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" Sentimientos con aroma a sol y café. "

NARRA YOONGI.

Yo no pedí ser así, pero simplemente ocurrió, aveces me siento molesto y en otras ocasiones una gran alegría y emoción me invaden por completo, ¿es normal?, no lo sé, según la sociedad no lo es, pero qué importa, espero nadie se de cuenta, sobretodo tú ya que tengo miedo de que nuestra amistad llegue a su final si te digo lo que siento, pero ya no lo aguanto más, no es fácil ocultar esté fuerte sentimiento que con el tiempo fue creciendo cada vez más y más.

Odio que hagas que mi corazón de brincos cada vez que sonríes, hablas, bailas, cantas, o con el siempre hecho de que estés allí, ya que irradias tanta luz que puedo jurar que le ganas al mismísimo sol; Odio que hagas que tenga pensamientos "cursis" por así llamarlos, si supieras cuanto anhelo sujetar tu mano, que nuestras miradas se encuentren y quedarnos así en silencio para sellar el momento con un dulce beso en los labios, pero no, no es posible, soy serio pero tu confundes eso con enojo y frialdad, si supieras que dentro mío es cálido, calidez que quiero compartir contigo.

Te odio ¿sabes?, pero me odio más a mi mismo por intentar engañarme de que lo que siento por ti no es más que afecto.

Nos volvimos amigos desde el primer día de clases pero si algún día alguien me hiciera la pregunta sobre en qué momento comencé a verte de otra manera, siendo totalmente honesto, no sabría que contestar, cuando menos me di cuenta ya quería estar junto a ti, pasar mi tiempo contigo, comentar cosas triviales para solo escuchar tu voz, hablando de tu voz es la más hermosa que he escuchado, me transmites tanta paz, inclusive aquellos extraños pero cómicos sonidos que realizabas me parecían tiernos y me robaban millones de sonrisas sinceras, cuando cantas siento como si de alguna manera me estuvieras abrazando por la espalda, un abrazo suave, como si tuvieras miedo de que me rompiera, obviamente nunca te diría sobre aquella imagen mental que suelo tener, moriría de vergüenza.

Al despertar mi primer pensamiento es "¿Habrá dormido bien? espero que si", odio haberme vuelto así, me desconozco.

Siempre llevas en tu rostro una sonrisa en forma de corazón, la sonrisa más espectacular del mundo, iluminas cada rincón son tu presencia, energía y felicidad, pero recuerdo que existió una excepción en donde tu luz se apago, donde mi sol se lleno de nubes grises; Aquel día de verano saliste corriendo hacia la parte trasera de la escuela con lágrimas en los ojos, no querías que nadie te viera, pero lo que tú no sabias es que yo estaba recargado en la pared continua, en nuestro tiempo de ser amigos nunca te mostraste de esa manera por lo que estaba bastante preocupado, sorprendido y no sabía que hacer, soltabas quejidos y golpeabas la pared, realmente no fue un gran día para ti, por lo que pude entender entre tus balbuceos es que no habías sido seleccionado en el club de danza en la que tanto deseabas entrar.

Seguiste llorando por mucho tiempo hasta que al final el hipo te ataco y quedaste sentado viendo un punto fijo en el suelo, mientras que yo con los puños cerrados y el entrecejo arrugado le rogaba a alguna fuerza superior que el profesor se diera cuenta del gran talento que tienes y te aceptara en su clase, no quería que el chico que bailaba incluso en los pasillos y baños del instituto se rindiera por alcanzar su sueño, y además pedí también que me diera coraje para poder acercarme a ti y demostrarte que yo estaría siempre a tu lado, que podías llorar en mi hombro y te abrazaría con todas mis fuerzas para transmitirte un poco de tranquilidad y seguridad, inclusive a la hora de la salida tus ojos estaban hinchados por el llanto, te pregunté si algo malo había sucedido pero respondiste que no debía preocuparme, mentiroso.

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⏰ Última actualización: Jan 17, 2019 ⏰

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𝑆𝑒𝑛𝑡𝑖𝑚𝑖𝑒𝑛𝑡𝑜𝑠 𝑐𝑜𝑛 𝑎𝑟𝑜𝑚𝑎 𝑎 𝑠𝑜𝑙 𝑦 𝑐𝑎𝑓𝑒́Donde viven las historias. Descúbrelo ahora