“ Y no sé bien, sí a esta altura subo o bajo.”
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Bien, hora de actuar, ya no hay momentos para pensar, el momento es ahora...Sueno como una canción, ¿cierto?
También debo dejar de hablar conmigo misma frente al espejo.
No, no puedo hacer eso cuando mi único consejero es mi propio reflejo.
Avanza,idea,es lo único que tenés que hacer.
Me recrimina y siento que hay razón en ello. Dos días después de la consulta, ¿Qué he hecho? Absolutamente nada y ya no puedo quedarme mirando el techo de mi habitación y tratando de evitar lo inevitable.
Si avanzó con él embarazo se darán cuenta.
Si aborto se darán cuenta, no es como si fuera muy fácil ocultarlo.
En conclusión, mejor me pongo a organizar todo.
Digo que, al menos dos horas después, vi mi trabajo terminado. Se extendía a lo largo y ancho de mi cama, definido por colores estratégicos para dividir días, cosas y metas con ellas. En un apartado se encontraba la lista de alimentos que podía y no podía comer. Mi cronograma de metas, esquema, o como se llame esta listo. Será mi guía, mi plan en esta travesía. Me siento feliz de mi trabajo.
Enrollo la cartulina hasta que quede fina y la sostengo con una liga, agarro cinta plástica y me voy a los pies de mi cama con el rollo en manos. Arranco dos pedazos de la cinta, pongo el rollo debajo de la cama, pegado a la estructura lateral derecha de madera, tomo un pedazo y hago que quede la mitad dentro del ojo del rollo y la otra en la madera. Hago el mismo proceso con el otro extremo y espero que no se caiga. Veo que resiste, pero aun así tomo otros dos pedazos para reforzarlo.
Bien, espero que funcione porque por obvias razones no puedo pegarlo en la pared.
Un día nuevo y me dirijo al colegio. Este es otro tema que no sé como llevaré cuando mi panza incremente de tamaño, espero para ese momento mi madrina sepa y, con ayuda intergalactica, terrenal, celestial dejé quedarme con ella... Y con suerte al baby también.
A primera hora tengo física según el horario. Resoplo fastidiada, no es mi materia favorita, voy excelente en ella, sí, pero no quiere decir que me agrade. Ingreso a los jardines mientras veo por la vidrio del auto a otros alumnos llegando. Tengo a Luna a mi lado, no tan junto, pero a mi lado; no ha parado de reír mientras ve el teléfono, en algunas ocasiones por mi visión periférica puedo ver que escribe y en otras escucho su voz cuando envía audios. Me irrita lo escandalosa que es, no veo que de bueno le ve al día, solo es una mañana que se va a llenar de próximos trabajos y tareas, otro día que nadie se pondrá de acuerdo con la competencia, otro día que matteo estará con sus intensas e irritantes miradas, y otro en que veo a simón decidiendo si acercarse a mi o no.
¿Por qué tienen que ser tan indecisos?
Ugh, igual rechazaré a cada uno.
Mejor que se queden con sus orgullos intactos.
Me bajo del auto, veo a mis amigas esperándome en la entrada. Saludo a cada una con beso en la mejilla, jazmín pregunta algo, seguro que para que cualquiera de las dos contesté, no le presto atención y camino a las puertas de madera oscura con la certeza de que ellas van tras de mí. Lo primero que que se ve es una especie de vestíbulo y luego dos pasillos, dos a cada lado, tomo el derecho ya que mi salón va a esa dirección, el otro pasillo conduce a primaria. Como se ve, estamos divididos, pero ellos empiezan un poco mas tarde. Cosas de la institución.
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El Resbalón De La Reina
Fiksi PenggemarMi vida, mi comportamiento y mi físico siempre han estado conforme a lo requerido y estipulado por la sociedad, nada, ni una sola pieza se ha desencajado, hasta que el vestido de princesa que siempre ha ocultado mis imperfecciones me ha empezado a...