Yoongi estaba rojo a tales insinuaciones de la menor. Apenas podía tener una conversación con su grupo de amigos y ahora estaba ella mirándolo mientras hablaba sobre su sexualidad.
Y estaba bien hasta cierto punto para él, pero le ponía más rojo cuando ella hablaba de ello frente a SeokJin, como lo estaba haciendo ahora mismo.El mayor quizá no escuchaba porque tenía los audífonos puestos, pero aún así a Yoongi le parecía muy vergonzoso y hasta incómodo.
T/n sonrió con malicia y fue hasta la cama del mayor para brincar. El otro se alarmó y quitó sus audífonos.
—¿Qué haces? —Preguntó sin recibir respuesta. Ella reía sin parar, después el mayor la haló y cayó encima. —Eres una loca.
T/n le hizo cosquillas y después lo soltó para abrazarlo por la espalda. Yoongi la miró a los ojos, ella le guiñó.
—Jinie, ¿porque no le dices a Yoongi que las parejas normales tienen relaciones normales?
—¿Ustedes no la tienen? —La miró sobre su hombro. T/n besó su mejilla. —Ah, ya entendí. No me mentan en sus cosas depravadas. No, no.
Se apartó de la chica, ella se rió victoriosa cuando el chico salió de la habitación. T/n lo había planeado, y sabía como quedarse a solas con su novio. Ella corrió a cerrar la puerta con seguro y ser un escudo para que Yoongi no saliera también. Él suspiró.
—Ya hemos hablado sobre esto, no quiero discutir.
T/n lo empujó hasta su cama, ocasionando una risita al mayor. Vagó alrededor de la cama como una leona acechando su presa. Él cerró sus ojos finalmente sintiendo el cuerpo de ella presionar su pelvis. Yoongi es un chico que desea tanto tener a su amada chica dispuesta a gemir su nombre de placer. T/n es su tentación desde hace años, tenerla de esa manera tan desesperada lo tenía a él enjaulado. Se excitaba con el más mínimo roce, con un beso o con algunas palabras suaves.
T/n hacía un vaivén de caderas, que le hacía ver las estrellas por más ridículo que se escuchara. El chico fundido en deseo se abalanzó a su labios apenas tocandolos. Ella lo empujó y se paró para caminar hasta la puerta.
—Recuerda que tiene que ser especial, cariño —Hizo un puchero antes de salir de allí.
Yoongi tapó su rostro ruborizado con una almohada. Lo había dejado ahí sin más.
—Como amo a ésta chica.