¡NOVELA FINALIZADA®!
Katrina Downey había cometido uno de sus mejores hazañas: se acostó con Chris Evans. La pequeña de Rob Downey Jr. había estado con uno de los más grandes amigos de su padre, no se sentía culpable.
Chris Evans estaba apunto de pe...
Episodio 16: Último adiós. ❛Jamas pude demostrarle cuánto la amaba.❜
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Chris se había enterado que hoy por la noche Katrina se iría a Londres, estaba en su auto conduciendo al aeropuerto de Los Ángeles, estará era su última oportunidad de pedirle a Katrina que se quedará y puedan ser feliz juntos, demostrarle cuánto la quería. Estacionó su auto en medio del parking del aeropuerto, pudo ver a lo lejos a Katrina con su maleta caminando a la entrada del aeropuerto hacia que corrió hacia ella.
—No te vayas—dijo Chris agarrando el brazo de Katrina, ella volteo a mirarlo.
—¿Que haces aquí, Evans? Debes de irte, déjame ir voy a perder mi vuelo—dijo Katrina y Chris negó.
—Prefiero que lo pierdas a perderte a ti una vez más, Katrina—dijo Chris y Katrina suspiro, lo estaba haciendo mucho más difícil de lo que necesitaba que fuera. Katrina le estaba doliendo dejar a su familia y sobre todo dejar a Chris en Estados Unidos, pero era lo mejor para ella irse a Europa.
—Por favor, de la mejor manera te lo voy a decir: Lo nuestro ya no tiene solución, debes entender que lo mejor es que me vaya a Londres, sé que encontraras a alguien que en verdad la quieras y nunca la engañas, no lo hagas como lo hiciste conmigo—dijo Katrina y fue ahí donde Chris sintió un fuerte dolor en su pecho acompañado de un nudo en la garganta, no conocía esa faceta suya de ser tan sentimental pero lo que sentía por Katrina era real.
—Yo no te quiero, yo te amo, Downey—confeso Chris y Katrina bajo la mirada, aquellas palabras tocaban el corazón de Katrina y le hacían querer volver a los brazos de Chris, volver a lo que fueron.
—Y yo a ti, si eso querías saber, si por eso insistas pues te lo digo: Yo también te amo, te quise demasiado pero es hora de dejar que tú y yo tomemos caminos diferentes—dijo Katrina y Chris negó, no podía articular ni un sola palabra, escuchar que Katrina lo amaba lo ponía mucho más triste, estaba dejando ir a la que él había elegido como la mujer para su vida.
—Por última vez te lo pido, Kat. Dame una sola oportunidad para demostrarte cuánto te amo—dijo Chris y ella le sonrió amablemente, era demasiado tarde para dar una oportunidad, era demasiado tarde para recuperar lo que fueron, era demasiado tarde para arrepentirse.
—No hay una oportunidad, me iré a Londres hoy y tú no podrás impedir eso—dijo Katrina y Chris envolvió sus brazos alrededor de Katrina, si la estaba perdiendo entonces quería decirle adiós, recordarla para siempre.
—Si te estoy dejando ir es porque estoy aceptando lo que tú quieres no porque me halla rendido, si te estoy dejando ir es porque quiero pensar que en un futuro nosotros si tendremos un nosotros.
Aquellas palabras de Evans tocaron el corazón de Katrina y por segunda vez estaba llorando en los brazos de Chris, el acariciaba el cabello de la joven mientras intentaba no derrama ninguna lágrima pero era imposible, había querido aquella joven desde mucho antes que lo suyo comenzará, la había visto crecer por los pasillos de las grabaciones, la había acompañado en sus peores momentos, siempre había sido su soporte y se había convertido en la mujer que el quería para toda su vida, le dolía perder a Katrina Downey.
—¿Porque lo hiciste? Pudimos ser felices juntos, Evans—dijo Katrina entre lágrimas y el solamente le abrazo mucho más fuerte.
—Porque soy un imbecil, cariño. Soy un idiota que se dio cuenta cuánto te quería cuanto ya no te tenía—dijo Chris, cada palabra que salía de la boca de Evans hacia que Katrina lloraba más entre sus brazos, era una escena realmente triste, dos personas que se amaban despidiéndose por un largo tiempo en medio de la noche en un aeropuerto, se notaba el dolor, la tristeza y la cólera de las dos personas.
—Me tengo que ir—dijo Katrina alejándose un poco del cuerpo de Chris, el le limpio las lágrimas que caían por las mejillas de la joven y pasó un mechón de su cabello por detrás de su oreja.
—Quiero que recuerdes cuánto te quiero, que jamás voy a dejar de amarte, que siempre estarás en mi mente y que te esperaré—dijo Chris para besar a Katrina al finalizar sus palabras, Katrina acepto el beso como una despedida de lo que fueron y lo increíble que fue estar al lado de Chris.
—A pesar de lo que hiciste siempre fuiste una increíble persona, Evans. Te agradezco todo lo que vivimos juntos—dijo Katrina para soltar la mano de Chris y dar medio vuelta con su maleta caminando a la entrada del aeropuerto con lágrimas cayendo por sus mejillas, Chris veía como Katrina se iba y aún sentía aquel nudo en la garganta y sus ojos se nublaron de las lágrimas que querían salir por ver a la persona que amaba irse lejos de él.
[...]
Había pasado solo una semana desde que Katrina estaba en Londres, se había enfocado en comenzar sus estudios en la Universidad Estatal de Londres y seguir su propia línea de diseño para Adidas, le estaba yendo bien siempre estaba concentrada en sus estudios y trabajo y así no pensaba en Evans pero eso era imposible, cada noche recordaba lo más mínimo vivido con Chris y lloraba en silencio en su habitación, a veces hablaba con Sebastián y el siempre escuchaba su pequeña amiga, odiaba verla sufrir.
Chris por su parte había comenzado a tomar alcohol mucho más de lo habitual, habían cancelado el rodaje de Avengers:Endgame por culpa de Evans, Robert trato de hablar con él pero era imposible el único que podía hacer entrar en razón a Chris era Sebastián, el chico había decidido perdonar a su mejor amigo y ayudarlo a poder lidiar con el sufrimiento de tener a Katrina lejos, todos estaban tristes que Katrina se halla ido para Londres. Aquella joven alegraba los días de cada persona, llenaba de risas los set de grabación y era luz para el estudio.
—Puedes dejar esa mierda de una vez, Evans. Te lo estoy pidiendo de la mejor manera posible—dijo Sebastián entrando al departamento de Chris, el hombre está descuidado no había salido de su casa hace una semana y lo único que estaba alrededor de él era botellas de alcohol. Stan le arrebató la última botella de whisky que tenía entre sus manos y Chris se quejó.
—No pensé que tú vendrías, eras el que menos esperaba—dijo Chris totalmente ebrio, Stan lo miró con desagrado.
—Yo sé que me extrañas te, animal—dijo Stan, empezó a limpiar un poco el lugar de Evans, si no fuera por la ama de llaves que siempre Stan mandaba al departamento de Chris esto sería un completo desastre.
—A quién extraño es a Katrina, ¿Sabes algo de ella? No sé su número en Londres no la he podido llamar—dijo Chris y Sebastián suspiro.
—Cambio su número, Evans.
—¿Porque hizo eso? Te das cuenta que no la voy a poder llamar—dijo Chris y Sebastián negó, los dos a su propia manera se estaban haciendo daño por un maldito error, hasta el era capaz de reconocer que solo fue un beso y que ellos no merecían separarse por Johanson.
—Lo hizo por eso mismo, no quiere que la llames—dijo Sebastián y Chris camino hacia su amigo—¿Que te pasa?
—Dame tu celular—dijo Chris y Sebastián negó así que Chris empezó a rebuscar en la chaqueta de su amigo.
—Deja de rebuscar mis cosas, Evans. Estás demasiado ebrio como para analizar donde podría estar mi celular—dijo Sebastián y Chris volvió al sofa sin el celular de Stan.
—Solo quiero saber cómo está ella, cómo le está yendo en Londres—dijo Chris.
—Le está yendo muy bien, sacará su propia línea de diseño para Adidas mientras termina sus estudios en la Universidad, pero al igual que tú está sufriendo y la verdad es que detesto que ustedes dos queriéndose tanto estén sufriendo—dijo Sebastián suspirando y Chris asintió para al final quedarse dormido en el sofá de su sala. Sebastián miró a su amigo y lamento lo que estaba pasando, estaba desalineado y se notaba que no había comido en días solo consumido alcohol, cada uno sufría la pérdida de otro a su manera pero al final los dos vivían con la ausencia del otro, dos personas con el corazón roto.