. Ya no le quedaban casi.- ¡JiMin, cielo! - Su madre le llamó, mientras que el menor se asomaba por la puerta, viéndole en las escaleras. - Iré de visita a la casa de la madre de Min, ¿vendrás?
El pequeño pensó durante unos segundos, para después asentir a su pregunta sonriendo malicioso.
Se arregló un poco el cabello y bajó las escaleras sonriendo ampliamente.- Vamos, mamá. - Sonrió.
Salieron de la casa y se dirigieron a la que estaba justo a su lado, para después de ver como la puerta se abría, poder visualizar a YoonGi tras esta.
Park saludó de una forma coqueta, pero disimulada, para que su madre no se enterase.
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•°-[Mamá; el vecino me está provocando.]-°•||YoonMin||• [PAUSADA.]
Hayran Kurgu- ¡Hey! ¡Estúpido! - Gritó el mayor, riendo algo fuerte debido al contrario. - ¿Qué tienes? ¿Holly te dejó? - Contestó burlón el menor, revolviendo su cabello. - No metas a Holly en esto, estoy hablando en serio. Me gustas, estúpido. - Repitió, lueg...