MODERNA DIOSA (Tomoe & Tú)

10.-DUDAS.

Sentía humedad bajo mi espalda...... ¿esto es agua? Sí, era una mínima cantidad de agua.

Sentía el frió de mis extremidades. El único sentido era mi tacto.

Mismo lugar de mis otros dos sueños anteriores ¿porque estaba nuevamente aquí? Decidí levantarme de mi posición y quedando descalzas sobre el agua que cubrir como tantas veces mis pies.

Mi cabello húmedo era levemente agitado gracias a mis pasos por el interminable lugar ¿qué diablos está pasando aquí? Susurre. Pero al parecer el lugar quiso darme una señal divina porque a unos diez metros de mí se encontraba el chico de mis pesadillas y no me refería exactamente aFreddy Krueger  sino más bien al zorro de mirada fría pero a la vez hermosa.

Esta vez el hombre de kimono estaba serio y se encontraba en una zona más oscura que el lugar de múltiples colores donde se supone que estaba yo parada observándolo. Sin más me acerque a él pero parece que cada paso que daba más se alejaba. Mi desesperación dentro de lo que fuera esto aumentaba considerablemente. Pero de pronto el sentimiento de desesperación se acabó y fue remplazada por el miedo.

Una gran sombra más alta que el zorro se posicionaba detrás de él y como una maldita sanguijuela esta succionaba una pequeña luz que irradiaba Tomoe.

¿Qué mierda era esto?

----Tomoe---

Era sábado, doce de la tarde y _____ seguía sin dar señales de vida.
No comprendía como un humano puede dormir tanto. Caminando a paso firme por los tablones de madera que conectaba todas las habitaciones decidí abrir de golpe la puerta corredera de la habitación de la chica, el vapor de mi boca fue expulsado pues la habitación de la nombrada estaba cubierta en escarcha.

Adentrándome en el habita invernal de la mujer me encontré lo que yo ya presentía, ella estaba dormida pero a pesar de que la habitación estaba malditamente a una temperatura muy inferior ella estaba empapada en sudor y cada cierto intervalo de tiempo fruncía el ceño, mis manos tocaron su muñeca en busca de pulso para luego con mis ojos observar su respiración la cual era casi imperceptible.

¿Qué diablos estaba viendo como para que estuviera en esas condiciones? Sin más y con mis nervios a flor de piel decidí despertarla y sacarla de donde sea que estuviera su inconsciente.

______ golpe se sentó en la cama con sus ojos de par en par, mientras intentaba acaparar la mayor parte de aire para sus pulmones.

-¿Qué viste?- la interrogue directamente haciendo que la mujer solo me observara. Conociendo su terquedad y la forma en que nos llevamos sería el último en enterarme sobre su extraño sueño.

Un suspiro escapo de mis labios, aún así desidi no preguntar nada hasta que se calamara
-Te preparare un baño caliente, para que te relajes- comunique, ella asintió haciendo que yo fuera directamente al baño del templo.

Si quería saber lo que le sucedió tendría que actuar aunque sea un poco mejor con ella.

-----________------

Luego del baño, podía sentir que mi cuerpo dolía como el infierno, había intentado en el sueño acercarme al zorro pero lo único que había ganado fue hacerle frente a esa maldita sombra ganándome su mal humor y con ello dos o tres hematomas en mi espalda.

¿Qué era esa sombra que intentaba acaparar a Tomoe?

Sin más, comienzó a trazar el recuerdo del sueño en la croquera blanca, cada línea más delgada que la otra, unos cuantos borrones y resto de la goma que dejaba sobre mi escritorio.
No podía comprender mis propios trazos, aquella extraña criatura no salía en ningún libro del templo pero a pesar de su inexistencia en los libros me causaba una extraña intranquilidad revuelta con temor.

-¿______, que haces?- irrumpieron en la habitación, Hyo al parecer se desconcertó al ver tanto libro regado en el cuarto, rápidamente me apresure en tapar a la criatura dibujada.

-Estudio...-

- ¿Y que estudias a estas horas del día?- entro finalmente a la habitación posicionándose en mi cama para mirar mejor. Sin más gire la silla en su dirección.

- Como se descompone la luz blan..ca...en..los..colores- respondí mirando el libro de física que estaba en mi alfombra lejos de mí.

- Y se puede saber cómo estudias si tu libro esta ahí- apunto en la dirección que antes yo veía.

-Internet-

-La laptop la tiene Mizuki- sonrió entretenido por mi situación.

Maldecía a la serpiente por pegarle mi adicción a las series y películas.

- Por el celular- formule rápidamente.

-Lo tienes cargando- apunto a mi mesita de noche.

Me ha pillado, mierda ¿Acaso este es el final de ______?

-Eres terrible mintiendo- sonrió el chico castaño para luego dezplasarce en dirección a mi desordenada cama en la cual se sentó observando la habitación.
-Sabes- volvió a interrumpir- Recordé cuando me encontraste, me sentía solo, vagaba hasta una extrañan luz que estaba al final de un camino vestido con esa yukata blanca, lo difícil de todo ese camino era no desviarme ante esas extrañas voces que me llamaban hacia los costados oscuros- dijo

-¿Costados oscuros? ¿A que te refieres? - me acerque hasta el para posicionarme de rodillas ante él y ver sus ojos castaños los cuales parecían perdidos en el recuerdo y con un toque de temor.

- Eran como un mar de sombras oscuras aunque... una en particular parecías ser la más fuerte como si su atracción fuera un imán, en un instante iba caminando sin darme cuenta a él ..... Claro hasta que tú me ayudaste fuiste como una enorme luz dorada viniendo hacia mí-musitaba haciendo con sus brazos una extraña forma para explicar lo enorme de la luz- luego de aquello mi nombre justo aquí- toco la marca roja en perfecto kanji que tenía en su antebrazo-Gracias por eso- musito, mientras yo solo me limitaba a despejar ese suceso de su mente, contándole cualquier suceso al azar de mi extraña vida, luego de unas cuantas carcajadas de su parte, el hombre de ojos marrones desidio dejarme sola con mi supuesto "estudió " .
Aun así me preocupaba inmensamente lo que Hyo vio ¿Qué era aquella sombra? ¿Acaso Hyo vio lo mismo que yo? Que es ese extraño ser el cual siento que podría ser un gran peligró para ese zorro y aunque me cueste admitirlo comenzaba a sentir inquietud por ese extraño sueño en el cual Tomoe era el protagonista.

Sí, lo admitía, estaba preocupada por el zorro de ojos lilas.