Soy adicto a tus besos con sabor a cigarro, a la marca roja que dejas en el cuello de todas mis camisas, a tus manos que solo las he visto desnudarme. Soy adicto a tu mirada decidida y a tus orgasmos, a tu música, a tu cama. Soy un adcito al placer de tu cuerpo y la paz de tu charla.
Soy un adcito y aunque me lo hayas pedido, no me voy a enamorar... Porque sigo amando mi pasado y todo el placer el mundo no lo va a cambiar, es por eso, que solo puedo amarte a medias y a media tarde...
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Escritos
Non-FictionUn compilación de escritos aleatorios que no han encontrado otro espacio donde estar.