Intocable ©

Epílogo

Jade POV

No podía creerlo, no sé si había escuchado realmente lo que habia comentado Jeisson, simplemente tenía que ser una ilusión, no podía creerme que todo esto estaba pasando.

-¿Estás seguro de que es ella?- Mi voz fue muy suave, sonaba tan temblorosa que me aterraba.

Jeisson no me miró, simplemente seguía mirando a un punto fijo, totalmente perdido entre la pequeña oscuridad.

Selena posó su mirada en nosotros, mostró sus dientes afilados y blancos.

-No estoy seguro de que lo sea, sin embargo... Han pasado tantos años que su apariencia ha cambiado de repente, no es la Selena de la cual me enamoré hace años.- Dió un pequeño suspiro encogiéndose de hombros.

No podía escuchar lo que me decía, estaba sumida en los encantos de Selena, era tan bonita y yo soy tan yo...

No dije nada, simplemente espere a que todo esto fuera un sueño de mierda y que de verdad nad hubiera pasado.

Selena aparta la mirada de nosotros y mira a su alrededor, de repente los edificios empiezan a temblar, estaba tan asustada que pensé que en algún momento los edificios se desplomaría.

Me abri paso entre la habitación, no queria saber absolutamente nada, si de verdad los edicios querían desplomarse que así sea.

-Jade escuchame.. -Dijo en un pequeño susurro. No respondí, no estaba celosa ni nada por el estilo, sabia que Jeisson me quería, sin embargo la aparición de Selena solo se trataba de una cosa; Problemas.

-Jade porfavor... Hazme caso- Sonó mas una súplica que un favor. Esta vez si que volteé a mirar, sus hijos estaban perdidos en mi cuerpo.

-Dime qué es lo que quieres de mi Jeisson, por que la verdad es que no sé que hacer ante esta situación- Los edificios dejaron de temblar, todos los alumnos habian salido corriendo y se encontraban en la puerta principal.

Selena miro a todos los alumnos, sonrió maliciosamente y de un chasquito todos cayeron desplomados dormidos.

No dude ni un momento y comencé a bajar las escaleras, no me importaba los gritos de Jeisson a lo lejos, quería respuestas. No sabía que quería aquí y cuales eran sus intenciones, podía sonar una loca desquiciada, pero actualmente, tantas cosas paranormales me estaba haciendo entrar en la linea de la locura.

-Por fin te dignas a aparecer Jade, llevo vigilando cada paso desde que apareciste en la vida de Jeisson, ahora que te tengo delante puedo confirmar mis teorías. -Sonríe maliciosamente, mi cuerpo dió un respingo incontrolable.

Selena desprendía un aura muy oscura, mis teorías querían decirme que al despertar de la peor manera posible ha hecho que esa Selena dulce y carismática que había descrito Jeisson había desaparecido por completo.

-Yo no te conozco a penas, por favor te pido que te vayas- Susurro lentamente, siento un tiron en mi corazón y me falta el aliento, los ojos rojos de Selena se habían iluminado.

Me estaba haciendo daño, y yo no podía hacer nada para detenerla.

-Vaya.. Veo que ya conoces a mi hija Jade. - Katherine aparece en mi campo de visión con una sonrisa de satisfacción en sus labios. Suelto un quejido en forma de queja, Selena me estaba haciendo bastante daño y yo no podía hacer nada para detenerla.

-Usted no se meta madre, es la menos indicada para hablar aquí, no deberías siquiera aparecer en mi campo de visión, me das asco. -Escupe con odio Selena. Podía ver el odio en sus ojos, sabia que Katherine nunca iba a ser perdonada por su única hija, la cual estuvo dormida durante muchos años.