155. Los chantajes

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Mery siguió a Gas que salio a los jardines del hotel. Él no se dio cuenta de eso mientras hablaba por teléfono con una minita que había conocido en el chat. Mery no sólo escuchó aquella conversación si no que también la grabó. Antes, ni si quiera se hubiese metido en algo así pero ahora que se había vuelto tremendamente unida a sus hermanas no dejaría que ningún hombre pelotudo las cagara.

Esperó escondida hasta que Gaston volvió a entrar, entonces lo agarró del brazo y lo metió en un vestuario que había cerca de la pileta. Gas la miró muy sorprendido pero también enojado. No entendía nada del comportamiento que Maria estaba teniendo hacia él pero eso se iba a terminar temprano.

Gas: ¿que te pasa loca? ¿Me podes dejar en paz? - preguntó liberandose del agarre de Maria.

Mery: ¿que te pasa a vos Gaston? - preguntó ella sacada. - Lo escuché todo... ¿Estas engañando a Rochi?

Gas: Mery yo...

Mery: ¿vos que Gas?

Gas: no es lo que parece...

Mery: a mi me parece que si es lo que parece.

Gas: por favor no digas nada...

Mery: si te vuelvo a ver hablando con otra mina, te castro Gas. - Le dijo ella antes de abrir la puerta. - No diré nada, pero la cortas acá.

Gas: Gracias...

Mery: no me lo agradezcas, me voy antes de que me arrepienta de no mandarte al frente. - Se fue y lo dejó solo.

Cande y Lali volvieron del parque pero antes pasaron a recoger el auto de Benja junto a los chicos. Si bien se lo habían pasado en grande la otra noche, tenían una multa que pagar. Dejaron las llaves en la recepción y fueron a comer con Laia y con Bruno al restaurant donde luego se sumaron las demás chicas. Fue una comida bastante tranquila, donde Mery no dejaba de mirar a Rochi y Orí no paraba de darle golpes a Mery por debajo de la mesa para que al menos disimulara un poco mejor.

Lali: chicas... ¿Como dividimos la multa?

Euge: sácala del fondo común y nos descontamos a partes iguales el total.

Cande: ¿iras vos a pagarla?

Lali: si, mañana mismo voy antes de que se nos pase el plazo de los quince días.

Bruno: ¿que hicieron?

Laia: es mejor no preguntar eso Brunito.

Euge: no hicimos nada. - Le sacó la lengua a su futura sobrina. - Sólo nos quedamos dormidas en el auto.

Bruno: ah bueno, no es para tanto entonces.

Rochi: viste que no, las tías somos buenas.

Laia: si, lo son. - Dijo con una sonrisa.

Mery: ¿como se sienten ustedes? - Les preguntó a Laia y a Bruno.

Bruno: muy bien y muy feliz de estar acá.

Laia: si... Yo pensaba que me costaría más adaptarme pero sin todos muy buena onda conmigo acá.

Cande: nosotros queremos que ustedes se sientan como en su casa, en familia.

Bruno: lo hacen muy bien, a mi me gusta la familia Estrella, es muy copada.

Lali: gracias pendejo pero es hora de la siesta.

Bruno: pero yo ya estoy grande para siestas... - Dijo haciendo puchero y provocando la risa de todas.

Lali: señorito, hay que descansar un poquito para crecer. ¿O te querés quedar petiso como yo?

Bruno: no, no... Yo quiero ser alto como Peter.

Lali: entonces vamos a dormir. - Bruno se fue enseguida con Lali.

Las demás se quedaron ahí charlando un buen rato hasta que Peter llegó con Alexia y no muy buena cara. Si bien habían encontrado la foto y la habían eliminado, no habían conseguido terminar con el chantaje. Además, recordó lo que habló con Benja acerca del club y era necesario para él hablar con Oriana al respecto.

Les pidió a sus cuñadas que lo dejarán quedarse a solas con Ori y accedieron encantadas a dejarles la mesa. El comedor ya estaba libre de huéspedes y podrían hablar con total intimidad porque Julián estaba comiendo en la cocina.

Ori: tenes mala cara Pit... ¿Pasó algo?

Peter: si pendeja... Tengo que contarte algo.

Ori: me estás preocupando Peter... ¿Qué pasa?

Peter: es tu viejo... Abrió un club de strip que se dedica a la trata de blancas pero... Tenes una hermana mayor Oriana.

Ori: ¿que mi viejo que? - Dijo dejando caer el vaso de agua que sostenía en la mano.

Peter: me llegó la información y la confirmé gracias a unos colegas del trabajo... Lo siento mucho Ori, te juro que no sabía nada.

Ori: no lo puedo creer Peter... Mi papa nunca dejará de sorprenderme.

Peter: ni a vos, ni a mi, ni a nadie Orí.

Ori: ¿sabes quién es mi hermana? - Peter asintió. - ¿Y sabes donde está?

Peter: labura como camarera en el club.

Ori: quiero verla.

Peter: es peligroso Oriana.

Ori: ¡Te dije que quiero verla! - fue un grito desgarrador que rompió en pedazos a Peter.

Leo: ¿que pasa? ¿qué le hiciste? - preguntó molesto saliendo de la cocina junto a Julián.

Peter: dejadnos solos y vos no te metas Leo, es un asunto familiar. - Le dijo bastante serio.

Ori: no Peter, la conversación acaba acá... Después te veo. - Le dio un abrazo a su primo y se fue corriendo.

Julian: ¿que pasó? - preguntó preocupado una vez que Leo se fue atrás de Oriana.

Peter: no es asunto tuyo.

Al día siguiente...

Lali se levantó temprano y fue a la comisaría donde decía la multa que tenía que ir. Sacó plata en un cajero cercano y cuando entró, vio al joven guardia atrás de la ventanilla. Se acercó finjiendo una sonrisa de alegría pero lo cierto es que no recordaba mucho más que su cara.

Xxx: srta. Estrella, es un placer volver a verla. - le dijo con una sonrisa.

Lali: buen día oficial, vengo a abonar la sanción.

Xxx: que puntual srta, pero podemos perdonarsela si nos hace un favor.

Lali: ¿perdón? - preguntó desconcertada.

Xxx: estamos armando un evento benéfico y necesitamos artistas... ¿Qué tal vos y una joven que estaba con ustedes... Oriana?

Lali: no sé prefiero pagarles y si eso hablar del show.

Xxx: tómalo como un trabajo a la comunidad y quedaría saldada la deuda. Tenes doce días más para pensarlo. - Le devolvió la plata que ella le había entregado.

Las Estrellas (Adaptación) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora