Capítulo 13

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Estaba abrazando a mi princesa, la tenía sobre mis piernas mientras ella lloraba sin cesar, recién nos habían informado que la señora Carmen estaba grave y por ahora se quedaría en terapia intensiva, no podía creer que recibiera un disparo ¿Quién demonios ataca a una señora mayor?

– Gin, hija ve a descansar – su tía Sara se acercó a nosotros – has estado aquí toda la noche y el día

– No quiero – mi princesa levanto su cara – no me iré a ningún lado

– Princesa...

– No amor – me interrumpió – quiero estar aquí cuando mi abue despierte

– Eres la única que no ha ido a casa, debes descansar – su tío Bernardo se acercó a nosotros – o al menos ve a comer algo

– ¿Cómo que no has comido? – Su mirada cayo en mí – eso no puede ser, princesa – acaricie su mejilla – iremos a tu casa comerás, tomaras una ducha y descansaras

– Pero...

– No se discute y mucho menos me convencerás de no llevarte a casa

– Vamos pequeña hazle caso a Sean – Rogelio se unió a nosotros – si algo pasa te aviso de inmediato

Aun con sus réplicas la saque del hospital, en todo el camino hacia la casa donde ella y su hermano vivían se dedicó a mirar por la ventana, acaricie su pierna para llamar su atención algo que logre, sin esperar más se acercó hasta mí abrazándome algo que correspondí de inmediato

En cuanto llegamos a su casa encontramos a mi madre y mis hermanas quienes estaban en la cocina, de inmediato la abrazaron haciéndola llorar de nuevo, la llevamos hasta la mesa donde esperamos unos minutos a solas, de nuevo la senté en mis piernas

– Carmen estará bien, ella es fuerte tanto como tú

– Espero no te moleste que entráramos a la cocina

– No, es todo lo contrario – mi madre dejo la comida frente a nosotros – gracias Julya, por la comida y por estar aquí

– Como no hacerlo – tomo su mano acariciándola – eres parte de la familia o más bien tú eres quien hizo de nosotros una familia, no podíamos quedarnos haya sabiendo que estabas pasando este momento difícil

– Quizás suene imprudente pero ¿Qué sucedió?

– Sally, por favor...

– Amor está bien – mi princesa beso mi mejilla antes de hablar – ni siquiera yo sabía lo que paso, todo fue tan rápido que apenas soy capaz de asimilar lo que sucedió, en un momento estábamos comiendo y al otro mi abue se encontraba en el suelo llena de sangre

– Princesa no llores – la abrace hacia mí, joder odiaba verla así de mal – me duele verte así

– ¿Fue un asalto? – Mi madre pregunto – porque si es así deben denunciar

– Creo que más bien fue un atentado

– ¿Qué? ¿Cómo que un atentado?

– Ese hombre entro al restaurante y apunto a nuestra dirección, mi abuela se estaba levantando para ir al abaño así que recibió la bala...

– Espera, princesa – tome su rostro para que me mirara – ¿Esa bala iba hacia ti?

– Eso creo, la mirada de ese hombre estaba fija en mí todo el tiempo nunca miro a mi abuela o alguien más en el restauran

Mis alarmas se encendieron en cuanto dijo eso, me tense al pensar que estaba en peligro o peor que pudo morir, aferre más mis brazos a ella acción que me correspondió de inmediato, deje repetidos besos en su cuello, miles de ideas cruzaron mi mente

– Tendrás guardaespaldas desde ahora

– Amor...

– Amor nada, es una decisión tomada y punto final, no me arriesgare a que algo te suceda a ti o a tu familia

– Pero Sean...

– Es lo mejor hija, no queremos que nada les pase – mi madre acaricio el cabello de Ginger – además sabes que mi hijo lo hará aunque lo contradigas

– Ahora come que después iras directo a dormir

– Diablos hasta eso extrañe, al Sean mandón

Tomo mis mejillas y deposito un beso en mis labios; la mire comer mientras acariciaba sus piernas y sostenía una conversación con mis hermanas y mi madre, al terminar la comida fuimos a su habitación donde encontré varias fotos de ella con su familia

En todas se veía sonriente pero en realidad quien estaba siempre a su lado era Tania su pequeña sobrina, sabía muy bien que amaba a esa pequeña tanto como yo amaba y adoraba a Fred, tome un cuadro y lo admire perfectamente, su sonrisa mientras abrazaba a esa pequeña era la mejor que le había visto

– Tania es muy inteligente a pesar de estar tan pequeña

– Creo que Fred y ella se llevaran bien

– Ya lo creo – sus brazos me rodearon del cuello mientras volvía a sentarse sobre mis piernas – dime que dormirás conmigo

– Siempre lo haré mi princesa

Mirarla dormir abrazada a mí me llenaba de una alegría infinita, lo que me preocupaba era el atentado que sufrió; tome mi teléfono que reposaba en el mueble de la lámpara, marque el número de Daniel que era el único que podría ayudarme, espere unos segundos antes de que contestara

– Sean ¿Cómo están las cosas por haya?

– Pues la señora Carmen está en estado delicado pero hay algo que me preocupa más

– ¿Qué es?

– Ginger dijo que el sujeto que disparo dentro del restaurante la veía a ella fijamente – bese la cabeza de mi princesa – crees que puedas pasarme el número de Jerry tu amigo el policía

– Ya no tengo su teléfono pero si su correo, déjame comunicarme con él y te mantengo al pendiente

Detallamos algunas cosas más, le conté lo que mi princesa me había dicho sobre el incidente con todos los detalles posibles, acordamos que me llamaría cuando tuviera respuesta; abrace a Ginger llenándome de su aroma, no descansaría hasta que supiera quien quiso hacerle daño

– Te mantendré a salvo mi princesa 

SEAN: Rosseu #2 [COMPLETO ✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora