Una mesa de seis fue ocuapada por la familia completa, claro, sobrando un lugar. La zona destinada para el restaurante se encontraba en el segundo piso del hotel, extendiendose a lo largo y lo ancho, permitiendo a los huéspedes escoger mesas interiores o exteriores, para degustar con tranquilidad o con la vista la ciudad o la vista al mar.
Un buffet de diferentes platillos se extendía justo al medio, exponiendo las delicias tanto locales como nacionales: desde sopas de diferentes mariscos hasta guisados extravagantes de las regiones del país; decidir entre si saborear una sopa de camarones o aventurarte a probar un pozole; si comer unos chilaquiles con todo o mejor unos taquitos de canasta. Había de todo en ese buffet. Y eso les complicaba la decisión a aquellos americanos que no sabían exactamente qué escoger. Exceptuando a Rosita y Hugo que se dieron la tarea de investigar un poco antes.
-Tío Donald... creo que debes de tener cuidado con esa salsa. Leí que no debes fiarte del color rojo.
-Bah. Tonterías. Hace tiempo que aprendí a comer picante.
Exclamó con orgullo y sin dudar ni un segundo a esparcir la aclamada salsa roja "de la que no pica" en su platillo.
Sin duda los niños fueron quienes menos sufrieron al escoger que comer, pues había una sección especial para ellos en donde se desplegaban pizzas, rollos de sushi, quesadillas, comida frita, hamburguesas, postres y demas platillos que a cualquier niño le gustaría.
Ya todos en la mesa con sus respectivos platillos: Daisy en su mayoría de frutas tropicales de época y ensalada, Donald tenía diferentes platos con un revoltijo de diferentes cosas que de tan solo verlo causaba una severa indigestión, y los niños tenían una variedad entre pizza de pastor, hamburguesas, quesadillas, tamales dulces, tacos de carnita, y demás.
-¡Hey! ¡Miren esto! -Exclamo con euforia Hugo.
-¡Eeeeew! ¿Qué es eso? -Se quejó Luis.
-¿Te lo vas a comer? -Mencionó dudoso Paco.
-¡Son jumiles! -Concluyó Rosita. -Si no recuerdo mal, son pequeños insectos muy comunes en algunas zonas de este estado.
-¡Cinco dólares a que no se comen uno! -Hizo el reto Hugo. En seguida Rosita no dudo y se engullo unos cuantos. Los otros solo la observaron con cierto asco. Cada uno le dio cinco dolares.
Mientras los niños hacían sus apuestas de ver quien se atrevia a comer las cosas exóticas que se encontraban, un gran quejido seguido de un grito sordo los distrajo, era Donald que ardía en sudor y dolor.
-Te dije que no le pusieras de esa salsa.
-¿Habanero?
-Lo más seguro.
En un par de segundos Donald ya se encontraba dando vueltas por todo el restaurante buscando algo de beber que le calmara ese ardor en la boca, los niños solo observaban con cierta pena y diversión, y Daisy... Daisy solo tenía ua expresión combinada entre preocupación, molestia y un enorme "te lo dije".
Jadeante regresó a su mesa, observó todo lo que había escogido para comer y se arrepintió de inmediato.
-Iré a caminar y tomar aire fresco.
-¿Quieres que te consiga algo más fresco para comer? -Sugirió Daisy. El contrario solo asintió así como se alejaba un tanto tambaleante del lugar. En seguida la mujer llamó a un mesero pidiendo que retirara todo platillo que fuese picante, los cuales fueron casi todos, y trajera algo más suave.
"Muy buenas tardes damas y caballeros..."
Interrumpió un presentador a media velada.
"El Hotel Krystal Beach les da su más cordial bienvenida a todos los huéspedes que esta noche nos acompaña. Esperamos que su estadía sea de lo más agradable y disfrute de todos los servicios que nuestro hotel ofrece. Antes de comenzar el entretenimiento de esta tarde, un breve aviso: dueño de un auto versa con placas YWX3478, dejó las luces encendidas..."
Al fondo se escuchó como alguien se levantaba de su lugar para ir corriendo al estacionamiento.
"Bien, sin más que decir, deseamos que pasen una bonita tarde y una excelente noche y... que empiece el show."
Todos los presentes aplaudieron en agradecimiento por la bienvenida y la presentació , viéndose interrumpidos por el sonido de las trompetas anunciando el Son de la Negra.
-.-.-.-.-.-
Ya ya... juro que ya merito sale a quien llevan esperando.
~Jess con sombrero 🎩
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¡Que viva la reunión!
FanfictionEs tiempo de vacaciones de verano y Donald y su familia se ha ido a tomar un crucero por Latinoamérica. En el transcurso, Donald se encontrará con unos viejos amigos mientras sus tres sobrinos aprenden más del pasado de su tío que al parecer, nunca...