Ámame

No me dejes

Poché:
Me llamaron cerca de las 10:30 pm del hospital, encontraron a una chica que había sufrido un accidente en un auto y que me llamaban porque yo era la primera en su lista de contactos, no me habían dicho su nombre ni cómo era, pero me pidieron que fuera inmediatamente.
Conduje más rápido de lo normal e iba rezando que no fuera mi Daniela.
Llegué al hospital y me acerque a la mesa de informes.
- Que tal, buenas noches, me llamaron hace una hora y me dijeron que una chica había sufrido un accidente y que yo era la primera en su lista de contactos - dije muy rápido que ni yo misma me entendí, pero por fortuna la chica que estaba ahí si me entendió.
- Claro, la identificamos como Daniela Calle, es youtuber y a usted la reconozco también, es su compañera y mejor amiga- agradecí en ese momento que nuestra fama estaba creciendo (nuestros fans aún no sabían que éramos novias).
Por otro lado mi corazón cayó al suelo, mi Calle estaba hospitalizada.
- Está estable, sin embargo se encuentra herida - me dijo
- ¿Puedo verla? - pregunté rogando que dijera que sí.
- Por supuesto, le hará bien verle - y me guió hasta donde estaba Calle.
Me abrió la puerta de la habitación y me dejó a solas con Calle las lágrimas brotaron de mis ojos pero me mantuve fuerte por ella, Calle estaba despierta.
- Hola amor - dije con voz entrecortada.
- Amor soy una torpe - me dijo.
- Gordi ya pasó - acaricié su cabeza.
Tenía rasguños en la cara, un ojo morado y un labio cortado, me dolía verle así.
- Estoy contigo, es lo que importa - me abrace de ella.
- Te amo Poché, no me dejes sola por favor - me pidió.
- Nunca amor.
Se quedó dormida, con todo esto había olvidado llamar a Mafe y a Germán.
Salí de la habitación para poder marcarles, Mafe me contestó preocupada y dijo que vendrían inmediatamente, me puse nerviosa, ni siquiera nuestros padres sabían de nuestra relación.
El hospital era privado, aquel en el cual siempre debían llevar a Calle en caso de emergencia según órdenes de sus padres, por tal motivo podíamos estar incluso 5 personas en la habitación o más.
No me separé de Calle ni un momento, de echo, estaba acostada junto ella tomando su mano y en ese momento   llegó Germán y Mafe quienes me lanzaron una mirada de confusion...
- Gracias por no dejarla Pochesita - dijo Mafe, abrazándome también.
De un momento a otro ya nos encontrábamos varios en el hospital, en la habitación estaba mi papá y Vale, Germán y Mafe, en la sala de espera estaba Sebas, Mario y Juan Pablo.
Estaba un poco brava con Mario, por su culpa Calle me había dejado en mi casa y condujo molesta, por eso se accidentó.
- Poché, ¿Podemos hablar? - me dijo Mafe y salimos de la habitación de Calle.
- Dime Mafe.
- ¿Hay algo entre tú y Calle? - preguntó con tono tranquilo.
- No puedo mentirte Mafe, Calle y yo somos novias desde hace 2 días...
Asintió con la cabeza y me abrazó
- Bienvenida a la familia - con sus abrazos me sentía en casa, me recordaba mucho a mi mami - lo noté desde hace varios días, tenía miedo ¿Sabes? Ahora sé que no hay nada de malo en que ustedes estén juntas.
Mi alma descanso en ese instante, teníamos la aceptación de Mafe, solo faltaba contarle a mi papá, a Vale y a Germán, eran los que más importaban en nuestra vida.
- Poché, Calle quiere verte - nos interrumpió Germán .
Entre a la habitación y Daniela ya estaba sentada en la cama mirando a todas las personas que estábamos ahí para ella.
- Mejor amiga, creí que te habías ido - me dijo disimulando .
Corrí a acostarme con ella nuevamente poniendo su cabeza sobre mi pecho. Me dolía no poder besarle en ese momento.
Durante el día de fueron yendo nuestros amigos para descansar o para que pudieran comer y así fué como de repente nos quedamos a solas mi frutita y yo.
Aún estaba acostada sobre mi y en cuanto tuve la oportunidad giré su cara hacia mí y la besé.
- Amor, tu mamá ya sabe - le dije tranquila.
- ¡Qué! - exclamó asustada.
- Si amor, pero dijo que lo acepta, me dió nuevamente la bienvenida a tu familia.
- Bien, un peso menos - dijo y me volvió a besar.
Después de unas horas ví el amanecer, ni siquiera supe como había pasado tan rápido el tiempo.
Calle tampoco durmió, me dejaron de guardia con ella y preferimos disfrutarnos.
- Amor estuvo aquí Juan Pablo, Mario y Sebas - le comenté - desean que te recuperes.
No me respondió, solo asintió con la cabeza.
Eran ya las 10:00 AM y el médico a cargo nos dijo que Calle estaba estable y que podía irse a su casa.
Llamé a Mafe para que le llevara ropa y en menos de hora y media íbamos camino a casa.
Cuando estábamos en el auto no solté en ningún momento la mano de Calle me gustaba hacerle sentir que estaba ahí para ella y por fin había terminado esa pesadilla.