Kim TaeHyung de 23 años es un estudiante de la academia de arte, su pasión más grande es fotografiar todo lo que cree que es hermoso, su mayor deseo es tener su propia escuela donde incluya todo tipo de arte, desde pintura hasta danza; pero sus dese...
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Después de haber hecho la sesión de fotos, JungKook se internó en su oficina mientras TaeHyung despedía de la casa del azabache al fotógrafo y a la estilista.
— Oye, ¿Puedo pasar?
JungKook levantó la mirada observando aquel peligris que hacía que su corazón saltara en su pecho.
— Claro que sí hyung, adelante.
TaeHyung miró la oficina de JungKook, toda ella era de colores obscuros, sencilla como JungKook. El peli gris se paseó por el lugar sintiendo la mirada del CEO en él, había decidido que usaría su mejor ropa después de la sesión de fotos y ahora se encontraba usando una camisa gris fajada en un pantalón negro de vestir que resaltaba su culo.
— Tu casa es demasiado sencilla, nada de color y...
— Hyung, ven aquí.
TaeHyung tragó pesado porque aunque ese era su cometido al vestir así, tener algo de intimidad con JungKook no había esperado que el azabache respondiera tan fácil. El mayor caminó hasta posarse detrás de JungKook girando su silla negra hasta que quedaron cara a cara, JungKook tomó la parte trasera de los muslos de TaeHyung y lo sentó en su regazo con las piernas al lado de su cadera. El pelinegro debía elevar la cabeza para observar a su chico pero eso no le importaba.
— JungKook, sé que dije que nada de sexo pero...
— Shh hyung, sólo disfruta ¿De acuerdo?
TaeHyung asintió y recibió gustoso la boca contraria, sus labios moviéndose con sensualidad, su regordetes labios siendo chupados y mordidos por JungKook mientras sus caderas eran acariciadas por las grandes manos de JungKook.
El peli gris no estaba acostumbrado a esas sensaciones que le brindaba JungKook, por lo general él era el que se encargaba de brindar esas sensaciones a su pareja por lo que ahora se encontraba sumamente desconcertado y sin saber qué hacer.
Las manos de JungKook abrieron la camisa de TaeHyung, botón por botón revelando el acanelado pecho del peli gris, deleitándose con la calidez de la piel de TaeHyung contra sus dedos. JungKook sacó la camisa completamente antes de deshacerse de la suya, sabía que TaeHyung estaba un poco perdido al igual que la primera vez por lo que él se encargaría de hacer sentir bien a su chico. Ambos torsos desnudos se encontraron cuando las manos del menor jalaron de las caderas de TaeHyung para besarse, sintiendo pecho contra pecho y sus corazones latiendo erráticamente.
— JungKook~
A JungKook le encantaban los sonidos que salían de la boca de su mayor, eran eróticos y hacían que su pene se endureciera. TaeHyung sintió aquella dureza contra sus nalgas y comenzó a restregarse en ella, moviendo sus caderas de atrás adelante. JungKook gimió bajito y comenzó a trabajar el pantalón de su chico para deshacerse de él. TaeHyung se levantó poco antes de que JungKook lo hiciera también y ambos se sacaron sus zapatos, pantalones y ropa interior.
