Capítulo 15

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Había quedado con Jade aquella misma tarde, y haría que Zayn la acompañara, haría que se solucionasen las cosas, y luego... ya se vería que iba a pasar.

Descolgó de nuevo el teléfono y marcó a Zayn.

-Hola, cariño –contestó la sensual voz de Zayn.
-Hola... -fue un tenue susurro que lo asustó. Aquello no le gustaba para nada. Presentía algo malo.
-Zayn... eh...
-¿Qué pasa Perrie? -soltó de golpe Zayn

¿Por qué tenía ganas de llorar? Aquello era inaudito. Respiró y habló.

-¿Puedes pasar a recogerme a las seis, me gustaría que fuéramos a un lugar? -dijo finalmente Perrie.

Silencio.

-Está bien. A las seis abajo. -apenas respondió Zayn.
-Gracias. Adiós.
-Adiós. -colgó.

El resto del día fue tenso para los dos. Perrie recogió y limpio su casa, luchando contra todo aquel sentimiento que la inundaba, quería perderse, que el mundo la tragara, quería llorar y deprimirse sola. Y no entendía el por qué. Amor.
Maldito fuera.
A las cinco aproximadamente se metió en el baño y comenzó a arreglarse tomándose primero una ducha y luego todo el tiempo del mundo para poder cambiarse.

Zayn condujo despacio al salir de la oficina... un nudo se alojaba en su estómago. Algo le pasaba a Perrie, y por lo que presentía no era nada bueno. Eso lo asustaba. No quería perderla.

Quizás se hubiera pasado haciéndole la proposición la noche anterior. No, no se había pasado. Él jamás le había pedido eso a nadie, y se lo había pensado mucho. Ella era especial, y la quería como algo más que una amante.
Esta situación le resultaba extraña, parecía el mundo al revés, normalmente las cosas eran al contrario, él huía, mientras ellas querían un novio. Qué curioso.

Llegó y aparcó a las seis menos cinco. Perrie ya estaba allí, en silencio se acercó al coche y se montó.
Ni un beso. Ni una mirada. Nada. Malo. Muy malo.

-¿Dónde vamos? –preguntó él.
-A... -ella le indicó el lugar donde había quedado con su amiga, el corazón le latía con demasiada fuerza. ¿Por qué tanto miedo? ¿Por qué tener temor?

En poco tiempo llegaron, eran las seis y poco, y había quedado con Jade a las seis y media. Bajaron del coche sin ceremonias, y ella caminó por delante.
Él la sujetó por el brazo y la giró.

-¿Qué pasa, Perrie?
-Nada –susurró ella.
-No me puedes engañar, he aprendido a conocerte.

Sus ojos vacilaron, y le escocieron, bajó la mirada.

-Zayn, yo...
-Ya se. Ya sé. Espera, me lo veo venir. Me traes a un lugar bonito. Me vas a decir que no confías en mí, que no quieres nada serio conmigo. Que se acabó. Que fue un gusto conocerme. Que merezco a alguien más. Bla... bla... bla...
-No, Zayn yo...
- ¡Perrie! –la voz de Jade los interrumpió, ella se giró, miró a Jade, su mejor amiga, y luego miró a Zayn... su amor.
-¡Jade, prima! –Perrie abrió los ojos. Miró a su amiga, quien tragaba saliva- que de tiempo enana –dijo con una enorme sonrisa y corrió a abrazarla.
-Hola Zayn –contestó una voz apagada, correspondiente a su amiga.

¿Primos? ¿Cómo? Algo fallaba. Algo no está bien aquí.

- ¿Cómo que primos? –preguntó Perrie en un gemido.






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Mi idea era subir cap. más seguido pero hace una semana tuve un accidente y me rompí un dedo de la mano derecha (con la cual hago todo), ya estoy algo mejor así que aquí estoy de vuelta.

Espero lo hayan disfrutado.

Jugando con fuego (Zerrie) [Adap.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora