JUNTOS || Teen Wolf UNLCT #6b

12.Vamos a averiguarlo

Lydia leyó el mensaje de texto que le acaba de llegar y nos miró.

—Funcionó—dijo

—Ya era hora—dijo Malia e iba a bajar del auto

—No, espera—dijo Scott

Fruncí el ceño, Scott me miró.

—También los escucho—dije

—Si... y yo—dijo Malia

—¿Qué cosa?—preguntó Lydia

—Latidos—dijo Scott

—¿Cuántos?—preguntó Argent

—Diez—dijo Scott

—Más—dije frunciendo el ceño

—¿Vamos a entrar o no?—preguntó Lydia

—No—dijo Argent—La armería ya debería estar vacía

—Podemos acabar con unos cazadores si es necesario—dijo Malia

—Nos enfrentamos a una docena de cazadores bien armados con órdenes de matarlos cuando los vean—dijo Argent mirándonos a Malia, Scott y a mí.

Nos miramos entre los tres.

—¿Cómo se supone que entremos?—preguntó Malia

Estuvimos unos minutos sin hacer nada.

¡Joder, qué impotencia!

Argent giró las llaves del auto e iba a empezar a andar, Malia volvió a girar las llaves y detuvo a Argent.

—Gerard cree que nos fuimos, es un buen plan—dijo Malia

—Es el único plan—dijo Lydia

—Y no funciona—dijo Argent

Suspiré... de pronto escuché un ruido... en mi cabeza.

Hay que votar...

Voces...

Estiré mi mano y toqué un punto trizado del vidrio del auto, apenas lo toqué y comenzó a trizarse más.

—Tenemos diez minutos, diez minutos antes de que la gente de Gerard note el vehículo, cuando pase nos verán como una amenaza en potencia.

Más voces...

El vidrio se triza más...

Voces... susurros.

MIEDO.

—¿Estás bien?—me pregunta Scott de pronto, haciéndome sobresaltar, vi el vidrio del auto... no estaba trizado.

—Si... eso creo—contesté

—Deberíamos cancelar la misión—dijo Argent

—Brett y Lori están muertos, Jiang y Tierney desaparecieron, Gerard siempre está con un paso de ventaja, tenemos que hacer esto ahora—dijo Scott

—Estamos muy expuestos, Scott—dijo Argent

—Tenemos diez minutos—dijo Malia alzándose de hombros, Argent miró su reloj.

—Nueve—corrigió

Scott suspiró—Al diablo

—¿Qué haces?—le preguntó Lydia

—Alejarnos de aquí para poder entrar—dijo Scott

Fruncí el ceño, saqué su mano de la puerta y puse el seguro.