ALWAYS|| Fred Weasley

~CAPITULO 10~

Narra Fred

Odio a este repugnante Cedric Diggory. Se cree que tiene derecho a estar con Rachel. JA la lleva clara. A ver derecho tiene... Pero me sabe mal. Quiero tenerla solo para mi. La chica que había traído yo, Stephanie, una simpática hufflepuff estaba bien, pero no es igual a Rachel.

George notó que estaba raro. Me despedí de todos y me fui a la habitación.

Narra Rachel

Viendo que Fred se fue sin siquiera despedirse me enfadé, es obvio que lo hice. DE QUE COJONES VA? Un día soy su mejor amiga y al otro no existo. Nos acercamos a George. Estaba con Freya.

Ced y George fueron al baño dejándome sola con ella. SON IMBÉCILES
- Bueno... Y... Que tal con George?- dije para romper ese incómodo silencio.
- Bien... Bien... Y tu y Ced?
- Bien... Bien...
- Mira sé que te caigo mal por el hecho de ser Malfoy y no confías en mi pero las apariencias engañan. Te juro que no soy como mi padre. Te lo juro. Al igual que tú no eres como tu padrino. Que por qué estoy en slytherin? Tengo madera de líder. Soy ambiciosa y orgullosa pero sobre todo buena persona. Y yo misma pedí al sombrero estar en esa casa ya que si estaba en otra mi padre me mataba. Pero te juro que jamás haría daño a George porque le amo.
- Yo... Siento haberte juzgado mal todo este tiempo.
- No importa. Amigas?
- Sería un placer.

Es muy maja. Me cayó muy bien. Para qué mentir

Los chicos volvieron. Me fui con Ced a dar un paseo.
- Recuerdas cuando...?
- Lo recuerdo todo, Ced, jamás olvido algo... Recuerdas? No soy como tú - dije interrumpiendo. A lo que reímos.
- Ahg, das asco.
- Pues bien que le pides ir al baile a esta asquerosa.
- Y lo seguiría haciendo.

Veía el brillo en los ojos de Cedric, que no dudó en besarme. Estaba mal esto, pero no dudé en corresponderle. Besa demasiado bien.

Estábamos a orillas del lago negro mirando el agua y disfrutando la compañía del otro.
- Siento haberte besado antes... La emoción del momento...
- No te preocupes, ha estado bien... - digo riendo.
- Mooney voy enserio... No te quiero perder por nada del mundo. Eres mi amiga.
- Yo tampoco te quiero perder, Ced, a propósito, que me has llamado?
- Emm... Nada... Lo siento. Se que solo te llaman así Fred y George.
- No pasa nada... Me gusta que me lo digas tu también. - él y yo reímos.

Al final de la noche, Ced me acompañó a mi sala común en la que Lavender me esperaba con entusiasmo.
- Cuéntame todo.
Cuando se lo conté. Oí un ronquido. Era Angelina dormida.
- Cuanto lleva ahí?-pregunté
- No lo sé. Cuando llegue ya estaba ahí.
- Pero llegaste hace una hora.
- Pues entonces imaginate ella.
Las dos reímos para luego quedarnos dormidas. Podría decir que Lavender Brown, la "pesada" no era tan pesada como creía. Al contrario, me caía muy bien, al igual que la novia de George.