Bad Boy (Newtmas)

12-. Oscuridad

Eran las once y Thomas estaba tremendamente exaltado, su corazón latía fuerte contra su pecho, estaba excitado en cierta forma por lo que iba a hacer en unos minutos, ya que Newt le iba a mostrar otra parte de su mundo, ¿Qué mundo sería?, ¿qué le mostraría?, ¿sería bueno o malo?, ¿sería un tema familiar? No, demasiado personal, tal vez, algo de amistad. O tal vez, algo que Hae nunca pensó que Newt haría, o tal vez…. Agh, eran demasiadas preguntas, y como siempre, sin una respuesta concreta.

Antes de salir de su casa dejó una nota para su madre, por si llegaba y no encontraba a Thom. Aunque dudaba mucho de que ella se diera cuenta.

Al salir de su hogar sintió el frío colarse por todas las partes de su ropa que no cubría su piel, se puso el capuchón del polerón canguro en la cabeza, y enterró su boca en la roja bufanda que llevaba en el cuello, su negro jean no lo arropaba como se debía en un clima tan frío, pero Thomas le podía importar un pepino si se enfermara o no, quería llegar al parque donde se juntaría con Newt, quería saber más de su vida, quería conocerlo mejor, quería ser especial para el rubio.

-Thom, aquí estamos –Alzó la voz Minho, moviendo sus brazos rápido para que el menor pudiera localizarlos por la oscura plaza,

El menor al verlos, trotó suavemente hasta alcanzarlo. Se sorprendió un poco al ver a los amigos de Newt, no sabía que iban a estar acá, pensó inocentemente que el rubio iba a estar solo con el moreno pececito.

-Hola –Dijo Thom, alzando la mano para saludarlos a todos, Gally y Aris estaban sentados en los columpios de la plaza, mientras que Ben y Alby estaban conversando con un cigarro en sus manos, Minho y Newt estaban sentados en una de las bancas que se encontraban allí.

-Llegas tarde Thom –Pronunció el rubio ronco y violento. Se acerco al moreno y lo tomó por la muñeca, este vio a Minho pararse con una cara de preocupación, pero al instante que Newt se llevó a Thomas más lejos que ellos, se sentó.

El menor ya no podía ver a los amigos de su rubio secuestrador y antes de poder reaccionar bien, sintió la madera del árbol pegar su espalda.

-¿Crees que estamos para tus juegos, Thomas? –Habló el rubio, con su aliento peligrosamente cerca de los labios del menor. El sorprendido moreno no sabía que decir, ¿de qué era lo que hablaba Newt? –Te dije que no llegues tarde –Prosiguió. –No me gusta la impuntualidad.

-Lo…lo siento Newt… yo… no… -Thom no podía cohesionar bien las palabras, él odiaba que fuera así, cuando estaba en un momento de apuros, o timidez, o vergüenza, siempre tenía que tartamudear, y odiaba hacerlo. Pudo ver la sonrisa pícara del rubio y sintió como la fría mano de el pasaba por la mejilla de este y lo atrajo hacia él. El rubio poso sus congelados labios en los del moreno, y este estaba demasiado confundido para entender bien la situación. Primero Newt lo trata como una mierda, y al segundo después tiene sus labios pegados a los de el.

Newt comenzó a moverse lentamente por la boca de Thom, sus labio no se separaron por ningún momento, solo pequeños segundos para tomar un poco de aire, el beso era totalmente lento y sensual, el moreno sintió como la otra mano de Newt pasaba por su polerón, tocando por debajo de su ropa el abdomen del pez, le recorrió un escalofrío por todo su cuerpo, ya que las manos del rubio estaba en contraste con el caliente cuerpo de Thomas.

La ardiente lengua de Newt se posó en los labios de Thomas y este abrió su boca para darle mayor accesibilidad, pudo sentir como sus salivas se conectaban y mezclaban, sus alientos jadeantes seguían cada vez más rápidos, sus lenguas batallaban con la otra para dominar el caliente beso. Las manos de Thom fueron directamente a los cabellos dorados de su amante y pasaron por todo ese pelo, agarrando un puñado de este e hiso que Newt pusiera más presión en el beso, creándolo más necesitado y pasional.