116. Hotel del terror.

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Rochi consiguió curarle y coserle las heridas a Pablo, pero cuando salieron de la enfermería fueron doblemente sorprendidas al encontrarse a todos atados en la recepción. Se miraron y al instante cayeron desmayadas. Solo podían escuchar el celular de Peter, que sonaba, una y otra y otra vez sin descanso. Era Lali, que sentía que algo no iba bien y así era, el hotel había sido tomado por los prestamistas a los que Pablo les debía mucha plata. ¿Casualidad que eran los hombres de Alberto? Quien sabe, la realidad es que ocuparon todo el hotel.

Sellaron todas las entradas y salidas, ventanas y conductos de ventilación. Nadie podía entrar, ni salir. Los separaron en grupos por habitaciones. Rochi y Mery estaban con Pablo y las tres nenas en la enfermería, Gastón, Daniela y Agus estaban en la cocina. Leo, Nico y Benja  estaban junto a las mucamas en la recepción y por último Peter y Oriana estaban en la habitación más lujosa del hotel.

Ori: ¿Qué mierda hacemos acá?

Peter: no sé Ori pero va a estar todo bien.

Ori: ¿A vos te parece?

Peter: si, no van a hacerle nada a nadie.

Ori: no sé Peter... Algo buscan. Además se me hacen conocidos.

Entonces la puerta se abrió, Alberto entró sonriente a la habitación donde Peter y Ori lo miraban Boquiabiertos.

Peter: ¿Qué haces vos acá?

Ori: era obvio Pit... Ya lo intentó una vez en casa de Mery y Benja...

Alberto: y no voy a descansar hasta que me den la plata que me corresponde.

Ori: a vos no te corresponde nada porque no te dejó nada - Alberto le levantó la mano - ¡Dale! Pégame.

Alberto: ¡No me desafies pendeja! - golpea a Peter - o él pagará por vos.

Ori: ¿Qué porque soy tu hija o porque soy mujer? Sos una basura.

Peter: no te vamos a dar la plata.

Alberto: entonces me quedaré con el hotel.

Ori: vas a pagar por esto Alberto, te lo aseguro.

Alberto: sos una pendeja inmadura Oriana, ya vas a aprender que con tu viejo no se juega.

Por su parte, Lali estaba muy preocupada. Llamaba a todos los teléfonos del hotel y nadie atendía, eso empezaba a resultarle raro, demasiado. Cande y Euge junto a Nicolás la seguían con la mirada, de un lado a otro, de acá para allá sin parar un segundo de golpear la pantalla del celular con las uñas irritando a todos los que estaban a su alrededor.

Cande: ¿Qué pasa Lali? - rompe el hielo.

Lali: nadie atiende.

Euge: ¿Qué decís?

Lali: Pablo llegó herido al hotel, despues de hablar con Rochi, fui a buscar a Ori como me pidió Peter pero nunca se subió al avión. Lo llamo, no atiende, llamo a Ori y tampoco. - siguio caminando mientras los tres la escuchaban atentos - Así que llamo al hotel, no hay respuesta. Se me ocurre llamar a todos y cada uno de los empleados, cuñados y ¿Saben que? ¡Nadie atiende!

Nicolás: ¿Y en qué pensás?

Lali: en que algo va muy mal, tenemos que volver.

Euge: ¿A vos te parece?

Cande: estoy de acuerdo con Lali... No es normal que nadie atienda, mirá si Alina va a haberlos matado a todos.

Lali: no digas eso ni en broma... Pero algo está pasando.

Nicolás: trataré de reservar vuelo para hoy mismo.

Euge: está bien volvemos ¿Pero y si llamamos a la policía para que se acerquen?

Cande: ¿Y si miramos las cámaras? Yo tengo la app que transmite en directo.

Lali: ¿A qué esperas? - Cande saco el celular y abrió la app - ¿Qué mierda?

Euge: mi amor... ¿Por que está atado?

Nicolás: hace una screenshot de eso y mandamelo, tengo contactos.

Cande: de acuerdo - hizo lo que dijo Nicolas y continuo mirando cámaras. - no se ve nada más que un montón de hombres caminando por los pasillos.

Lali: además fíjate, ni los chicos ni las mucamas se mueven... Parecen estar dormidos - Lali abre la boca al ver a Alberto aparecer en la recepción - ¿Alberto?

Euge: ¿No estaba preso?

Nicolás: al parecer también tiene contactos... Chicas no podemos volver en avión.

Cande: ¿Qué?

Nicolás: no sé cómo pero no puedo comprar ningún pasaje a nuestros nombres.

Lali: ese hijo de puta lo tenía todo calculado. Pablo solo fue una distracción. Solo quiere a Peter y a Oriana... Tenemos que volver.

Nicolás: trataré de hablar con mis contactos para subir a un ferri.

Euge: dale... ¿Porque nos pasa esto?

Cande: es mi culpa... Yo me fui y ahora está pasando esto.

Lali: por favor Cande basta, no es tu culpa. Es culpa del enfermo de Alberto que solo  piensa en plata y en joderle la vida a la gente. - Lali lo ve a Mariano Martínez, de vuelta acompañado de Camila. - tiene que ser joda...

Euge: ¿El que Lali? - hace un gesto con la cabeza.

Cande: ah no, el pesado de Mariano...

Nicolas: chicas, perdón pero no podemos volver en barco...

Lali: yo me ocupo... - se mordió la lengua y el orgullo y se acercó a Mariano y a Camila - Hoolaa Mariano... Camila ¿Todo bien?

Camila: hoola ¿Lali? - asintio educada - si muy bien ¿Vos?

Lali: no tanto - esboza media sonrisa - ¿Te importa si hablo con Mariano un segundo?

Camila: no, tranquila. - se apartó un poco a mirar el celular.

Mariano: te noto tensa ¿Estás bien?

Lali: no... Mirá Mariano sé que han pasado muchas cosas pero mis hermanas, empleados y amigos están secuestrados en el hotel y a nosotros nos han "encerrado" acá... Estoy segura que vos podés conseguirme un vuelo privado.

Mariano: ¿Tan grave es la situación que me pedís ayuda a mí? Mira lo que es el destino, que además de cruzarnos siempre que viajamos terminaste vos acudiendo a mí - dijo ironico y a Lali se le ensancharon los agujeritos de la nariz - te voy a ayudar tranquila. En media hora acá y te digo todo.

Lali: gracias... De verdad que me estarías haciendo el favor de mi vida.

Mariano: después de lo que pasó con Martina, te lo debo Lali...

Lali: gracias Mariano, en media hora nos vemos acá.



Las Estrellas (Adaptación) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora