Capítulo número DOS
Me esperasPasamos casi medio día caminando, aunque él en ningún momento se volteó a verme sabia que perfectamente que él sabe que le sigo, mis pies duelen y mi kimono se ensucia más con el lodo perteneciente de la lluvia. Bajo la cabeza recordando como mientras le seguía encontré el cuerpo de mi madre de la peor forma posible, mi hermano tan inocente apuñalado y aún no encuentre nada de mi padre aunque ya estemos muy lejos de la aldea.
- oye... em entremos a esa cueva - mi mirada cruzo con la suya, se veía algo tímido. Con la mirada más sería y apagada asenti comenzando a seguirle a la entrada de la cueva.
Entramos. Mi héroe dejó caer la espada al suelo clabandose en la tierra, se arrodilló en el suelo y juntando algunas hojas y ramitas de su alrededor empezó a preparar y encender fuego, me mantengo muy serca de la entrada donde algunas gotas de lluvia tocaban mi vestimenta.
-em... no recuerdo tu nombre-dijo con una gran sonrisa y algo sonrojado.-siéntate, acercarte al fuego o te enfriaras-lentamente me aproxime al fuego, me senté y acerque mis temblorosas manos a la llama naranja.
No quería hablarle, pero tampoco ignorarlo. No puedo creer lo que ocurrió, mi vida era magnífica sin problemas y ahora de un momento a otro fue destruida toda una aldea llena de sueños, de mi ojo derecho descendió una silenciosa y solitaria lágrima.
-siento lo que te ocurrió... son cosas que pasan, y aunque te marquen es mejor alegrarse de vivir.-me aconseja, parece que él sabe de lo que habla. Como si en algún momento él sufrió algo similar a lo mío.
-fue horrible...-susurro mientras me deslizó lentamente acurrucandome en el suelo cerca de la llama.
Cerré los ojos de los cuales comenzaron a salir lágrimas, me cubrí con el brazo. Ya es demasiado tarde y recorrí un gran camino, el agotamiento estaba dando su aparición dejándome semi dormida...
-descansa niña-le escucho susurrar. Al fin me duermo dejándole sólo.
Los cantos de las aves me despertaron, abro los ojos sintiendo la luz que entra a la cueva, me incorporó mirando a mi alrededor encontrándome sola. Bajo la cabeza desilusionada, me abandonó; ese hombre me salvo y abandonó en una sucia y fría cueva, ¿acaso no tiene corazón?.
-¡niña! Te traje ropa nueva, la que tienes esta desastrosa-volteo encontrándolo, trae un kimono azul y blanco en su mano y sus palabras eran tan ciertas.
Me levanto y me acerco a él, me entrega el kimono que me quedo mirando. Esta feo y algo grande pero al menos no me dejó.
-por esa dirección a unos 4 árboles ahí un pequeño río, puedes asiarte allá.-me mencionó, empecé a caminar en dirección al río. Llegue a el y rápidamente me empecé a despojar de mis prendas arruinadas mirando que nadie esté cerca, entró al agua y me limpio rápidamente todo el cuerpo, salgo y me pongo mi nuevo y sencillo kimono el cual si me entraba algo grande, lo acomode bien para poder amarrarlo; me pongo mis sandalias y corro en busca de mi salvador.
-¡¡esperame!!-le grite al verle más lejos de la cueva, él voltea serio como si fuera de piedra para volver a darme la espalda.
-entonces... ¿nunca te irás?-pregunto mi señor, sin embargo sólo con una gran timidez negué.
Me acerque más a él sin embargo el sólo me da la espalda, se voltea nuevamente dejándome ver sus ojos azules tan misteriosos que con su piel morena se veía más hermoso.
-camino por un sendero peligroso, uno donde tú vida correrá peligro y no siempre podré ayudarte, no me importa si vienes conmigo o no.... yo sólo seguiré mi camino.-baje la cabeza, la levantó con devoción y una leve sonrisa.
-no me importa, si usted salvó mi vida no puedo dejarle ya asta salvar esa cuenta... no me importa dónde valla sólo puedo seguirle y serle útil en lo que pueda, sólo ¡déjeme seguirle en su solitario viaje! Ya no tengo nada que perder-mis ojos se cristalizaron al recordar a mi amada familia, mientras el se mantenía sereno para luego suavizar su mirada y asentir.
-vámonos-empezó a caminar. Rápidamente comencé a seguirle con gran emoción, ¿que puedo perder en este viaje? Nada además de mi propia vida.
Le seguire y ayudare en todo lo que pueda, tal vez con él pueda vivir una aventura, conozca personas y sea lo que una vez soñé ser.
Libre...
Después de todo se que el Me espera...
Contunuara...
/
/Editada//
Bueno mis lectores... publicaré esta historia una vez a la semana, o dos, quien sabe. Bueno será publicada todos los lunes espero que les guste.
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Un Camino Arriesgado.(BanKag)
FanfictionBankotsu Hashirino-San él es un hombre un tanto extraño, cuando me rescató de una muerte segura me nombre su pupila. lo siguí asta el resto de su vida detrás de el cómo perrito abandonado pues le debía la vida y más que eso el señor Bankotsu pudo ha...