[ ¿familia? ]

| capitulo catorce |

mafia.
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elevo sus manos para llevarlas a su boca, exhaló aire caliente, produciendo un cambio químico en contraste contra el aire extremadamente frío que había en el lugar, cada vez que respiraba exhalaba el conocido "vaho".

sus manos temblaban al compás de sus piernas, las junto para sobarlas rápidamente generando una fricción que le daba algo de calor a sus extremidades.

ese día se encontraba nevando, los copos caían lentamente sobre los tejados de las casas y las cabezas de las personas, la nieve se acumulaba en el suelo permitiéndole a los niños jugar en ella y formar ángeles de nieve.

había viajado desde lejos, bueno, no tanto, de Francia a Estados Unidos viajó demasiadas horas en un avión privado.

era extremadamente conocida por ser la hija de uno de los jefes de las tres mafias más grandes de Francia, pero por otro lado, era conocida por ser una niña totalmente inocente y cegada al trabajo que ejercía su padre.

decidió tomar un cambio de ambiente y negociar con la gran mafia de Estados Unidos, Los Ángeles más especifico, era la más grande de ese lugar, era apodada como la mafia "nankurunaisa" , palabra dicha en japonés, pero traducida al español como "con el tiempo se arregla todo".

realmente no puede creer que un nombre tan lindo y con un significado tan profundo pueda pertenecer a una mafia.

se adentro a los barrios más desalojados de esa ciudad, paseándose por las calles escuchaba algunos gritos y ruidos de disparos, signos de que estaba realmente cerca de su objetivo.

se detuvo finalmente después de una búsqueda ardua, en frente de una mansión moderna y higienizada, nadie podría pensar que allí vivían los más crueles sicarios y los más confiados narcotraficantes.

lo único que sabía de aquella reconocida mafia, era que utilizaban apodos únicamente del idioma japonés, su líder se nombraba como "Akumu", traducido como "pesadilla", el gran líder disponía de muchísimo dinero, era uno de los sicarios más eficientes en la zona y tenía demaciada droga para negociar y venderla, el manejaba todos los negocios e infringida las reglas, todo el que intentó matarlo, terminó con una bala en el cráneo.

su mano derecha, disponían del mejor sicario, nombrado como "Zankoku", traducido como "crueldad", y bien que le quedaba aquel apodo, no era nombrado como el mejor sicario por nada, su cuerpo desprendía agilidad y rapidez en sus actos, esquivaba las balas como si fueran juguetes y todo lo que estaba en sus manos se convertía en un arma.

El mejor en su arte, el ágil y fiel maltratador, aquel que prefería jugar un poco con las víctimas para sacarles información y después matarlas, o simplemente lo hacía por diversión, el aclamado "Kyōfu" estaba en esta gran mafia, su nombre se traducía a lo que le generaba a sus víctimas, "terror", el solía colarse en una que otra misión junto a los sicarios, disponía de un arma especial, unos afilados hilos de diamantina que al tenzarlos, podían cortar tu cuello con facilidad.

"Himitsu", traducido como "secreto", era aquel informante que todos codiciaban, lograba contarte desde los negocios de la mafia más cercana a la lejana, no había dato que el no supiera, nada se le escapaba de las manos. nadie se podía salvar de él, no tenían un rostro, un cuerpo, una identidad para estar advertidos, no había nada, solo cuerpos degollados que el dejaba al no necesitar más información de una persona.