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Ella, la escritora de historias sobre MB.
Él, el protagonista de cada capítulo.
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"Es momento de que escribas una nueva historia conmigo... pero no en tu celular, belleza."
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No es permitido hacer copias o adaptaci...
Una vez que llegamos al lugar, me agarraron los nervios y no quería bajarme del auto.
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"Vamos Sol, no seas así!" me dice Sofia.
"Mejor cancelo y le digo que me regresé por que me sentía mal."
"En serio le mentirías al amor de tu vida?"
"No le estaría mintiendo por que me duele el estómago."
"Sólo son nervios!"
"Exacto, y esos nervios harán que diga o haga tonterías frente a él."
Seguimos discutiendo hasta que alguien tocó mi ventana. Cuando me volteo a ver quien es, me sonrojo al instante. Mi amiga abre la ventana y él asoma su cabeza.
"Hola Mario, yo soy la mejor amiga de Sol, tal vez te preguntas como es que sé tu nombre, pues es que con una amiga como Sol-"
Rápidamente, cubro su boca con mi mano y la fulmino con la mirada.
"Gusto en conocerte..." Mario alarga la última palabra esperando a que diga su nombre.
"Sofia," respondo por ella, ya que yo no quería que ella hablara más.
Él nos sonríe a ambas.
Sofia quita mi mano de su boca y empieza a hablar de nuevo.
"Bueno, creo que ya es hora de que vayas, no?" me mira diciéndome, "Mario te está esperando."
Justo después de que dijo esto, Mario abrió la puerta del auto y me dio su mano. Antes de tomarla, fulmino a mi amiga con la mirada otra vez.
Una vez estando afuera, Sofia asoma su cabeza por la ventana y dice, "Pues yo aquí me despido, tengo que regresar el auto de Sol a su casa, adiós."
Cuando la escuché decir esto, comencé a maldecirla bajo mi aliento. Con tan sólo mover los labios le digo, maldita, no te atrevas. Sé que ella me entendió ya que se rió un poco y arrancó con mi auto.
Olvidándome que estaba con Mario, corrí como si fuera lo suficientemente rápida para alcanzarla. En eso, llegó él detrás de mí.
"Qué sucede?" me pregunta.
"Nada, es sólo que ahora no tengo como regresar a mi casa," le digo mirando hacia abajo, "y la verdad no creo que ella regrese por que hizo esto a propósito."
"Pues me alegra que lo haya hecho," me levanta la mirada, "por que ahora podré llevarte yo."
Mi corazón se aceleró en el minuto que me di cuenta que estábamos muy cerca.
