El nacimiento de una Heder y pelotas de béisbol

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Advertencia importante: RIESGO DE SPOILER.

Para los que no lo sepáis, la serie Wakfu tiene una tercera temporada y 3 ovas. Lo digo porque yo me entere de la tercera temporada hace poco y por casualidad, y porque voy hacer referencia a ella y no quiero haceros spoiler. Si no la as visto aun; NO leas este capitulo hasta acabarla. Porque si no os destripare todo el final de la temporada.

Habían pasado un par de semanas y a Keith le dieron el alta. Caliope apenas salia de la nave pero JD decía que comenzaba a ser ella misma de nuevo y que con el tiempo volvería a la normalidad. Mientras tanto Pidge recibía su entrenamiento en la nave con una Caliope bastante fría y seria aunque podía verla sonreír de lado cada vez que hacia florecer un tipo de flor diferente y mas complicado que el día anterior.

Pidge apagó el despertador de un golpe y se cubrió la cara con las sabanas. No tenia ni pizca de ganas de ir al cuartel hoy, no tenia ni pizca de ganas de volver a clase. En algún momento alguien noto que ninguno de los paladines había terminado su educación, dentro o fuera del Garrison. Por lo que ahora debía ir a clase como cualquier alumno de la academia por la mañana y entrenar con Cali en las tardes. Lo peor era que al ser mas pequeña estaría sola en clase mientras Hunk, Lance y Keith, por repetidor, irían a la misma clase.

La luz le golpeó en la cara cuando Matt le sacó las mantas- sabia que apagarías el despertador y seguirías durmiendo-

Pidge bufó frustrada- déjame, no quiero ir-

-venga hermanita, no sera tan malo. La mayoría de las personas alli serán la mitad de listas que tu y eso ya es ser empollón, no sera como en el instituto.-

Pidge volvió a gruñir mientras se levantaba, su hermano la dejo para que se preparara. Estuvo todo el rato con el ceño fruncido mientras Matt le bromeaba para animarla un poco, pero solo sonrió cuando oyó el motor del, que le pareció, el coche de Keith indicando que estaba listo para recogerla. Salió corriendo y se sorprendió al ver una motocicleta.

-y el coche?- pregunto confundida

-emm, estrellado?- Keith rió- si tardare en terne uno nuevo, mientras tanto mi vieja motocicleta nos hará el mismo servicio.

Pidge se puso el casco emocionada cuando su padre salió corriendo por la puerta como si tuviera un petardo en los pantalones- no, no, no, no y no; mi niña no se subirá a esa cosa del infierno-

-osea que puedo pilotar un león robot gigante en una guerra espacial, pero no montar en la motocicleta de mi novio quien por cierto conduce mucho mejor que Matt-

-oye!! te e oído!!- Matt se quejo desde el interior de la casa con la puerta abierta y Samuel Holt intercambio miradas entre su hija y la motocicleta sin ningún argumento a su favor

-p-pe-pero...- no pudo decir nada mas ya que Pidge se montó y Keith arrancó poniéndose de camino al cuartel.

Pidge se abrazó con fuerza al pecho de Keith y apoyo su cabeza en la espalda de el. Pudo sentir como el ritmo cardíaco de Keith se aceleraba y tragaba grueso por la cercanía, pero el no dijo nada por lo que Pidge rió y se acurruco mas deseando no tener que llegar nunca al cuartel.

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Durante la mañana todo había ido bien, un poco aburrida dado que Pidge ya se sabia casi todo el temario, pero tranquila al fin y al cabo. Matt tenia razón y los alumnos no eran crueles unos con otros, de hecho podría decirse que ella era incluso popular. En la ultima hora ya sumamente aburrida se puso a garabatear corazones en su cuaderno y a escribir cosas como "Katie Kogane" o "señora de Keith Kogane".

kidge y allulansDonde viven las historias. Descúbrelo ahora