JUNTOS || Teen Wolf UNLCT #6b

16.Es demasiado tarde para eso

Comencé a escuchar una voz, un ruido, abrí mis ojos y mi habitación estaba completamente cubierta en hielo, me puse de pie... no podía dejar de escuchar un ruido muy extraño.

—¿Hola?— hablé

Escuché un ruido a mis espaldas, me sobresalté y me di media vuelta, entonces me encontré en el hospital, este, también cubierto de hielo.

Hacía mucho frío...

Comencé a caminar y había algo que me llevaba a aquel lugar... solo caminaba.

Necesitaba llegar.

Al abrir la puerta y entrar a la morgue del hospital vi que uno de los cubículos estaba ennegrecido, me acerqué.

Mi cuerpo tiritaba de frío y solo podía abrazarme a mi misma para entrar en calor, aunque no hacía mucho resultado.

Abrí el cubículo ennegrecido y un calor abrumarte me envolvió, había fuego.

~•~•~•~

Narra Scott.

—Podemos intentar algo más, pero no sé si les vaya a gustar— dijo Malia.

—Cuéntanos— le pedí

—Conozco a otra manada de hombres lobo, renunciaron a todo lo que los hace humanos; reglas, moral, electricidad.— dijo Malia

—Si, he oído de ellos, se hacen llamar los primitivos— dijo Isaac— Su símbolo es un... círculo con una luna creciente.

—Son fuertes— dijo Malia

—No solo son fuertes, matan a lo que se cruce en su camino— dijo Isaac

Isaac y yo nos miramos.

No sé qué tan desesperados estamos.

—¿Son peores que Deucalion y Peter?— pregunté

Isaac ladeó la cabeza, prácticamente afirmando.

—Al menos a Deucalion y Peter los conocemos— dije— Esto es... no lo sé. No sé nada de esta manada

—Qué importa si vencemos a Gerard—dijo Malia

—Importa si son asesinos— dije

—Entonces olvídenlo— dijo Malia

—Probablemente.—dije

—Debe haber alguien más que pueda ayudarnos— dijo Isaac

—No estamos tan desesperados—afirmé

—E ir con ellos sería muy desesperado, ¿Cierto?— habló Malia

No dije nada.

~•~•~•~

Isaac, Malia y yo fuimos a buscar la ayuda.

Solo vamos caminando en silencio mientras yo sostengo una linterna y voy alumbrando.

Encontramos el lugar, donde había como una casa vieja.

Pero de pronto sentí algo muy dentro de mi, algo intenso...

Miedo.

Sentí que no me podía sostener.

—¿Qué pasa en este lugar?— preguntó Malia, teniendo que afirmarse de una reja