Las Mil y Una Noches •Dybatini•

Capítulo 19

Julián salió desesperado buscando a Oriana, Tiziana y Paulo, pero ya era muy tarde, ellos se habían ido.

- ¡Te dije Antonella! Tu noviesito se iba a enamorar de Oriana y ella también. No sé porqué volví a confiar en ella, ni porqué me metí con vos, si sólo sos hermosa físicamente, por dentro estás podrida.

- A mi no me tratas así, pero no lo niego, tal vez estoy podrida por dentro, pero esa niña no hace que te vengas... ¿O si?.

- No me importa eso, ¿Acaso sólo piensas en coger? Ella me importa, si le pasa algo...

- ¡Si le pasa qué Julian! ¡La violaste! Es una mosquita muerta, pero no se merece a un hombre cómo tú, ella es muy persona para tanta mierda... En cambio, nosotros estamos arruinados por dentro.- dice con voz seductora tomándolo por los hombros.

- Tienes razón, pero ese estúpido también es mucha persona para vos, que decirte Antonella, se merecen.

- Piensa lo que quieras...- se besan, pero a los segundos Julián se separa.

- Más te vale que hagas algo para que Oriana se separe de Dybala, la quiero solo para mí.

- ¿Porqué tanta obsesión con esa? Me tienes a mí.

- A vos no te amo, a ella sí.

- Eso dolió, pero tampoco te amo, solo a Paulo, así que mañana iré a ver a Paulo.

- Me parece perfecto.- comenta mientras se va de la habitación.- Ah... y te advierto, si no tengo a Oriana conmigo en 2 semanas te mataré, sabés de lo que soy capaz.- finalmente se va.

Al otro día...

Suena la alarma, Paulo abre los ojos y la apaga antes de que Oriana despierte. Por suerte, ella no abrió sus ojos.

Paulo aún se sentía dolido, no sabía como afrontar a Oriana. Si, la ama, pero después de tal traición no se sentía tan a gusto con ella, el la sigue amando pero se siente, extraño.

Se quedó pensando en Antonella, ¿Porqué ella hacía todo esto para recuperarlo? ¿Aún lo amaba?.
Ella invadía sus pensamientos de forma brutal, tal vez... ¿Él también seguía amándola?.
No, eso es imposible. Él está con Oriana y la ama, Antonella sólo lo usó, no podría volver con ella, sus sentimientos hacia ella se habían ido hace mucho.
O sólo trata de convencerse de eso...

Después de tanto pensar en lo sucedido Paulo se levanta para ir a cambiarse así poder ir al entrenamiento.
No era un gran momento para ir a entrenar luego de las cosas que pasaron, pero la vida sigue, el tiempo no para y el debía aparentar cómo si su vida fuese completamente, perfecta.

Cuándo terminó de alistarse fue a su habitación a buscar el bolso. Cuándo va a despedirse de Oriana... Sólo la mira, sentía cierta, indiferencia al verla.
Tal vez sus sentimientos hacia ella se estaban yendo, o sólo se estaban ocultando en lo más profundo de su corazón al sentirse tan, traicionado.

Al llegar al estadio ve a una gran cantidad de reporteros en la puerta de entrada. Se baja del auto y se dirige al montón de personas, comienza a empujar entre ellos para pasar, cuándo por fin logra entrar ve a Antonella sonriente respondiendo a las preguntas de los periodistas.

- ¡Mí amor!.- exclama y lo besa en la boca. Paulo queda shockeado por la situación, esto iba a salir en los programas de chismerios y Oriana lo vería, pero en un momento le dio igual, hasta que reaccionó y se separó de ella.

- Hola... Vamos adentro.- la agarra de la muñeca y la arrastra hacia las oficinas.

La llevó a la oficina de Oriana, puesto que ella no llegaría todavía, ya que entraba más tarde.