SEAN: Rosseu #2 [COMPLETO ✔]

Capítulo 26.

Estaba sonriente ante la mirada de mi princesa, me encontraba a su lado comiendo el bufete que elegimos para este día especial, paso la mirada por el jardín topándome con las personas que más cercanas son a mi vida; veo detenidamente hacia Yhojan quien ve intensamente a la acompañante de Osman quien le da de comer al pequeño que los acompaña

– Creo que a Yhojan le intereso la hermana del oficial Larzon

– ¿Esa chica es su hermana? – Asintió – creí que era su esposa y su hijo

– El niño no sé de quién sea pero ella es hermana de Larzon 

De nuevo mire a Yhojan el cual parecía enfadado de que ella estuviera riendo junto a Osman, Jerry y la esposa de este; quizás esa sea la chica de la que me conto pues no encuentro otra explicación para que la mire de esa manera; tras terminar la comida me levanto junto a mi princesa

Ambos caminamos por las mesas saludando y agradeciendo la presencia de las personas; el momento del primer baile llego, guié a mi princesa hasta la pista de baile donde los primeros acordes de Perfect comenzaron a escucharse, ame esa canción cuando la escuche

Bueno, encontré una mujer, 
más fuerte que nadie a quien conozca.
Ella comparte mis sueños,
espero algún día compartir su hogar.
Encontré un amor
para llevar más que solo mis secretos,
para llevar amor, para llevar a nuestros hijos.
Aún somos unos críos, pero estamos tan enamorados,
luchando contra todo pronóstico,
sé que esta vez estaremos bien.
Cariño, solo toma mi mano,
sé mi chica, yo seré tu hombre.
Veo mi futuro en tus ojos.

Cante esa larga estrofa en su oído, la letra de la canción describía a la perfección lo que sentíamos y lo que nos disipaba en el futuro, quería todo con ella, Ginger es lo que necesitaba, quería y deseaba desde que era un adolescente; la abrace pegándola a mi pecho

– Es una hermosa canción – susurro mi esposa – elegiste bien

– Desde que te escuche cantarla el día que te pedí matrimonio decidí que sería la canción que bailaríamos en nuestra boda

– Te amo mi príncipe

– Yo la amó más mi princesa, mi esposa, mi señora Rosseu

– Se escucha tan perfecto que me digas así

– Siempre debió ser así, tú eras y eres la única que debe llevar ese apellido, estar a mi lado y compartir toda nuestra vida hasta hacernos viejitos

La canción termino por lo que los aplausos resonaron en el jardín, una nueva melodía sonó mis padres se acercaron para bailar con mi princesa y conmigo, con una sonrisa Ginger tomo la mano de mi padre, tome la cintura y la mano de mi mamá

– Me alegra ver esa sonrisa

– Estoy tan feliz, nunca me había sentido así

– Esta es la felicidad que mereces – giro a ver a mi princesa la cual sonreía ante las palabras que le decía mi padre – que merecen, ambos lucharon por estar juntos y lo lograron – me miro nuevamente – lamento todo lo que hice...

– Olvídalo, eso es pasado – bese su frente – ahora solo pensemos en el presente y en el futuro, hablando de ello he visto que papá y tu han andado muy juntos

– Tu padre prometió enamorarme de nuevo y va por buen camino

– Sería maravilloso verlos juntos, papá ha cambiado mucho en estos meses

– Aun debe esforzarse no soy una mujer tan fácil

Reí por su respuesta, la canción término por lo que bese la frente de mi madre para posteriormente volver a tomar la mano de mi princesa para bailar nuevamente con ella, adoraba tenerla entre mis brazos; después de dos horas Jerry y su esposa se acercaron despidiéndose

Osman fue otro que se acercó a nosotros pero sin la compañía de su hermana; algo andaba mal pero no quería alterar a mi princesa, ellos me pidieron hablar un momento conmigo por lo que le dije a Ginger que los acompañaría a la puerta y que regresaría en seguida

– ¿Sucede algo grave?

– Hay una situación de rehenes en el edificio del Empire State y por la descripción que nos dieron parece ser Westh

– ¿John Westh?, ¿Él imbécil que atormenta a mi mujer?

– Así es tenemos que irnos antes de que se salga de control, lo mantendremos informados

Jerry tomo la mano de su joven esposa y ambos salieron a prisa; Osman se quedó mirándolos unos segundos, el silencio nos inundó hasta que vimos alejarse el auto de los Olmedo

– Quisiera pedirte que no dejes ir a mi hermana – Osman me miro algo alarmado – hasta que venga personalmente por ella, no quiero que salga sola

– Claro, despreocúpate ella estará a salvo aquí

Observe como se fue rápidamente en su auto me adentre a la casa encontrándome a mitad de camino a mi princesa la cual traía una sonrisa enorme, me acerque a abrazarla necesitaba hacerlo para tranquilizarme y poder continuar en la fiesta

– Tardaste mucho

– Solo me estaban felicitando y Larzon me pidió que no dejáramos ir a su hermana hasta que volviera

– ¿Por qué se fueron? – Tome su rostro para besarla intentando cambiar de tema – no desvíes mi pregunta

– Tenían un llamado por un caso de rehenes – se cubrió la boca asombrada – dijeron que solo irían de apoyo

– Espero todo salga bien

– Veras que así será – le deje un nuevo beso – pero ahora señora Rosseu vayamos de vuelta al nuestra fiesta