Déjame acariciar tus cicatrices y besar tus miedos.

Capítulo 4: Cuando el silencio grita, el universo baraja y da de nuevo.

En la ciudad de Córdoba.

Jazmín corto la llamada que se extendió más de 40 minutos.

Camino hasta el balcón y se quedó con la vista sobrevolando el agua clara que corría río abajo. Tanto se adentro en el laberinto de sus pensamientos, que al sonar su teléfono celular se sobresaltó.

Miró la pantalla era su amiga Lola, atendió con una sonrisa en el rostro.

Lola : hola bella, estás ocupada, querés nos juntemos en el café de siempre en 30 minutos.

Jaz: dale en 30 nos vemos, necesito hablarte de algo justo te iba a llamar.

Lola : ah dale, que es novia nueva? ya quiero saber, nos vemos.

Jaz: jaja no, no es novia boba, chau.

Jazmín del Río es profesora de educación física, se desempeña como entrenadora de equipo femenino de hockey sobre patines, hace 3 meses volvió de Berlín donde sacó campeón al equipo dirigía, pero eligió volver a la Argentina. Profesionalmente estaba en su mejor momento pero emocionalmente no, acababa de cortar una relación de dos años con una de las jugadoras estrella del equipo. Si bien la relación estaba desgastada prefirió alejarse y tomar distancia para poder cerrar esa etapa.

Jazmín tenía una personalidad muy pasiva, tranquila, conciliadora, era tenaz y luchadora cuando las adversidades la envolvían. Jazmín era especial , solitaria, disfrutaba de su casa con vista al rió, del café negro, de un libro de poesía, algún vinito blanco, era feliz con pequeñas cosas , coleccionar pequeños momentos era su hobby.

Su mantra era dar todo, en el amor como en la cancha, daba todo y dar todo a veces te deja sin nada.

Café

J: hola Loli como estas?

L: hola Jaz bien tranqui, sin mucho que contar, tenía ganas de verte amiga, la verdad me sorprendió aceptaras la invitación, ya que llevas tiempo sin salir, contame que te pasa? Qué te saco de tu madriguera .

J: me llamaron para dirigir un equipo de Mendoza.

L: eso es buenísimo no?

J: sí que se yo, es un equipo pequeño pelea subir de categoría y quedarse con el campeonato nacional, no es de lo que vengo a acostumbrada pero es un desafío profesional, y no estoy tan lejos de acá.

L: que te frena? cual es la duda?

J: no lo se , nunca dudo de mis decisiones, pero siento algo extraño aquí en el pecho, algo dentro mio me grita ve y a la vez me asalta la sensación más parecida al miedo que haya sentido jamás.

L:  a qué ? Mira Jaz si piensas que no es bueno no vas y listo. Estás para equipos superiores, si deseas cambiar de aire empezar de cero sobre todo para terminar de olvidar Elena pues te vas. Creo has pasado demasiado tiempo ya metida rumiando en tu cabezota tonterías.

Ja: no tiene ver con Elena ya eso es pasado, soltarla me a ha costado pero el proceso lo hice estando con ella, me pase mil noches esperándola en una cama húmeda por mis lágrimas, durmiendo en el borde , a la orillita de mis deseos vacíos de caricias, la rutina dibujó un abismo de quizás entre las dos, me conformé mucho tiempo con las migajas de su atención, mi valoración personal muto a la de una babosa sin sal, y ahí el daño ha sido casi mortal.

L: madre mía Jaz , la voy ahorcar, hacerle eso a mi amiga, te has visto si eres un encanto, tus palabras, tus sentimientos nobles, además que estas mas buena que comer con la mano.

J: jajaja no eramos compatibles, si es verdad me ilusione mucho ahí , pero bueno queríamos también distintas cosas yo...

L: vos querías una familia , hijos, amor para toda la vida ella quería juerga y diversión.

J: si , soy muy aburrida no?

L: no, Jazmín date la oportunidad de empezar de cero cosas nuevas, mujeres nuevas.

J: no estoy para eso ahora, no me desespera estar sola, me llevo de maravilla con el silencio, me revela cosas, me levanta la voz de madrugada, me acaricia y susurra despacio "debe existir algo más", pero bueno lo que tenga que llegar llegará, sólo espero poder darme cuenta, sentirlo donde dicen que se siente entre la boca del estómago y el acelere imparable del corazón. ya sé cursi no?.

L: debes parar de leer Elvira, hazme un favor Jaz cuando lo sientas, no lo dejes escapar.

J: cuando se puso tan profundo la conversación? jajaja solo quiero trabajar sabes amo el hockey.

L: entonces dale , cuando te vas?

J: No lo se en estos días viajaré a ver el equipo y hablar con el presidente.

L: te voy a extrañar amiga pero todo irá bien.

J: sí eso espero.

Mendoza días después.

El club notificó estaban en busca técnico nuevo el próximo partido lo dirigirá un suplente, de las inferiores.

Florencia llegó como si nada al horario del partido , sus compañeras la ignoraron. Miranda y Virginia la saludaron solo asintiendo con la cabeza. Lucía al verla salió del camarín.

Llegó el técnico suplente dio el equipo que jugaba .

X: Florencia no juegas.

F: tonterías yo juego.

X: no, no viniste al entrenamiento no es justo para tus compañeras.

F: Iré al banco.

EL técnico sin mucho carácter y a sabiendas de lo excelente jugadora era Florencia accedió.

El partido se desarrollaba con normalidad el equipo perdía 4 a 1 , Florencia se salía de la vaina por entrar, de pronto la hinchada empezó a pedir por su ingreso, entre la gente pudo ver a Daniel sonreír y la saliva se le agrió.

X: Florencia entras a la primera que te mandas sales, vamos .

La morocha estaba iluminada, todo le salió bien , el partido finalizó 4 a 5, con cuatro goles de la recién ingresada, dieron vuelta el partido y lo ganaron.

En vestuarios, Florencia alimentaba su ego en soledad, no recibió saludo, no hubo felicitaciones, solo comentarios por lo bajo, silencio y frialdad para con su persona.

A la salida del Club, Florencia caminaba hacia su moto , cuando encontró a Daniel afirmado en la misma, ahí estaba otra vez lo amargo en su boca.

Daniel: Hola princesa buen partido , vamos a festejar.

Flor: no tengo ganas estoy cansada, hoy de verdad paso.

Se acercó a la moto con la llave en la mano, para así esperar Daniel le diera espacio para irse, éste la tomó de la cintura y la acercó a su cuerpo de manera brusca.

Daniel: vamos nena, me debes que te metieran hoy al partido.

Flor trato de zafarse del agarre.

Flor: de verdad no quiero ir, soltame por favor.

Daniel no hacia caso, embrutecido, imponiendo su hombría, volvió acercar a Florencia hasta pegarla a él.

Daniel: Vamos princesa festejemos y te hago olvidar al boludo ese de una vez por todas.

Una Flor rota, convertida en marioneta del destino, le enredaba un pocos los hilos a un Daniel brusco , violento y oportuno.

X: ey te dijo que no, no escuchaste?

El sonido de una voz femenina los hizo voltear a los dos, la morocha se soltó el agarre de Daniel, y se afirmó en la moto, una fuerza descomunal la atravesó , la hizo tambalear, se llevo las manos al pecho. La imagen que su retina capturaba , le tiro abajo dos líneas de ladrillos, sí esos que amurallaban su corazón.