II

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La semana había comenzado tranquila, después de la pequeña pijamada inesperada y la plática con los chicos sobre lo de Jungkook me dispusé a pensar en como escribir parte de la carta.

Mi interacción con Jungkook habia mejorado un poco pues venía siempre a mi casa.

ㅡ¿Has pensado en que ponerle?ㅡpreguntó Yoongi para después sentarse a mi lado. 

Después de la escuela Yoongi me sugirió hacer la carta, también decidió acompañarme a casa ya que todos habian quedado en ir a algún lugar lejos de mi, por si me desesperaba o como ellos le llaman estar en crísis y decir miles de groserías, eso sucede cuando me presiono o me enojó, no soy de decir malas palabras y el único que me aguanta así es Yoongi ya que le gusta ese lado de mí, en ocasiones llega a odiarlo cuando el insultado es él. Así que ahí nos tienen más de tres horas sentados en mi habitación, sí, tres horas.

ㅡAún no, callateㅡmiraba el lápiz y la hoja sobre la mesaㅡme pones nerviosa ¿por qué no vas y comes algo de la nevera? anda.

ㅡ¿Te pongo nerviosa?ㅡcomenzó a reirㅡ¿será qué el que te gusta soy yo?ㅡlo miré mal, mi cara demostraba burla y enojoㅡbien es broma. 

ㅡSolo anda, come lo que quieras, vete antes de que entre en crísis y términe diciendo más de mil groserías y todas sean dirigidas a tiㅡseñalé la puerta dando un movimiento de cabeza.

ㅡBien, me voy, regreso en cuanto haya acabado de comer lo que sea que tengas de comer, odiosaㅡse levantó no sin antes pegarme en la cabeza, justo cuando quise reaccionar, él salió corriendo. 

Tenía claro mis sentimientos hacia Jungkook pero escribirlos en una carta estaba difícil. A veces las palabras que uno quiere escribir no las halla el cerebro. 

Media hora después, comencé a escribir todo lo que sentía; sintiendome libre conmigo misma. Pusé la carta en un sobre color azul marino y la guardé en uno de los cajones de mi habitación. Ahora esperaría a darsela, tal vez la semana que viene, vendría bien.

ㅡ¡Yoongi! he acabado la cartaㅡgrité mientras bajaba las escaleras.

Este salió de la cocina con una caja de galletas, mis favoritas, no pudé reclamarle ya que es Yoongi, estaba haciendo mucho por mí así que me aguanté, reí al mirar su cara, la cara o más bien parte de la boca la tenía llena de chocolate.

ㅡVaya, pareces pelón de hospicio.
ㅡsolté una carcajada.

ㅡCalla-teㅡterminó de masticarㅡson deliciosasㅡasentí, tomando una galleta que él tenía en la manosㅡ bueno, dices que ya acabaste de escribir la carta, veamos una película, tienes que relajarte estuviste más de tres horas pensando como escribir algo lindo para Jeon.

ㅡBien, pon la que quieras iré a hacer palomitasㅡpasé a su lado para meterme a la cocina.

Después de hacer palomitas y ver la película de horror que pusó Yoongi, nos quedamos dormidos, pero nos despertamos o más bien yo, debido a un ruido proveniente de la puerta principal.

ㅡMin, despierta, alguien quiere entrar, Minㅡmoví su hombro, pero no despertabaㅡ¡Min carajo, despierta!

ㅡ¡Ya! callate, ya oí, deben ser los chicos.

La puerta se abrió dejandome ver a cada uno de los chicos, incluido Jungkook, mis sentidos despertaron y me pusé nerviosa.

ㅡVayaㅡhabló Jinㅡpensamos que la casa estaba hecha un desastre.

ㅡPues ya ven que noㅡYoongi comenzó a estirarse lo más que pudo para después mirar a los demásㅡ¿por qué tanto escándalo para abrir una mísera puerta?

|Sweet| J.JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora