Déjame acariciar tus cicatrices y besar tus miedos.

Capítulo 13: Déjame acariciar tus cicatrices y ...

En el cuarto se cambiaban para salir.

Las dos estaban listas, la verdad que eran una bomba las dos, una mas linda que la otra, y no por su ropa, sus maquillajes o sus cuerpos curvilíneos, sino porque en sus ojos se veía la dicha de saberse mirada, por los únicos ojos que importaban, eso las hacía tremendamente bellas.

J: te venís conmigo en el jeep?

F: no, me voy en la moto, no me gusta depender de nadie, ademas mira si pinta irse con alguien ...

J: Ah claro si, imagino ....

F: dudas de eso?

J: no, para nada, quien no va a querer llevarte a casa, pongo en duda que vos te vayas con cualquiera.

F: y eso?

J: no sos ese tipo de mujer.

F: vos te podes ir con Lucia.

J: ya estás otra vez, con tu escena de celos, hacete cargo de la patada en el higado te da, deja de escaparte de mi.

F: uh loca que susceptible, todo lo vas a tomar a mal Jaz, ahora me voy yo, no te preocupes.

Florencia se fue, no estaba enojada, sólo que a veces le asustaba tanto como le encantaba, lo frontal y fresca que era Jazmín.
Quizás era verdad se escapaba, no lo podía manejar aún.

En el boliche.

El grupo estaba feliz tomaban algo, todas tenían una cerveza en la mano incluida Florencia, que junto a Miranda y Virginia hablaban del tiempo que hacía que no salían, se las veía realmente felices por el encuentro.

Lucia retenía en una conversación coqueta y sosa a Jazmín a unos metros de ellas.

Florencia y Jazmín se buscaban todo el tiempo con la mirada, el hilo se enredaba entre los bailarines.

Florencia tomó un sorbo largo de cerveza para tomar coraje, se acercó por la espalda a la pelirroja, metió los dedos en el pasacinto del pantalón de la pelirroja, y la trajo desde la cintura hacia ella, apoyando su cuerpo entero.

A esta altura Jazmín ya no escuchaba ni veía a nadie, el perfume que reconoció al instante le dejo mas perdida que piratas sin brújula en alta mar.

La morena se acercó a su cuello, apartó su cabello llenándose de su esencia, dejando que la suavidad se le colara entre los dedos.
Casi rozando el lóbulo de su oreja con los labios le hablo de manera seductora.

F: será que la directora técnica bailaría conmigo?

La dt volteo para seguir perdida en sus ojos color cafe. Aprovecho el contacto, puso su mano derecha en la espalda baja de la morena, mirándole la boca, le contesto.

J: no me lo perdería por nada del mundo.

La cara de Lucía, fue para alquilar balcones, mientras el atrevido de Cupido le hacía burlas con un espanta suegras .

Caminaron unos metros hacia la pista y comenzaron a bailar.

F: se te pasó el enojo?

J: sí lo siento, fui algo impulsiva.

F: algo? te gusta salir a bailar?

J: la verdad es que no mucho, la ultima vez sali fue con Elena, perdón

F: Jaz contame de ella, si queres.

J: nos conocimos en el equipo, al principio fue dt y jugadora . Luego mi cariño creció, me enamore de su personalidad desfachatada, rebelde, ambiciosa con lo que quería en la vida, pero después de un tiempo de relación, las cosas se enfriaron. Ella quería lo mismo libertad, joda. Comenzó a salir mas seguido, yo deje de esperarla despierta, ya no me sentía cómoda, como si sintiera no era mi lugar en el mundo.
Yo quería tranquilidad, llegar a casa, comida casera caliente, ver una peli, mirar el atardecer. Muy cursi no?